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  • ¿A qué nos referimos cuando hablamos de preservación histórica?

  • ¿Por qué fomentar la preservación histórica?

  • ¿Cuándo fomentar la preservación histórica?

  • ¿Quiénes deberían fomentar la preservación histórica?

  • ¿Cómo fomentar la preservación histórica?

Cuando la antigua Checoslovaquia derrocó al gobierno comunista en 1989, su economía era un caos. Las reservas de dinero destinadas para los servicios, la infraestructura y el desarrollo económico eran mínimas. Sin embargo, el presidente Vaclav Havel decidió invertir millones en la restauración del Obecni Dum (el palacio municipal), monumento típico de Praga.

El Oecni Dum fue construido a principios del siglo XX e inaugurado oficialmente en 1912. Construido y decorado al estilo Art Nouveau, su arquitectura, detalles, ornamentación y decoración representan el trabajo de casi todos los artistas checos más renombrados de la época. El edificio es considerado un símbolo nacional. En 1918, desde sus escalones se proclamó la independencia de Checoslovaquia.

Durante los 40 años de gobierno comunista, el Obecni Dum, como el resto de la ciudad de Praga, fue abandonado y comenzó a deteriorarse. Havel consideró que la restauración del edificio era fundamental para el resurgimiento de la nación, y ésta estuvo de acuerdo. Se escucharon pocas quejas con respecto al dinero invertido en la reforma de esta magnífica sala de conciertos y salón de reuniones, para devolverle su gloria pasada. Esto indicaba que el país era libre nuevamente y controlaba su propio destino.

Los edificios históricos de la comunidad, los vecindarios y los paisajes representan las intenciones, creencias y  vidas de quienes los construyeron, vivieron o trabajaron en ellos. Cuentan historias sobre las comunidades de esa época y sobre cómo se convirtieron en lo que son hoy y nos ayudan a comprender quiénes somos. La preservación de esas historias es una  parte importante en la construcción de una comunidad saludable. En esta sección nos referiremos a la preservación histórica; conservar y disfrutar de la historia de la comunidad, preservando los edificios y demás elementos comunitarios relacionados a ella.

¿A qué nos referimos cuando hablamos de preservación histórica?

En términos simples, la preservación histórica significa salvaguardar la existencia y el aspecto de los elementos históricos de la comunidad. Estos elementos incluyen:

Estructuras

Las construcciones.

Las casas, edificios comerciales e industriales, graneros, puentes, monumentos; toda construcción hecha por el hombre, que tiene valor o importancia histórica.

El valor histórico reside en el elemento histórico en sí. Puede ser valioso como ejemplo de estilo arquitectónico o proceso industrial ya en desuso o simplemente por su antigüedad. Por ejemplo, gran cantidad de casas excepcionales al momento de su construcción tienen valor histórico porque han perdurado y se mantienen entre las pocas que han sobrevivido hasta la actualidad. En San Juan, Puerto Rico, por ejemplo, el fuerte El Morro conserva su importancia histórica, ya que es considerado el fuerte más importante de la isla y representa un periodo dominado por el imperio español.

La importancia histórica está generalmente relacionada con el vínculo entre el elemento y un evento o serie de eventos en particular. Muchas construcciones de valor histórico, como el Obecni Dum, son importantes desde el punto de vista arquitectónico, aunque no necesitan resaltar esa importancia. En EE.UU. por ejemplo, el granero de piedra del siglo XVIII en Valley Forge, Pennsylvania, cuartel general de George Washington (uno de los líderes más importantes de la insurgencia y posteriormente, el primer presidente de EE.UU.) durante gran parte de la Revolución estadounidense, no se diferencia en nada de cientos de otras casas de la época en el área, las cuales han sobrevivido hasta nuestros días, pero su prestigio radica en el hecho de que fue el cuartel general de Washington.

Los vecindarios.

La importancia histórica de  los vecindarios radica en su arquitectura o en el hecho de que aún actualmente presentan aspectos de una era pasada. El centro del pueblo de Ainsa en la provincia de Aragón, en el norte de España, es un pueblo medieval perfectamente preservado, con construcciones que datan del siglo XI y que aún hoy funcionan como residencias y negocios. Muchas ciudades latinoamericanas también conservan con sus edificios su pasado colonial.

Los paisajes.

Un paisaje en sí puede tener valor o importancia histórica. El actual paisaje de la Toscana, una región de Italia, compuesta de pueblos en la cima de los cerros rodeados de viñas y olivares, no difiere en nada de los paisajes plasmados en las pinturas del Renacimiento y  por ello es una valiosa ventana al pasado. El valor histórico del campo de batalla de Gettysburg radica en el hecho de que fue el punto culminante de la Guerra Civil estadounidense.

Características de las construcciones o los paisajes.

Carteles de neón o de tabernas, placas históricas, de los siglos XVII y XVIII,  bombas de gas anteriores a la segunda guerra mundial, paredes de piedra serpenteando a través de los bosques que alguna vez fueran campos de cosecha, árboles de 1000 años de edad, pinturas murales, pirámides, – todos estos y muchos otras elementos pueden ser considerados de valor histórico.

De acuerdo con los Servicios de Parques Nacionales (SPN) de EE.UU. la cual que supervisa el programa de la Secretaría de Preservación Histórica del Interior.

En realidad incluye cuatro actividades diferentes:

Preservación histórica

Preservación.

Preservación significa preservar el aspecto actual de un lugar. Se considera que todos los rasgos y los materiales históricos etc., deben ser resguardados dentro de lo humanamente posible para ser restaurados o reparados y conservarán su aspecto actual en el futuro. La preservación valora no sólo el origen de la construcción, sino también a sus ocupantes a través del tiempo y los usos que se le dieron, y asume que toda evidencia de ello será preservada, así como también las características originales de la construcción.

Rehabilitación.

La rehabilitación es la renovación de la propiedad histórica deteriorada, con frecuencia para un uso distinto del original. Al igual que la preservación, la rehabilitación valora la conservación y la restauración de los rasgos históricos, pero otorga mayor libertad de acción en lo referente a la reparación y el reemplazo de los elementos que han sufrido un daño severo a lo largo del tiempo.

