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Sección 5. Facilitar el acceso para pesonas con impedimentos físicos

  • ¿Qué significa facilitar el acceso?

  • ¿Por qué facilitar el acceso en la iniciativa u organización?

  • ¿Cuándo facilitar el acceso en la iniciativa u organización?

  • ¿Quién puede ayudar a facilitar el acceso?

  • ¿Cómo procurar facilitar el acceso?

En todo el mundo, aproximadamente una de cada diez, es decir 650 millones de personas, viven con impedimentos físicos que afectan su vida diaria.  La gran mayoría, alrededor del 80 %, vive en países en vías de desarrollo, son pobres y carecen de educación y otros recursos que podrían ayudarlos a cambiar su situación. Además, es un grupo que está creciendo continuamente, debido a la prolongación de la expectativa de vida, ya que a medida que las personas envejecen, son más propensas a desarrollar algún tipo de discapacidad.  A pesar de ser un grupo tan numeroso, las personas con discapacidades o “capacidades diferentes” continúan siendo víctimas de discriminación y marginalización y su situación apenas está mejorando con la ayuda de los movimientos sociales modernos que luchan por sus derechos. Una de las mayores batallas que deben enfrentar las personas con impedimentos físicos es la lucha por facilitarles el acceso a servicios, eventos o  lugares. Los temas relacionados con el acceso pueden presentarse de distintas maneras.  Por ejemplo:

  • Juan, que era sordomudo, había estado interesado durante mucho tiempo en realizar algún tipo de trabajo voluntario, de modo que cuando supo que la agrupación local de lucha contra la drogadicción traería a un famoso autor para que diera una conferencia sobre trabajo voluntario, la idea de asistir lo entusiasmó mucho. Sin embargo, cuando llegó a la conferencia, descubrió que no había intérpretes de lengua de señas. Frustrado por el hecho de que un evento de tal magnitud no le posibilitara disfrutar de la conferencia, Juan se retiró antes de que se repartieran las solicitudes y folletos sobre la realización de trabajos voluntarios.
  • Catalina quería que su hijo Ricky participara de un programa de tutorías extraescolares que se llevaba a cabo en toda la ciudad. A los estudiantes que participaban de este programa se les garantizaba el transporte, pero ninguno de los autobuses que transportaban a los alumnos desde y hacia los lugares de tutorías tenía acceso para silla de ruedas.  Aunque a Ricky realmente le hubiera servido el apoyo en sus clases de matemáticas, no pudo participar del programa.
  • Cuando murió la esposa de Emilio, él comenzó a asistir a un grupo local de apoyo a personas que perdieron un ser querido. El coordinador del grupo de apoyo siempre entregaba muchos artículos y demás recortes que otros miembros del grupo consideraban de mucha utilidad, pero Emilio no pudo usarlos, ya que tenía un trastorno visual y el coordinador nunca facilitó copias en letra más grande. Desalentado, dejó de asistir al grupo de apoyo.

Algunas adaptaciones para mejorar el acceso son simples, otras son complejas, pero todas son importantes y agregan diversidad a cada organización. Esperamos que una vez terminada esta sección, los lectores cuente con la información suficiente para comenzar a hacer su organización o iniciativa más adecuada para las personas con impedimentos físicos y con suficientes enlaces y recursos para ayudarles a seguir informándose.

¿Qué significa facilitar el acceso?

Facilitar o incrementar el acceso significa crear un ambiente que pueda ser usado por todas las personas, incluyendo aquellas que tienen discapacidades o impedimentos físicos.  Cuando hablamos de acceso, las personas a menudo asumen que nos referimos a construir un edificio u otro espacio adecuado para una silla de ruedas, y no piensan más allá. Sin embargo, el verdadero acceso significa pensar en los distintos tipos de discapacidades y de qué manera se podrían cambiar las cosas dentro de una organización o iniciativa para hacer que las personas se sientan bien recibidas, no simplemente la estructura física de la oficina o los lugares de reunión, sino las actitudes y los estilos de comunicación también.