De acuerdo con SPN, “los estándares de la preservación y de la rehabilitación están enfocados en los materiales y la características históricas, las terminaciones, los espacios y las relaciones espaciales que le otorgan su carácter histórico a la propiedad”.

Restauración.

Restaurar significa devolver a una construcción o paisaje su aspecto original o el que tenía durante un período histórico importante de su pasado. Esto significa, eliminar toda reparación o alteración posterior a ese período, incluyendo construcciones adicionales y otras características importantes y recrear mediante la utilización de materiales y técnicas históricas, los rasgos faltantes conocidos o evidentes.

Reconstrucción.

La reconstrucción es la creación de una réplica histórica exacta de una propiedad específica que ya no existe o el ejemplo de una perteneciente a un período histórico determinado. La reconstrucción puede ser a base de materiales y técnicas tradicionales, pero con materiales nuevos, y por lo tanto, diferentes de los materiales encontrados en una estructura original. (Por ejemplo; el pino de doscientos años de edad es tan duro que es difícil insertar un clavo en él, mientras que el pino nuevo es muy blando).

Con frecuencia, la reconstrucción es utilizada como parte de una exposición histórica de alguna índole, aunque algún propietario particular podría construir una réplica de una casa antigua, simplemente porque le gusta. En EE.UU., en New Salem, Massachusetts, existe una réplica exacta de una casa del siglo XVII de Old Lyme, Connecticut. El carpintero-restaurador que la construyó y vive en ella, refinó su conocimiento y maestría de las técnicas originales de albañilería y construcción del siglo XVII.

Es posible aplicar cualquiera de estas cuatro actividades a cualquiera de los elementos de los lugares históricos que se desee preservar.

En general hay fricciones entre quienes están a favor de la preservación y quienes consideran que la restauración es la mejor manera de preservar los lugares históricos. En un pequeño pueblo de Nueva Inglaterra, durante tres años hubo una disputa sobre una casa de 1819. Los vecinos en su conjunto deseaban preservarla como estaba, incorporándole algo de principios del siglo XX y una balaustrada (baranda) alrededor del techo. La fundación histórica que había adquirido la casa, aspiraba a restaurarla en su aspecto original de 1819, y en especial a derribar la simulada y derruida valla de estacas que formaba la cerca a los costados de la casa. Para la mayoría de los residentes, la valla que en verano se cubría con un rosal trepador, era un rasgo característico del pueblo. Cuando la fundación derribó la balaustrada, el anexo y la cerca, desafiando abiertamente a la Comisión Histórica del Distrito, los vecinos de esa parte del pueblo declararon la guerra. Finalmente, la casa fue vendida a un particular, que reemplazó la balaustrada y el anexo y permitió que el pueblo reconstruyera la cerca (con fondos de recaudación local).

Las controversias como ésta son muy comunes y pueden ser difíciles de resolver, ya que en general ambas partes presentan buenos argumentos. A continuación presentamos algunos de los factores a tener en cuenta:

  • El hecho de que la construcción y el paisaje son únicos (ya sea como lugar histórico o en su condición o ubicación actual).
  • La importancia que tiene para la comunidad.
  • Su futuro.
  • El uso que se le da actualmente.
  • Su estado de conservación.
  • El costo de la preservación contra el costo de la restauración.
  • Los deseos de la comunidad.
  • Las restricciones impuestas por los incentivos tributarios y demás fondos.
  • La disponibilidad de expertos para llevar a cabo una cuidadosa preservación o restauración.

¿Por qué fomentar la preservación histórica?

  • Preserva el carácter y el patrimonio histórico, arquitectónico y estético de una comunidad o área y proporciona una sensación de pertenencia y continuidad. La expansión suburbana y el desarrollo de los caminos, hacen que todos los lugares parezcan iguales, por lo tanto es importante que las distintas comunidades mantengan su identidad intacta. Solamente, una o dos construcciones históricas destacables, pueden definir  una comunidad y  contarnos su pasado. Cuando se preservan los vecindarios y las áreas rurales en su totalidad, el efecto es mucho mayor. La percepción de la historia, enorgullece a la comunidad y contribuye a una mejor comprensión de su presente.

La preservación histórica contribuye a prevenir la expansión urbana. Dado que las construcciones históricas ya existen, y que la mayoría están en áreas pobladas, cada una de ellas que es rehabilitada y utilizada nuevamente, elimina la necesidad de una nueva construcción dentro de un área que aún no está poblada.

  • Se convierte en un uso eficiente de los recursos. Mediante la preservación histórica los recursos se conservan, se reducen los desperdicios y se ahorra dinero restaurando y reutilizando las construcciones ya existentes en vez de demolerlas y construir nuevas.
  • Protege los métodos de trabajo antiguos. Los edificios modernos se construyen con la creencia de que serán utilizados durante un período relativamente corto de tiempo, entre 25 y 30 años. Debido a esto, la mano de obra en la construcción de la mayoría de los edificios no alcanza el nivel de calidad que ostentaba en el pasado, cuando los edificios eran construidos para durar indefinidamente. Mediante el trabajo en los edificios históricos, las nuevas generaciones de constructores, aprenden las técnicas para mejorar también los edificios modernos.
  • Le otorga carácter y/o encanto a una comunidad y enfatiza su singularidad. La preservación de edificios, barrios y paisajes antiguos puede determinar el aspecto de una comunidad y también convertirla en una atracción turística. Si estos elementos tienen importancia histórica o son inusuales, se transformarán en una fuente de orgullo para la comunidad y conducirán a otras mejoras.
  • Puede atraer inversiones y cambiar la esencia de un barrio o área en deterioro. Una construcción histórica o un barrio rehabilitados, puede ser el foco principal de un nuevo desarrollo comercial o residencial. Un área cuya apariencia original ha sido restaurada puede convertirse en un imán para los turistas y una fuente de trabajo para los ciudadanos. Los residentes tienen la oportunidad de intervenir en la restauración o rehabilitación como constructores o trabajadores si tienen conocimientos o como aprendices. En este último caso, hacia el final del proyecto, muchos de ellos habrán desarrollado suficientes conocimientos como carpinteros, albañiles o en otros oficios, como para comenzar nuevas carreras.

Gracias a su rehabilitación, un antiguo complejo molinero en el oeste de Massachusetts, se convirtió en el mayor museo de arte moderno del mundo, infundiéndole una nueva vitalidad al pueblo de North Adams. El MoCA (Museo de Arte Contemporáneo de Massachusetts), que fuera una empresa de estampado de telas en el siglo XVIV y principios del siglo XX, y más recientemente (hasta 1985) una corporación electrónica, se ha convertido en un destino turístico y es considerada la piedra angular de la revitalización del centro del pueblo.

  • Es la perfecta oportunidad para darle un uso imaginativo o creativo a un edificio que ha estado vacío porque ya no se utiliza para lo que estaba destinado, y al mismo tiempo, resolver un problema comunitario.  Un edificio industrial histórico vacío se puede convertir en un desarrollo residencial de precios accesible o de sociedades mixtas. Ambas opciones rescatan el edificio y proporcionan las viviendas necesarias en el área. Un hotel antiguo, rehabilitado como escuela, puede solucionar el problema de los salones de clase atestados y de qué hacer con el edificio en desuso.

Puede ser una buena inversión. La rehabilitación de los edificios históricos es relativamente económica para las empresas debido a la posibilidad de obtener incentivos en los impuestos, subsidios y otros tipos de apoyo para la actividad. Además, suelen atraer negocios, simplemente porque las personas les encantan los sitios como éstos. Por ejemplo, una interesante oficina o construcción comercial, en especial una construida previamente con un propósito diferente (una estación de ferrocarril o una escuela secundaria), probablemente atraiga clientes hacia un arquitecto o diseñador o compradores hacia un complejo de tiendas o restaurantes.

En EE.UU. existen dos ejemplos aparentemente exitosos: el Bourse en Filadelfia, un centro comercial y de oficinas en un edificio restaurado, del año 1895, donde funcionó la primera Bolsa de Valores de Estados Unidos; y el edificio de la antigua estación del transbordador en San Francisco (previa a la construcción del famoso Puente Golden Gate de esa ciudad), donde funcionan negocios, restaurantes y un mercadillo de productos agrícolas locales.

¿Cuándo promover la preservación histórica?

La oportunidad de promover la preservación histórica se presenta muchas veces durante la vida de la comunidad. Incluso en el caso de que la comunidad ya cuente con una política de preservación, existen una cantidad de circunstancias que hacen que sea más sencillo poner en práctica dicha política. A continuación presentamos ejemplos de algunos momentos especialmente adecuados para abordar el tema de la preservación histórica:

  • Cuando la comunidad está comprometida en la creación de un plan integral para el crecimiento y el desarrollo. Muchas comunidades elaboran planes exhaustivos, basados en sus visiones a futuro, los cuales son posteriormente reexaminados y revisados regularmente (en general cada cinco o diez años). En el caso de que el plan integral incluya la preservación histórica - en especial si contiene incentivos y/o reglamentaciones relacionadas con él –, entonces, siempre se tiene en consideración al adquirir edificios históricos o cuando la urbanización propuesta abarca construcciones o áreas históricas.
  • Cuando un vecindario exige un esfuerzo de planificación. Si el vecindario es de carácter histórico, ya sea de gran importancia o no, sus residentes querrán conservarlo. Si las viviendas son del año 1950, es posible que no se distingan por su arquitectura, pero sus residentes disfrutan de su apariencia y  atmósfera. Algunas construcciones que son realmente históricas – únicas, diseñadas por arquitectos famosos, muy antiguas – constituyen el corazón del vecindario y lo definen como tal. Por esa razón y por su valor histórico, deben ser preservadas. Los urbanistas y asesores pueden colaborar con los residentes, para que éstos comprendan cómo preservar la identidad del vecindario y la apariencia de las construcciones más importantes.
  • Cuando se intenta revitalizar al vecindario. La diferencia entre revitalización y planificación de un vecindario radica en que la revitalización se lleva a cabo cuando el vecindario se ha deteriorado física, económica y/o socialmente y requiere de un impulso importante para ser nuevamente adecuado para la vivienda. La preservación o rehabilitación de construcciones antiguas o históricas es en general una parte importante de la revitalización, porque proporciona un enfoque físico y psicológico del vecindario y crea oportunidades de trabajo e inversión.
  • Cuando dentro de un área existe la necesidad de crear viviendas de precios accesibles y existen construcciones históricas que pueden proporcionar la solución. La rehabilitación de una escuela, una biblioteca o un hotel para crear viviendas accesibles puede resolver dos problemas: el de los edificios abandonados que pueden convertirse en imanes para el vandalismo y el comercio de drogas, y el de encontrar espacios para construir viviendas accesibles. El mismo concepto se puede adecuar a la restauración de un antiguo hotel para convertirlo en espacio para oficinas; o un edificio industrial, en un centro de compras o una instalación de salas teatrales múltiples.
  • Cuando la urbanización está planificada dentro de un área que incluye una construcción o un vecindario histórico. Como parte del programa general de urbanización, se pueden ofrecer incentivos a los urbanistas para rehabilitar o restaurar las propiedades históricas o establecer límites y reglamentaciones sobre el uso de esas propiedades. La rehabilitación puede ser parte de un esfuerzo por parte del urbanista -  por ejemplo, la limpieza de terrenos baldíos.
  • Durante la celebración de una fecha histórica para la comunidad. Cuando la comunidad recuerda el aniversario de su fundación es probable que los urbanistas y los residentes deseen restaurar las construcciones existentes desde la fundación de la ciudad o que marcaron momentos importantes en su historia. La importancia de la relación entre las construcciones históricas y la identidad comunitaria, se hace evidente cuando el enfoque está puesto en la historia de la comunidad.
  • Cuando una propiedad histórica está en riesgo. Aun las construcciones típicas corren el riesgo de ser demolidas. Desde su apertura, en 1891, el Carnegie Hall en Nueva York ha sido considerado como uno de los más famosos y respetados salones de concierto. Ha sido testigo de algunos de las representaciones musicales más famosas de la era moderna y también el primer salón donde el Jazz fue reconocido como arte musical, con la banda de Benny Goodman.  Sin embargo, en 1960, se logró evitar su demolición gracias a  una gran demanda del público en general, en parte motivada por los esfuerzos del virtuosísimo violinista Isaac Stern.
    • Sin embargo, la demolición no es el único peligro que acecha a las construcciones históricas. La negligencia puede ser igualmente perjudicial. Si un edificio está vacío y carece de mantenimiento, el efecto de la erosión del agua y los insectos pueden destruirlo lentamente, al igual que una carga explosiva o una máquina excavadora. Si el daño no es detenido a tiempo, el edificio se puede quedar inutilizado, aunque siga en pie.
    • Una tercera amenaza para las propiedades históricas es la renovación, la cual destruye las características históricas que la hacen tan importante o inusual. Una vez que estos rasgos desaparecen, jamás pueden ser auténticamente reemplazados, solamente imitados. Por lo tanto, cuando un urbanista pretende cambiar la fachada de un edificio histórico, suprimir un piso o desmantelar el interior por completo, el carácter histórico del edificio se destruye, al igual que si hubiese sido demolido.
    • Cuando una de estas amenazas – la demolición, el deterioro o la renovación destructiva -  se cierne sobre una construcción histórica, cabe la posibilidad de movilizar a la opinión pública en su defensa. Los funcionarios tienen la potestad de cambiar las reglamentaciones o las políticas para mantener la construcción intacta, los ciudadanos pueden accionar por su cuenta y la amenaza de un reclamo público puede convencer a un urbanista de preservar la estructura de un edificio.