De modo que cuando hablamos de facilitar el acceso, significa hacerlo:

  • Cambiando actitudes dentro de nuestra organización o iniciativa
  • Cambiando el modo en que nos comunicamos con otros y
  • Cambiando cuestiones físicas, tales como la estructura de los espacios que usamos y los formatos en los que presentamos la información.

¿Por qué facilitar el acceso en la iniciativa u organización?

La respuesta más aparente es que hacer la organización o iniciativa adecuada para el acceso de las personas con dificultades físicas es simplemente hacer lo correcto. En EE.UU. con la creación de  la Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADA, por sus siglas en inglés),  este derecho es exigible por ley. Más de 50 países además de Estados Unidos, o bien, han creado leyes relacionadas con los derechos de las personas con discapacidad (muchas de ellas basadas en la ley ADA) o bien han incorporado dichos derechos a sus constituciones. Sin embargo, tener como prioridad facilitar el acceso dentro de una organización o iniciativa, también contribuye a incrementar el número de posibles voluntarios, miembros y personal. Brindar acceso para personas con impedimentos físicos es otra manera de incrementar la diversidad en la iniciativa u organización. Por otra parte, posibilita que más personas usen cualquiera de los servicios o programas que se brindan.

¿Cuándo facilitar el acceso en la iniciativa u organización?

Cualquier momento es bueno para trabajar por aumentar el acceso, pero existen algunas veces en las que no se piensa en los asuntos de acceso en los planes, pero se debería:

  • Cuando se pretende incrementar el número integrantes - ya sea aquellas personas para las cuales trabaja la organización o iniciativa o personas que participen como voluntarios, miembros o personal.
  • Cuando se está pensando en nuevos espacios - por ejemplo, al mudarse a un nuevo edificio de oficinas o al encontrar un nuevo lugar donde realizar una reunión pública semanal.
  • Cuando se está planeando una conferencia, retiro o cualquier otra reunión especial.

Algunas personas argumentan que realizar cambios para incrementar el acceso no tiene sentido, ya que durante años han estado trabajando con pocos o ninguna persona con discapacidad dentro de la organización o iniciativa.  La siguiente historia extraída del libro de Joseph S. Shapiro, escrito en 1993, (Sin compasión: Personas con discapacidades forjando un nuevo movimiento de derechos civiles) demuestra por qué este razonamiento no es válido:

En un pequeño pueblo, se le comunicó al administrador del correo que tendría que realizar modificaciones en la oficina de correos para que pudieran acceder personas en sillas de ruedas.  Había veinte enormes escalones que llevaban a la única entrada pública y la puerta giratoria era demasiado angosta, incluso para la silla de ruedas más pequeña. El administrador se negó a realizar cualquier renovación de las solicitadas por los defensores de los discapacitados. Enojado, balbuceó: “He estado aquí  treinta y cinco años y en todo este tiempo, todavía no he visto un solo cliente entrar aquí  en silla de ruedas”.  (p.142)

Evidentemente, el administrador del correo es un hombre que simplemente no se da cuenta, pero su ignorancia demuestra un punto importante: sólo porque jamás hayan tenido personas con discapacidades en la organización o iniciativa, no significa que no sea buen momento para mejorar el acceso.

¿Quién puede ayudar a facilitar el acceso?

Saber a quién recurrir es muy importante cuando se trata de algo como mejorar el acceso para las personas con impedimentos físicos, lo cual puede resultar complicado para quienes no conozcan bien el tema.  Sin embargo, con un poco de ayuda de expertos, cualquier organización puede facilitar el acceso.

El mejor lugar donde obtener asesoramiento sobre accesibilidad es el centro de vida independiente local. Los centros de vida independiente (los CVI son organizaciones sin fines de lucro, que  funcionan como centros de recursos sobre temas relacionados con la discapacidad, tanto para personas con impedimentos físicos como para el resto de la comunidad). Estos centros no trabajan con un único impedimento físico o enfermedad. Los ILC usan el enfoque de los iguales, es decir al menos el 51% de la junta directiva y del personal de un ILC deben ser personas con discapacidades, de modo que puedan tener  suficientes experiencias personales y discernimiento en relación a los asuntos de discapacidad.  Por este motivo, un ILC es un muy buen lugar donde recurrir en busca de información útil y práctica para las preocupaciones relacionadas con la discapacidad.