Un grupo de residentes de un pequeño pueblo del noreste de EE.UU. se unieron para salvar la iglesia de 200 años de antigüedad, en su área, la cual estaba vacía y deteriorada, y donde había funcionado el municipio y el salón de reuniones. Convencieron al pueblo – al dueño del edificio – de que se los alquilara por un dólar anual; recaudaron dinero a través de contribuciones locales y obtuvieron subsidios por parte de la Comisión Histórica del estado y otras fuentes. Restauraron la iglesia y la convirtieron en un centro de arte y representaciones para la región. Actualmente, mantenida y dirigida por la organización de ciudadanos responsables de su restauración, el sitio es un centro para las representaciones de reconocidos músicos locales e internacionales y es una de las instalaciones comunitarias más hermosas del estado.

  • Cuando la comunidad está comprometida con el turismo cultural. De acuerdo a la Fundación Nacional de Preservación Histórica, turismo cultural significa: “Un viaje hacia los lugares, cosas y actividades que representan auténticamente las historias y la gente del pasado y del presente. Incluye los recursos culturales, históricos y naturales” (información tomada de la página Web de turismo cultural de la Fundación Nacional (en inglés),. El turismo cultural ha probado ser una inyección económica para muchas regiones, en particular para las que cuentan con un pasado, pero no un presente industrial. Atraer turismo cultural está unido a la preservación histórica y, por parte del gobierno y otras fuentes sin fines de lucro, existe la disponibilidad de una gran cantidad de financiación y asistencia técnica para llevarlo a cabo.

En EE.UU., la región del valle de Blackstone en Massachusetts y Rhode Island (noreste del país) es una de las 27 regiones designadas como Áreas de Patrimonio Nacional, por el Servicio Nacional de Parques, debido a su importancia histórica, cultural o natural. Con la ayuda financiera del gobierno federal, grupos sin fines de lucro y la recaudación de fondos locales, un grupo de desarrollo comunitario local, restauró un canal industrial y gran cantidad de los molinos en sus orillas, como también otras atracciones que distinguen al valle como el lugar de nacimiento de la Revolución Industrial de los EEUU. Como resultado, una porción de las industrias perdidas del valle, han sido reemplazadas por el turismo cultural, generando empleos, negocios, ingresos y orgullo local

  • Como parte de una iniciativa de capacitación para el empleo dirigido a las poblaciones o individuos en riesgo. Un programa como éste puede servir diferentes propósitos: preservar el elemento histórico dentro de la comunidad, capacitar a futuros preservacionistas que luego podrán trabajar en otros proyectos y ayudar a las personas -  en particular a los jóvenes en situaciones difíciles (ya sea de pobreza, en rehabilitación por drogadicción, como miembros de bandas, etc.) a darle un nuevo rumbo a sus vidas.

Las Asociaciones Comunitarias Piedras Angulares, basadas en Santa Fe, Nuevo México, aprovechan varias de estas posibilidades. Trabaja conjuntamente con las comunidades en la restauración de construcciones históricas en el sudeste de los Estados Unidos, poniendo especial énfasis en los jóvenes hispanos y nativo americanos. De acuerdo con la página Web de la organización, “el enfoque comunitario de Piedras Angulares para la preservación de las construcciones históricas combina la preservación histórica con el aprendizaje de la juventud en riesgo, la formación laboral para adultos, la promoción de colaboraciones en la comunidad y el desarrollo económico a través del turismo cultural”.

¿Quién debe fomentar la preservación histórica?

Existe una cantidad de personas que podrían estar interesadas en promover la preservación histórica, entre ellos:

  • Funcionarios públicos y urbanistas. Ya sea debido a razones económicas o sociales, quienes están a cargo de la política, tienen un interés especial en preservar la historia de la comunidad y en que los recursos históricos sean considerados como bienes comunitarios.
  • Dueños de propiedades de valor histórico, incluyendo a los promotores inmobiliarios, las empresas e industrias y los propietarios particulares. La oportunidad de preservar, restaurar o rehabilitar sus propiedades con ayuda de fondos, como también las razones por las cuales son dueños o eligen comprar esas propiedades en primer lugar, con frecuencia motivan a los propietarios a preservar su historia.
  • Urbanistas de la comunidad. Debido a las razones ya expuestas, las propiedades históricas pueden atraer beneficios económicos y modificar el futuro de las comunidades.
  • Quienes se benefician con el turismo. Dado que la preservación histórica atrae a los turistas, quienes trabajan en el área de turismo, ya sea hoteles, hostales, posadas, restaurantes, museos, negocios, estaciones de servicio, etc. son directamente beneficiados.
  • La comunidad empresarial. Todo aquello que atraiga a las personas hacia la comunidad, aumente el orgullo y la satisfacción de la comunidad, cree empleos o incremente la inversión, es bueno para el comercio.
  • Los activistas de la comunidad, particularmente, las personas comprometidas con el patrimonio cultural de la comunidad. Gran cantidad de construcciones históricas tienen importancia social y de otra índole. Las estaciones de subterráneo convertidas en viviendas, los vecindarios que fueron el primer asentamiento de un grupo de inmigrantes en particular dentro de la comunidad, un parque donde se llevó a cabo un acontecimiento importante en la historia laboral – todos ellos simbolizan no sólo la historia, sino la esperanza y los ideales de la comunidad y sus continuos esfuerzos para mantenerlos vivos.
  • Los aficionados a la historia. Las personas que están fascinadas por la historia y para quienes las propiedades históricas son importantes en sí mismas y porque mantienen vivo nuestro pasado.

¿Cómo fomentar la preservación histórica?

Existen por lo menos cinco medidas que las comunidades y los individuos pueden tomar para fomentar la preservación histórica: proporcionar incentivos, imponer la ley, otorgar ayuda y apoyo a  personas comprometidas con y por la preservación en sí, educar al público y comprometerse a hacer activismo o abogar. Revisaremos cada una de estas medidas en forma individual.

Incentivos

Un incentivo es un beneficio otorgado a una persona con el fin de alentarlo a hacer algo específico. Existen gran cantidad de incentivos que pueden ser utilizados para promover la preservación histórica, la mayoría de ellos relacionados con el costo.

Incentivos fiscales.

Definimos los incentivos tributarios como: “formas de reducir los impuestos para las empresas y los individuos a cambio de acciones o inversiones especificas y convenientes”. Se pueden presentar de tres maneras:

  • Créditos impositivos (la suma invertida en la preservación histórica, o parte de ella, es deducida de los impuestos a abonar)
  • Deducción de impuestos (la suma invertida en la preservación histórica, o parte de ella, es deducida de la suma sobre la cual se debe pagar impuestos).
  • Reducción de impuestos. (la rama del gobierno que grava los impuestos simplemente exime de pagar la totalidad o una fracción  de los impuestos, en general durante un período de tiempo limitado).

El gobierno federal, estatal o local puede dictar cualquiera de estas exenciones de impuestos. En EE.UU., por ejemplo, el gobierno federal puede ofrecer un crédito impositivo para la preservación histórica de hasta el 20% (o sea, un crédito del 20% del dinero invertido en la preservación) para la rehabilitación, restauración o preservación de un edificio histórico. Para reunir los requisitos necesarios para recibir el crédito, el edificio debe ser una construcción histórica certificada y el trabajo también debe ser certificado como históricamente exacto y de acuerdo con los Estándares y Lineamientos para la Preservación Histórica de la Secretaría del Interior.

En la página Web de Servicio Nacional de Parques sobre créditos impositivos, se explica que “una construcción histórica certificada es una construcción listada individualmente en el Registro Nacional de Sitios Históricos – O – un edificio localizado dentro de un distrito histórico, registrado y certificado por el Servicio Nacional de Parques como parte de la importancia histórica del distrito”.

Muchos, pero no todos los gobiernos estatales y locales también ofrecen incentivos, mismos que varían ampliamente. Algunos municipios pueden eximir de impuestos a una propiedad preservada durante un período de tiempo, mientras que otros no hacen ningún ofrecimiento o sólo ofrecen una deducción de impuestos hasta una cierta cantidad. La manera de averiguar las oportunidades disponibles en el área es investigar las posibilidades en la oficina gubernamental en cuestión.

Como está implícito, el gobierno de los EUA canaliza la preservación histórica a través del Servicio Nacional de Parques, el cual a su vez es parte del Departamento del Interior, el cual trabaja con la Secretaría Estatal de Preservación Histórica (SHPO, por sus siglas en inglés) en cada estado. En general la SHPO es la agencia a cargo de los incentivos estatales. Los incentivos locales son más difíciles de individualizar y es posible que provengan de una cantidad de fuentes distintas.

Otros incentivos.

Los gobiernos locales en particular, pueden ofrecer a los promotores inmobiliarios o a las empresas, los permisos de exención  (por ejemplo un permiso para evitar los alcances de una reglamentación o fracción del código de edificación), excepciones a reglamentaciones en particular o bonos de densidad (por ejemplo un permiso para convertir un edificio histórico en una residencia de múltiples unidades dentro de un área zonificada para viviendas únicas de familia), a cambio de trabajo de preservación de calidad.

Los gobiernos y las organizaciones también pueden ofrecer subsidios por restaurar los edificios antiguos respetando sus características históricas, por ejemplo, instalando el material aislante sin dañar las paredes internas o externas. Otros asuntos y/o reparaciones a tener en cuenta para la restauración son la instalación eléctrica, la plomería, la calefacción/el aire acondicionado, el ahorro de energía, la eliminación de la pintura con plomo y materiales de asbesto y el cumplimiento de los requerimientos  de las leyes acerca de los derechos de las personas con impedimentos físicos.

Subsidios y préstamos.

Tanto las oficinas gubernamentales en todos los niveles como las organizaciones privadas y las fundaciones, ofrecen subsidios para diferentes clases de actividades de preservación o para la preservación de construcciones o propiedades de una clase en particular. He aquí una breve lista:

  • Propiedades de importancia histórica. Éstas son construcciones o propiedades que están directamente conectadas a eventos o personajes históricos.
  • Subsidios para la mejora del transporte. Estos subsidios están dirigidos a la mejora del transporte, pero pueden involucrar la restauración o rehabilitación de propiedades históricas (estaciones de ferrocarril o de tren subterráneo), trabajos en caminos o puentes históricos o labores de preservación relacionadas con el ensanche o la mejora de calles en vecindarios históricos.
  • Caminos panorámicos. Son caminos secundarios, frecuentemente de interés histórico. El trabajo en estos caminos puede implicar la restauración de paisajes y construcciones históricas o de la superficie del camino histórico en sí (por ejemplo, del pavimento original).
  • Áreas patrimoniales. Éstas se refieren a zonas consideradas patrimonio nacional o mundial. Muchas están relacionadas con la historia económica y social de la región.
  • Propiedades tribales o de grupos indígenas. En EE.UU. por ejemplo, en las áreas consideradas de los indígenas nativos, con frecuencia se encuentran construcciones o paisajes históricos, como también cementerios y otros puntos relacionados con el patrimonio cultural de los habitantes del lugar.
  • Subsidios federales varios. Existen subsidios federales específicos para la preservación de campos de batalla, graneros históricos, puentes cubiertos, lugares considerados como patrimonio marítimo y del ferrocarril subterráneo.
  • Investigación acerca de las propiedades históricas y la preservación histórica.
  • Subsidios de fundaciones y organizaciones sin fines de lucro. Muchas fundaciones y organizaciones existen específicamente para recaudar y distribuir dinero para la preservación histórica y las actividades relacionadas a ella.