Los ILC pueden ser difíciles de hallar en la guía telefónica, sin embargo a veces figuran en la sección “servicios para discapacitados” o “servicios sociales”. Probablemente, se tenga mejor suerte llamando al servicio de información y referencia local, al departamento de trabajo social del hospital local o a la agencia estatal de rehabilitación vocacional. Para personas que viven en los Estados Unidos existe además una amplia lista de ILC (en inglés) en el sitio Web de Independent Living Research Utilization (Utilización de la Investigación sobre Vida Independiente) En Latinoamérica, sitios como Discapnet y la Región Latinoamericana de la Organización Mundial de Personas con Discapacidad podrán ser de utilidad.

Otro buen recurso es el Centro de Asistencia Técnica y Negocios para Personas con Discapacidad (DBTAC, por sus siglas en inglés).  Existen en los Estados Unidos diez centros regionales que brindan información, capacitación y asistencia técnica a empleadores, personas con discapacidades y otras entidades, que se rigen por la ley ADA, con financiación del Instituto Nacional para la Discapacidad  e Investigación sobre la Rehabilitación.  Se puede hallar el DBTAC más cercano en la siguiente página (en inglés): http://www.adata.org/dbtac.html.

Muchas organizaciones nacionales o regionales trabajan con temas de accesibilidad y existen además diversas agencias gubernamentales que pueden contar con información valiosa.  A continuación, se encuentran varios enlaces para ingresar a los sitios Web de algunas de esas organizaciones y agencias (todas con información en inglés):

Existen otros lugares a donde recurrir para buscar ayuda con temas relacionados con el acceso. Muchos abogados que se especializan en discapacidades, quizás puedan ofrecer alguna orientación y referencias además de informar qué tipos de cambios para facilitar el acceso, las organizaciones están legalmente obligadas a realizar. Si se están realizando cambios en la estructura física del edificio, muchas empresas de arquitectura se especializan ahora en realizar diseños universales (el concepto de diseñar espacios que sean accesibles para todos).  Muchos arquitectos pueden decir que conocen sobre diseño universal cuando en realidad no es cierto, por lo tanto se debe consultar con un Centro de Vida Independiente local para averiguar cuáles son los arquitectos de la región que tienen buenos antecedentes en la construcción de estructuras verdaderamente adecuadas.

Finalmente, una fuente de ayuda que no se debe pasar por alto son aquellas personas dentro de la comunidad que tienen discapacidades y especialmente aquellas que ya están involucradas en la organización o iniciativa.  Puede resultar inmensamente útil reunirse con estas personas, informalmente o de manera más estructurada como puede ser un grupo de enfoque, para recibir sus sugerencias y preocupaciones relacionadas con el enfoque en los impedimentos físicos.

¿Cómo procurar facilitar el acceso?

Cambiar actitudes dentro de la organización o iniciativa.

El primer paso es cambiar la imagen que todos los participantes de la organización tienen de las personas con impedimentos físicos. Por supuesto, es más fácil decirlo que hacerlo, pero se pueden hacer algunas cosas para aprender más sobre la discapacidad, de qué manera desean ser tratadas las personas con esta condición y las reglas básicas de etiqueta frente a una persona con impedimentos físicos.

Una buena manera de comenzar es acercarse a personas con discapacidades y simplemente pedirles su ayuda para mejorar el acceso. ¿Existen personas con discapacidad que ya están participando en la organización? ¿Existe, al menos, una persona con discapacidad en la junta directiva o consejo de gobierno de la organización? Se les puede a estas personas su colaboración y asistencia para poder realizar un cambio en la organización. Probablemente les interese formar un equipo de trabajo o comité que se ocupe de los temas relacionados con el acceso. Por supuesto, no se debe elegir a las personas con discapacidad para que se ocupen de este tipo de tareas como un símbolo o un adorno de “utilería”, sino que deberán ser considerados y tratados como compañeros iguales dentro de la organización o iniciativa.