Regulaciones

Si los incentivos son la carnada, las regulaciones constituyen el anzuelo que ayuda a convencer a los urbanistas y otras personas a preservar las construcciones históricas. En general ambos se utilizan en conjunto para asegurar que la preservación se lleva a cabo de manera apropiada y competente. Las reglamentaciones se relacionan con la preservación histórica de diferentes maneras:

Distritos históricos.

Éstas son áreas designadas como históricas por el gobierno federal o el estado debido a su arquitectura única; el hecho de que todas las construcciones dentro del área pertenecen a un período específico, aunque ninguna de ellas tenga un estilo arquitectónico definido en sí y por sí misma; o su asociación con eventos o personajes históricos en especial. He aquí algunas formas  en que los distritos históricos pueden ser regulados:

  • Apariencia de un edificio. Es probable que un órgano de supervisión deba aprobar el diseño de las renovaciones, los colores de la pintura, los tipos de ornamentación o las ventanas, etc.
  • La altura o el tamaño de la construcción. Puede existir una altura o tamaño máximos o los edificios deberán respetar la altura y el tamaño de los que los rodean.
  • Los materiales de construcción. Se extenderá el permiso de construcción para un edificio nuevo dentro de un vecindario de construcciones de ladrillos del siglo XIX,  siempre y cuando los materiales utilizados en la construcción y su apariencia general estén a tono con los edificios históricos que lo rodean. Por lo tanto, deberá ser construido en ladrillos (preferentemente antiguos) y de forma y tamaño similar a los demás.
  • El paisaje. Las reglamentaciones permitirán solamente plantas autóctonas o las que habrían sido utilizadas durante el período histórico que el distrito representa. Cuando sea posible, los árboles de un determinado tamaño deberán ser preservados. También es probable que existan restricciones con respecto a los lugares aptos para plantar árboles.
  • Restricciones en cuanto a la urbanización. Esto no necesariamente significa la prohibición de urbanizar (aunque cabe la posibilidad), sino que toda urbanización debe cumplir con las reglamentaciones en cuanto a diseño, tamaño, localización, propósito u otro criterio para que no se afecte el carácter histórico del distrito.

Edificios históricos y otras construcciones.

Existen muchas clases de reglamentaciones que protegen los edificios históricos y demás construcciones.

  • Antes de obtener la autorización para demolerlo, el urbanista o propietario de una propiedad debe demostrar que el edificio no está en condiciones de ser reparado. A veces, los urbanistas, contratistas y propietarios de viviendas adquieren edificios en perfectas condiciones, que a veces son considerados históricos, para demolerlos y construir otros más grandes. Los edificios históricos, aún aquellos con historias famosas o un diseño arquitectónico único, pueden ser destruidos sin los controles adecuados.
  • El trabajo desarrollado en un edificio histórico debe cumplir con ciertos estándares y lineamientos impuestos por el gobierno o por lo menos utilizar los materiales y el diseño apropiados, para evitar que el edificio no pierda sus características.
  • Características modernas – el sistema de refrigeración, el cableado eléctrico y las medidas adoptadas para el ahorro energético, deberán ser disimuladas o reducidas.

A veces se puede presentar un conflicto entre la preservación histórica y la responsabilidad por la protección del medio ambiente. Para encontrar una solución creativa, a veces son necesarios los servicios de un arquitecto o ingeniero o de ambos. Otra manera de enfocar el problema es incluir la responsabilidad por el medio ambiente dentro de las reglamentaciones, conjuntamente con los lineamientos sobre cómo lograrlo respetando la integridad histórica de los inmuebles.

Supervisión de la comunidad o comités de supervisión de la planificación del vecindario.

Normalmente, las comunidades y los vecindarios comprometidos con la planificación y la urbanización  organizan comités ciudadanos para supervisar la actividad de urbanización y desempeñarse como voceros de los residentes de la comunidad. Estos comités con frecuencia actúan como vigilantes de las actividades de preservación, protegiendo los edificios de relevancia histórica o de importancia para la comunidad y evitando su demolición o su restauración mal concebida.

Ayuda y apoyo

Existen numerosas actividades compatibles con la preservación histórica, las cuales no implican gasto de dinero. Las comunidades, organizaciones e individuos pueden ofrecer su tiempo, trabajo y otros beneficios para facilitar el proceso de preservación. Además pueden apoyar la idea y el proceso de preservación en sí.

Asistencia técnica

La mayoría de las comunidades, propietarios de viviendas, urbanistas y empresas tienen poca experiencia en la preservación histórica. Se podrían buscar fuentes que proporcionarán  asesoramiento gratuito o subsidiado, sobre arquitectura, procedimientos de recaudación de fondos, antecedentes históricos, técnicas de construcción, etc.

  • Universidades. Los profesores y los estudiantes en áreas como arquitectura, arqueología e ingeniería están en condiciones de proporcionar servicios valiosos y adquirir experiencia real por medio de la investigación, el trabajo y la consulta para los proyectos de preservación.
  • Profesionales voluntarios. Arquitectos, ingenieros, abogados y otras personas estarán dispuestos a donar sus habilidades profesionales como servicio a la comunidad o simplemente con el fin de que  las construcciones históricas sean preservadas.
  • Agencias y directivas gubernamentales. El gobierno local está en condiciones de respaldar la concreción de los proyectos de diversas maneras, al igual que las agencias estatales y federales dedicadas a la preservación histórica.
  • Asociaciones u organizaciones profesionales o de preservación histórica. Dichas organizaciones tienen un interés especial en que la preservación histórica se lleve a cabo y pueden proporcionar asesoramiento de parte de sus miembros en diversos aspectos del proyecto.  De la misma manera, pueden colaborar en la difusión de la importancia de la preservación histórica en general y su impacto en un área local en particular.

Apoyo de la comunidad y asistencia en el reconocimiento del Registro Nacional, y otros temas burocráticos.

Los comités comunitarios generalmente se desempeñan como enlace con la los organismos estatales de preservación histórica, colaboran en la confección de solicitudes de financiamiento y respaldan los proyectos que consideran importantes. Esto puede facilitar el trabajo de los urbanistas, y así estarán mejor predispuestos a formar parte de un proyecto de preservación.

Por diferentes razones, orgullo comunitario, turismo, urbanización, etc., las comunidades pueden mostrar interés en que un edificio o vecindario sean considerados propiedades históricas.  Pueden embarcarse en la tarea de solicitar dicha condición o apoyar la iniciativa de otros grupos para tal efecto.

Apoyo voluntario.

Es probable que los voluntarios de la comunidad interesados en la preservación histórica carezcan de conocimientos específicos sobre arquitectura, ingeniería o construcción, pero estarán mejor predispuestos a investigar, hacer llamadas telefónicas, completar solicitudes, colaborar con los peritos, asistir en educar al público ( vea a continuación) o a tomar una pala o un martillo.

Educación pública

Para promover la preservación histórica, es fundamental educar al público sobre la importancia de ésta. Cuando la mayoría o una gran minoría de ciudadanos de la comunidad están comprometidas con la preservación, es muy factible que ésta se convierta en parte integral de la planificación comunal.

Para lograr ese compromiso se debe publicar la información de manera que llame la atención de las personas. Al presentar una idea de muchas maneras diferentes y promocionarla por canales diversos, una gran cantidad de personas se interesarán y responderán a ella. Las posibilidades aquí son prácticamente ilimitadas. A continuación presentamos solamente algunas de ellas:

Informar al público sobre las construcciones históricas y la historia de la comunidad o del área.

Esto cubre una amplia gama de actividades:

  • Recorridos o caminatas guiadas o auto dirigidas, gratuitas o económicas. Por medio de éstas, las personas conocerán los lugares históricos y comprenderán su importancia para la comunidad.

El Sendero Bostoniano de la Libertad (en el noreste de EE.UU.), es nada más y nada menos que una línea roja en la acera, que comienza en el área común de Boston exactamente en la puerta de la estación de tren subterráneo llamada Park Street, centro del transporte público de la ciudad. La línea roja guía a los visitantes, y también a un gran número de residentes locales, por un recorrido a través de 16 edificios y sitios, muchos de los cuales son considerados monumentos nacionales, todos ellos relacionados con la historia de la ciudad y de EE.UU. Existen recorridos guiados, pero la mayoría de las personas optan por recorrer el sendero por su cuenta, con la guía de folletos gratuitos con mapas y descripciones de los lugares o guiados por indicadores y demás información en cada lugar.

La iglesia Old South, uno de los edificios más emblemáticos en el Sendero de la Libertad, donde se llevó a cabo la reunión que dio lugar a las protestas que resultaron en la independencia de Estados Unidos, fue casi demolida a mediados del siglo XIX cuando su congregación se mudó a un edificio nuevo. Un grupo encabezó el primer esfuerzo nacional organizado en pos de la preservación y fundó el movimiento de preservación histórica en el país.

  • Carteles. La antigüedad, historia, arquitectura e importancia de los edificios históricos es revelada a los transeúntes a través de carteles y placas.  Si los carteles son llamativos, con ilustraciones interesantes, mapas y otras características, muchas personas se detendrán a leerlos. Los carteles también pueden informar sobre construcciones y lugares donde se lleva a cabo la preservación, para que los ciudadanos puedan ver el proceso.
  • Afiches  y notas. Éstos pueden estar disponibles en cualquier lugar de la comunidad para atraer a los visitantes hacia los lugares y vecindarios históricos o dentro de los mismos vecindarios históricos. En este último caso, alentarán a los visitantes y residentes a dar un vistazo y a  recordar la historia que está frente a ellos.
  • Charlas o conferencias en clubes y organizaciones. Durante las reuniones de los clubes de servicios, grupos de la iglesia y muchas otras organizaciones se discute sobre  programas de interés para la comunidad. Ésta es una oportunidad para debatir con los  líderes comunitarios y empresariales y otros ciudadanos influyentes acerca de la preservación.
  • Dramatizaciones. Eventos como el teatro comunitario, las presentaciones de música de época, en salones donde probablemente se llevaron a cabo las presentaciones originales de la misma música, contribuyen a comprender la historia local y destaca los lugares históricos y las historias de cómo fueron preservados.

Utilizar los medios de comunicación.

Transmitir información a través de los medios de comunicación es generalmente la mejor manera de llegar a una gran audiencia, aunque su impacto es menor que el de una experiencia personal. Los artículos en los periódicos locales y los boletines informativos, los relatos o la información a través de la TV local y de las estaciones de radio, así como de la TV local por cable, son útiles para difundir la historia de la comunidad y la importancia de las propiedades históricas y la preservación histórica.

Sitios en Internet.

Una página Web puede contener una gran cantidad de material. Las páginas Web de una organización histórica o de preservación, una página Web municipal o las de la Cámara de Comercio local, la oficina de turismo estatal, empresas locales, bibliotecas, personas interesadas, colegios y universidades locales pueden servir para distribuir

información sobre la preservación, propiedades locales históricas en peligro, propiedades que han sido o están siendo restauradas, la historia local, etc. Además pueden brindar información sobre todos los aspectos de la restauración, incluyendo la arquitectura, métodos de construcción históricos, posibilidades de recaudación de fondos y estudios sobre proyectos exitosos.

Las páginas Web tienen la ventaja de las posibilidades de multimedia, por ejemplo el video virtual, las recorridas guiadas del área, grabaciones en audio, etc. De esta manera las personas se trasladan a los lugares mucho más rápido que a través de artículos en los periódicos o una conferencia. Por medio de las páginas Web, se crean vínculos con otros sitios o entidades importantes dedicadas a la preservación histórica. De esta manera los usuarios obtienen toda la información que necesitan (muchas de esas páginas Web están incluidas en esta sección bajo “Recursos”).

Programas  escolares.

El conocimiento y la importancia de la historia local y la preservación para las nuevas generaciones, nace en las escuelas.