Otro paso podría ser realizar capacitaciones para el personal en cuestiones relacionadas con la discapacidad.  En este caso, se puede convocar a una persona externa a la organización con experiencia en el tema. Además,  puede buscar en la guía telefónica (de EE.UU.) en la sección “desarrollo profesional” o “capacitación para la diversidad”.  Asimismo, quizás existan agencias y organizaciones que traten temas relacionados con la discapacidad. En los Estados Unidos, probablemente resulte útil llamar a la Red de Inserción Laboral (JAN) un servicio del Comité Presidencial para el Empleo de Personas con Discapacidades, al 1 800 JAN -7234 o a la Red de Inclusión al (513) 287-6530.

El uso de reglas de etiqueta frente a una persona con discapacidad es un concepto que se basa simplemente en tratar a las personas con impedimentos físicos con cortesía y respeto.  Al final de esta sección, bajo el título Herramientas, se encuentra información básica sobre el uso de reglas de etiqueta frente a personas con discapacidad, pero aquí presentamos también algunas cosas a tener en cuenta:

  • Tratar a los adultos como adultos y tratar a las personas con discapacidades como se trataría a cualquier otra persona.
  • No dar nada por sentado acerca de las personas con impedimentos físicos.  Si se tiene alguna pregunta sobre qué hacer, simplemente se les debe preguntar.  Las personas con discapacidades por lo general valoran la honestidad y prefieren que se les pregunte sobre sus necesidades y deseos en lugar de hacer suposiciones.
  • Entender que dos personas con la misma discapacidad pueden tener necesidades de acceso muy diferentes.  Las personas con impedimentos físicos deben ser consideradas como individuos y cada una de sus necesidades debe ser atendida de esa manera.
  •  No todas las discapacidades son inmediatamente evidentes.  Las discapacidades “ocultas”, como trastornos auditivos o condiciones médicas crónicas como la diabetes, pueden provocar que una persona no responda cuando se le habla o que actúe de una manera que pueda parecernos extraña o inapropiada.  Insistimos, no se deben hacer suposiciones.  Si una persona se comporta de una manera que al principio pueda parecer inusual, se debe esperar a saber un poco más.
  • Tratar a los miembros del personal o voluntarios con discapacidades de la misma manera que  se trataría a las personas sin discapacidades significa también que se debe evaluarlos de la misma manera que a los demás (este tema se discute en la entrevista ejemplo al final de la sección).  Las personas sin discapacidades pueden a veces ser muy renuentes a ser honestas con las personas con discapacidades en relación con sus fallas en el trabajo. Normalmente lo hacen con buenas intenciones, pero esto sólo perjudica al miembro del personal o voluntario que tiene una discapacidad.  Se debe ser honesto con todos los miembros del personal sobre los temas en los que pueden mejorar su desempeño.

Cambiar la manera de expresarse en relación con las discapacidades.

El lenguaje que usamos cuando hablamos sobre con discapacidades o con ellas está íntimamente ligado a las reglas de etiqueta frente a una persona con discapacidad. Algunas cuestiones básicas a tener en cuenta sobre la manera de comunicarse son:

  • Poner a la persona en primer lugar. Esto significa mencionar primero a la persona antes de la discapacidad: “Una mujer sorda” en lugar de “una sorda”. A veces se cree que está bien nombrar primero la discapacidad en una conversación, ya que la frase de “la persona primero” puede resultar muy redundante, pero en ningún caso se debe uno referir a una persona por su discapacidad (por ejemplo, llamar a alguien “un parapléjico”).  Se debe enfatizar el hecho de que ésta es una persona y que su discapacidad es uno de sus tantos aspectos; la discapacidad de una persona no la define como ser humano.
  • No señalar las discapacidades, pero tampoco ignorarlas. Si la discapacidad de alguien no es relevante en la conversación, no se debe comentar, a menos que la persona con la discapacidad saque el tema. Sin embargo, si es relevante, no es descortés sacar el tema. Dudar en mencionar la discapacidad de una persona puede implicar que es algo malo, que es un tema desagradable o incómodo. No debería serlo. Una discapacidad es algo que tiene una persona y con lo que convive todos los días, y está bien reconocerlo.
  •  Muchas palabras relacionadas con las discapacidades en el pasado son ahora consideradas de mal gusto y reflejan un prejuicio, por lo que no deberían evitarse más debido a sus connotaciones negativas. Un ejemplo que se da en el idioma inglés es la palabra "handicapped" (minusválido) proviene de la imagen británica de un mendigo con su gorra en la mano pidiendo limosna.  Las personas con discapacidades fueron retratadas durante mucho tiempo como personas merecedoras de caridad y lástima.  Otras expresiones a evitar: referirse a las personas con discapacidades como “lisiado” o como “víctima” de su discapacidad, decir que alguien “sufre de” su discapacidad (es conveniente decir, en cambio, que él o ella “vive con” ésta) y referirse a las personas sin discapacidades como “normales”.
  • Averiguar de qué manera se comunica mejor una persona con una discapacidad. Por ejemplo, si bien muchas personas ciegas pueden usar el sistema Braille, la mayoría de las personas ciegas no lo usan.  Del mismo modo, no todas las personas sordas pueden leer los labios e incluso cuando lo hacen, esto sólo tiene una efectividad del 30% al 50%, ya que muchas palabras lucen similares (por ejemplo, las palabras “madre” y “padre” lucen casi idénticas para alguien que lee los labios). La lectura de labios debe estar acompañada de gestos, expresiones faciales y notas escritas. Algunas personas sordas pueden hablar, otras no. En caso de duda, simplemente se debe preguntar, “¿Cuál es la mejor manera de comunicarnos?”.

Un buen recurso donde conseguir información sobre cómo expresarse en relación a la discapacidad es un folleto llamado Lineamientos para informar y escribir sobre personas con discapacidades, del Centro de Investigación y Capacitación para la Vida Independiente.

Cambiar la estructura física de los espacios que usamos y brindar información en formatos alternativos.

Cambiar las actitudes y el lenguaje es muy importante, pero no tienen sentido si las personas con discapacidades no pueden entrar al edificio o espacios de reunión o usar los servicios ofrecidos por la organización.

En esta etapa es muy probable escuchar  a los detractores quejarse, diciendo: “¡Pero es demasiado caro!” Por lo general, se dice esto antes de que nadie haya en realidad considerado los costos.  Muchas adaptaciones para el acceso son menos costosas de lo que se cree.  Algunos cambios son muy simples y fáciles, como mover los faxes y fotocopiadoras a lugares donde puedan acceder más fácilmente las personas en silla de ruedas. Inclusive, los donantes y los socios financiadores normalmente están muy bien dispuestos a realizar donaciones para mejorar el acceso  o quizás se pueda encontrar mayor asistencia financiera mediante recursos adicionales.

De acuerdo con June Isaacson Kailes, cuyo libro Guía para planificar reuniones adecuadas para personas con impedimentos físicos cada organización debería desarrollar una política formal relacionada con el acceso. Esta política debería reflejar el compromiso de que todos los lugares de reunión que usa la organización o iniciativa están adaptadas para personas con impedimentos físicos, independientemente de si se esperan que asistan pocas o muchas personas.

Por ejemplo: “[Nombre de la organización] no realizará ninguna reunión conferencia o encuentro profesional en lugares donde las instalaciones tengan barreras que impidan la asistencia y participación de personas con discapacidades” (Kailes, 1998).

Esto significa que a veces se deben realizar cambios. Si el hotel donde la organización ha realizado su conferencia anual durante los últimos 15 años no está adaptada para personas con capacidades diferentes, simplemente se debe elegir una nueva instalación. Sin embargo, antes de hacer eso, se debe intentar usar la influencia de la organización como cliente habitual para convencer a la gerencia del hotel de que mejorar el acceso sería una buena política empresarial.