En muchas universidades existen cursos y programas basados en la preservación, en su mayoría como estudios de posgrado o para estudiantes universitarios con especializaciones en arquitectura o en áreas similares. En EE.UU., a partir de la escuela secundaria, los estudiantes participan en internados de verano donde realizan experiencias directas sobre preservación en distintas áreas. Muchos de ellos, estudiarán arquitectura o preservación histórica y restauración, después de su graduación. Otros se convertirán en trabajadores que se desempeñarán en diferentes proyectos. Pero todos ellos tendrán en claro los problemas de la preservación, observarán los edificios que los rodean de manera diferente y comprenderán la necesidad de preservarlos y de cómo hacerlo.

Es imposible dirigir a la gran mayoría de los estudiantes provenientes de los colegios secundarios, hacia la una especialización en preservación….pero se les podrá ofrecer un curso para explicarles qué es, por qué es importante y cómo observar las construcciones y los paisajes teniendo en cuenta su historia. Ese curso no necesariamente debe consistir de conferencias aburridas: gran parte se puede dictar en el área, caminando por los vecindarios históricos, fotografiando ejemplos de períodos arquitectónicos o lugares históricos dentro de los vecindarios y visitando construcciones restauradas en compañía de las personas que llevaron a cabo la restauración. Si el curso es exitoso, los estudiantes cultivarán un interés de por vida en la preservación, la cual trasmitirán a sus comunidades.

Abogacía/activismo

Todas las actividades para fomentar la preservación histórica, antes sugeridas, requieren de ciertas labores de abogacía. Las que dependen del gobierno (la mayoría de los incentivos y las reglamentaciones) deben convertirse en un tema de discusión política y  posteriormente en ley. Eso significa que, en algún punto se deberá  convencer a los políticos y/o legisladores de que la preservación histórica es necesaria y  que estas medidas serán efectivas.

De la misma manera, los voluntarios no se materializan por arte de magia; deben saber cuándo ofrecerse como voluntarios y estar convencidos de que esas oportunidades valen su tiempo y esfuerzo. Muy pocas escuelas o distritos escolares incluirán los estudios sobre la preservación en su plan de estudios por su cuenta. Y la educación del público en general constituye una fuente de apoyo, cuando aboga en defensa de la preservación para que la gente comprenda la importancia del tema.

Todo se reduce al hecho de que es improbable que una sola persona por su cuenta pueda promover la preservación histórica en una comunidad. Deberá abogar por ella frente a los legisladores y los políticos, las empresas y los urbanistas y/o la comunidad en su totalidad. Los lineamientos para la defensa de la preservación histórica son los mismos que para otros temas: investigar, comprender la cultura de aquellos con quienes se aboga, refinar el mensaje, utilizar un enfoque personal cuando sea posible, prepararse para la oposición y respetarla, conocer a los aliados y no darse por vencido.

Para resumir

Mediante la preservación histórica de edificios y otras construcciones, de vecindarios, sitios arqueológicos, paisajes y otras propiedades históricas, las comunidades comprenden su historia y se sienten orgullosas de ella, además de recibir beneficios económicos y de otra índole. Por lo tanto, es sensato que las comunidades promuevan la preservación, rehabilitación o restauración de propiedades históricas.

La rehabilitación – la preservación o restauración de una propiedad histórica descuidada o abandonada, con el fin de que sea utilizada, en general con un uso diferente al original- es tal vez la más común de estas posibilidades, ya que cubre las necesidades de la comunidad sin descuidar los elementos y características de la propiedad en cuestión. Es muy probable que la preservación y la restauración vayan de la mano con una campaña de turismo cultural o un esfuerzo por revitalizar un vecindario o que los propietarios de las viviendas la lleven a cabo.

Las comunidades pueden promover la preservación por medio de diversos incentivos para compensar los costos, en general de acuerdo con las reglamentaciones requeridas en ciertas actividades de restauración en situaciones particulares (distritos históricos, propiedades de importancia histórica o arquitectónica, etc.). De la misma manera se pueden ofrecen programas sobre la preservación histórica en las escuelas.

Es probable que las personas o los grupos comprometidos con la preservación, ofrezcan subsidios o donaciones, pericia o trabajo voluntario, eduquen al público sobre la importancia y los beneficios de la preservación histórica y aboguen en su defensa ante legisladores del sector público (funcionarios gubernamentales) y privado (funcionarios de corporaciones), para que el tema reciba la importancia debida en  las decisiones políticas.

Una comunidad que respeta su historia se respeta a sí misma. La preservación de la historia mediante la preservación de los lugares históricamente importantes contribuye a que la comunidad sea consciente de su fortaleza y la utilice para mejorar la vida de sus residentes.

Contributor 
Phil Rabinowitz

Recursos en línea

Alliance of National Heritage Areas is an organization of the 27 areas designated National Heritage Areas by the U.S. government, along with partners and supporters of “sustainable heritage development.”

CA Office of Historic Preservation gives examples of how California uses tax incentives to encourage historic preservation.

Cornell MA in Historic Preservation Planning is one example among many of a graduate degree program in historic preservation.

Cornerstones Community Partnership is a Santa Fe, New Mexico organization that combines historic preservation with training and personal growth for at-risk youth.

Connecticut Trust for Historic Preservation provides information and links on historic preservation for do-it-yourselfers, members of historic preservation commissions, interested community members, etc.

National Park Service Heritage Preservation Services provides information on federal Historic Preservation Tax Incentives and a great deal more.

National Trust for Historic Preservation provides lots of info on preservation, as well as photos, or preserved spaces.

National Trust Heritage Tourism page provides assistance ranging from how-to cultural heritage tourism publications to consulting services tailored to meet the needs of individual clients.

The Old House Web offers a series of articles relating to preservation and rehabilitation guidelines.

PreserveNet  provides preservationists with a comprehensive database of regularly updated internet resources and current professional opportunities, as well as grant opportunities.

Secretary of the Interior’s Standards and Guidelines for Historic Rehabilitation provides standards designed to promote responsible preservation practices that help protect our Nation's irreplaceable cultural resources.

Sources of Financial Assistance for Historic Preservation provides information on federal, state, local, tribal, and private funding sources for historic preservation.