Si se está construyendo un nuevo edificio o realizando cambios a una estructura ya existente, es necesario considerar la posibilidad de usar el Diseño Universal. El Diseño Universal es un método para diseñar edificios, cuartos y otros espacios, teniendo en cuenta los siguientes principios:

  • Uso igualitario: El diseño es útil y vendible a cualquier grupo de usuarios.
  • Uso flexible: El diseño se acomoda a una amplia gama de preferencias y habilidades individuales.
  • Uso simple e intuitivo: El uso del diseño es fácil de entender.
  • Información perceptible: El diseño comunica de manera eficaz la información necesaria para el usuario.
  • Tolerancia al error: El diseño minimiza los riesgos y las consecuencias adversas de acciones involuntarias o accidentales.
  • Exige poco esfuerzo físico: El diseño puede ser usado eficaz y confortablemente.
  • Tamaño y espacio para el acceso y uso: Proporciona un tamaño y espacio apropiados para el acceso y uso.

Incluso si a la organización no le convence el Diseño Universal, existen muchos recursos disponibles para hacer las estructuras adecuadas para todos. Las Pautas para el Diseño de Edificios e Instalaciones de la Junta de Acceso, cuenta con muchas pautas específicas relacionadas con las medidas, ubicación y otros detalles necesarios para diseñar un espacio de fácil acceso.

Cuando se esté buscando un lugar para reuniones, sesiones de capacitación, retiros u otro tipo de eventos fuera de las oficinas de la organización, es importante asegurarse de que los lugares sean de fácil acceso para las personas con impedimentos físicos. La regla más importante a tener en cuenta es nunca dar por sentado que un lugar está adecuado para estos propósitos simplemente porque los dueños o sus empleados digan que lo es (particularmente, los hoteles).  Esto no implica necesariamente que estas personas estén siendo deshonestas, simplemente no siempre saben todo lo que implica el acceso. Para que sea verdaderamente considerada adecuada para todos una estructura debe ajustarse a los lineamientos de la ley sobre personas con discapacidad para cada país. En el caso de Estados Unidos es la Ley de Lineamientos de Estadounidenses con Discapacidades (ADAAG, por sus siglas en inglés).

Entonces, ¿cómo se resuelve esto? Si se tienen los recursos, lo mejor es que la organización recorra las instalaciones por sí misma. De ser posible, es preferible ir acompañado de personas con impedimentos físicos, ya que tienen un conocimiento directo de las necesidades de accesibilidad. Sin embargo, si esto no es posible, entonces se debe conseguir una buena lista de verificación con respecto a los asuntos de accesibilidad y una cinta métrica e ir  a investigar.

Los Lineamientos de la Ley de Estadounidenses con Discapacidades (ADAAG, por su sigla en inglés), a los cuales podemos acceder en  http://www.access-board.gov/adaag/html/adaag.htm, (sitio con información  en inglés) son quizás la lista de verificación más completa que se puede usar.  Además, se puede encontrar una lista de control de accesibilidad más simple incluida en la sección de Herramientas, al final de esta sección.

Otra herramienta para determinar si un lugar está bien acondicionado para personas con capacidades diferentes es la Regla de Accesibilidad II de la ley ADA. Consiste de una varilla portátil con marcas que ayudan a medir las diferentes medidas mínimas, como la altura del umbral, el ángulo de rampas y pendientes, el ancho de las puertas, etc. La regla se expande desde los 43 cm. plegada hasta los 81 cm. y cuenta además con una burbuja de aire indicadora de nivel. Si se desea obtener más información sobre esta herramienta, se puede escribir a Access Inc., 416 Nancy Court, Lawrence, KS 66049-4601; se puede también llamar al (785) 841-0321 o escribir por correo electrónico a sales@adastick.com.

Si resulta absolutamente imposible verificar personalmente un edificio o instalación, se puede enviar una carta a la posible instalación con una lista de verificación, solicitando que brinde información específica sobre el nivel de acondicionamiento de sus instalaciones para personas con impedimentos físicos.

Antes de cualquier evento o reunión, es necesario asegurarse de que en los anuncios, invitaciones o avisos incluyan un comentario sobre los tipos de arreglos para acondicionar el sitio que se han realizado (es decir, si el sitio es apto para personas en silla de ruedas, si tienen a disposición información escrita u oral en formatos alternativos, etc.).  Además, los avisos, folletos o invitaciones deberían incluir toda aquella información relacionada con el estacionamiento o el transporte público para personas con capacidades diferentes.  En Herramientas, al final de esta sección se encuentran más sugerencias sobre datos que se deben incluir en los folletos de eventos o reuniones.

Se debe designar una persona de contacto y se la debe incluir en todos los anuncios para que reciba las preguntas y brinde información relacionada con las adaptaciones.  Si hay un formulario de inscripción para el evento, éste debe incluir un espacio para que las personas con discapacidades informen sobre sus necesidades.

Logística básica:

  • Los materiales impresos que se usarán en el evento o  reunión deben estar disponibles con anticipación en caso que los soliciten.
  • Es espacio donde sentarse debe estar acomodado de manera que haya lugar para que se sienten los usuarios de sillas de ruedas (retirar sillas para que haya espacio suficiente para acomodar las sillas de ruedas).
  • Los pasillos y vestíbulos deben ser lo suficientemente amplios como para que dos personas en silla de ruedas puedan avanzar en direcciones opuestas.
  • En aquellos casos en que las puertas que son difíciles de abrir no se puedan mantener abiertas durante el evento, debe brindarse ayuda en la puerta durante el evento.
  • Las películas y diapositivas deben ser subtituladas, siempre que sea posible.
  • Los micrófonos, la mesa del orador, el podio, la zona del escenario y los caminos a dichos lugares deben ser adecuados para personas con impedimentos físicos.
  • Si se va a entregar información en formatos alternativos (ver más abajo), se debe planificar con bastante anticipación para tener estos materiales listos.
  • Si se van a utilizar intérpretes de lengua de señas, se les debe entregar por adelantado una copia de los materiales que se entregarán en el evento/reunión, siempre que sea posible.
  • Muchos hoteles, centros de convenciones y lugares para eventos tienen a disposición sistemas de mejora del audio. Además, se debe repasar con ellos las listas de requerimientos de accesibilidad física y logística del evento.
  • El día del evento, es necesario asegurarse de que se hicieron todas las modificaciones temporales para facilitar el acceso de las personas con capacidades diferentes, como por ejemplo, rampas portátiles para sillas de ruedas.

Sensibilidad Química Múltiple (MCS por su sigla en inglés) – con frecuencia también llamada enfermedad ambiental – es una condición en la que la persona afectada puede enfermarse a causa de los químicos que contienen algunas fragancias, productos de limpieza, tintas y tinturas, aditivos alimenticios, humo de tabaco, etc. Muchas agencias reconocen actualmente a la MCS como una verdadera discapacidad y las personas con MCS están amparadas por la Ley de Estadounidenses con Discapacidades. Para que un lugar esté adaptado para las personas con MCS, se deben procurar un ambiente sin perfumes, solicitarle a la instalación que no use aromatizadores de aire o productos de limpieza fuertes y solicitar en todos los materiales escritos para el evento que las personas no usen colonias, perfumes o cosméticos perfumados y que se abstengan de fumar durante el evento.

Existe más información (en inglés) sobre la MCS en los siguientes sitios:

Información en formatos alternativos

Muchas personas con capacidades diferentes necesitan recibir la información en formatos alternativos. Los siguientes son algunos de los formatos y la forma en que se pueden adaptar para las personas que los necesitan.

Los intérpretes de lenguaje de señas traducen los mensajes orales al lenguaje de señas. Es posible hallar a estos traductores en la guía telefónica, en la sección “Servicios de traducción”; probablemente se deban buscar en la ciudad cercana más importante. En EE.UU., normalmente cobran entre $25 y $40 dólares la hora con un arancel mínimo equivalente a dos horas, pero algunos estarían dispuestos a donar sus servicios a organizaciones sin fines de lucro. Si el evento o reunión durará más de dos horas, se debería contratar a dos intérpretes para que puedan descansar.  Quizás  se pueda conseguir a alguien que brinde en forma voluntaria sus servicios de intérprete de lengua de señas, pero de ser así, es necesario asegurarse de que la persona realmente tenga fluidez en el lenguaje de señas y que tenga experiencia en interpretación; a veces personas bien intencionadas con poca experiencia en lenguaje de señas piensan que pueden traducir para un evento, pero sus habilidades simplemente no son los suficientemente adecuadas para un trabajo de esta magnitud.\

Existen lenguajes de señas prácticamente para todos los grupos de idiomas. En Estados Unidos y Canadá, por ejemplo, se usa la Lengua de Señas Norteamericana (ASL, por sus siglas en inglés) que, al igual que la mayoría de los lenguajes de señas, es un idioma verdadero, con su propia gramática y estructura interna, ninguna de las cuales se basa en el idioma inglés. La Lengua de Señas Británica, de hecho, es completamente diferente de la ASL, y los usuarios de un idioma no entienden el otro.

Material en formato de audio: Se deben poner a disposición grabaciones de las reuniones y de los materiales gráficos para las personas con trastornos visuales o aquellas personas cuyos impedimentos físicos no les permitan tomar notas fácilmente.  Muchas instalaciones brindan servicios de grabación, o quizás se prefiera contratar un servicio de grabación profesional.  Si se van a realizar grabaciones del material gráfico disponible, se necesita asegurar que quien grabe el material lea a una velocidad moderada, hable claramente, se identifique al principio de la grabación e identifique el documento y número de la página que está leyendo.

Impresiones en letra grande: Debe haber a disposición versiones de los materiales letra grande. En este formato, la impresión es agrandada para personas con disminución visual y para personas con dificultades de aprendizaje. En la computadora, un tamaño de fuente entre 18 a 24 puntos, producirá un tipo grande de letras. En el caso de las señalizaciones e identificaciones de las puertas, se deben usar letras y números en relieve 1,58 cm. de espesor o mayor. El formato de los materiales debe ser apropiado para que las personas con impedimentos físicos puedan leerlo fácilmente. Se deben usar también columnas de texto angostas con los márgenes derechos irregulares. También resulta de utilidad simplificar el formato utilizando la menor cantidad posible de centrados y columnas. Se puede, además, duplicar o triplicar el espacio entre líneas para facilitar la lectura y utilizar tinta negra en papel mate blanco o amarillo pálido (los papeles de colores o brillantes pueden resultar difíciles de leer).

Braille. También pueden ponerse a disposición versiones en Braille. El Braille se usa para personas ciegas, traduce la letra impresa a puntos en relieve, que pueden leerse usando la punta de los dedos.  Para hallar un servicio de trascripción en Braille, se puede consultar en las organizaciones locales para personas ciegas o con trastorno visual o en  la página Web  (en inglés) “Braille en Internet” del Instituto de Educación Especial de Nueva York.

Disquetes, CD-ROMs o DVDs. Éstos pueden ser utilizados por personas con impedimentos visuales y/o con determinadas dificultades de aprendizaje que tengan acceso a computadoras con salida de audio y/o posibilidad de ampliación del texto. Es necesario asegurarse de que todo el material escrito esté guardado en formato de texto ASCII. Probablemente se deba hacer alguna modificación de formato en las tablas, etiquetas y sangrías.

Los dispositivos de ayuda auditiva ayudan a amplificar el sonido. Son ligeramente diferentes a los dispositivos auditivos convencionales, en tanto que éstos amplifican todo el sonido en un ambiente particular. Los  dispositivos de ayuda auditiva, en cambio, normalmente amplifican un sonido específico deseado (por ejemplo, la voz del ponente). Existen varios tipos de dispositivos de ayuda auditiva diferentes.

Subtitulado. El subtitulado consiste en texto escrito en la parte inferior de la pantalla en películas, videograbaciones, diapositivas y anuncios de servicios públicos, así como en cualquier otra proyección audiovisual como lo es una pantalla para personas que asisten a eventos. Existen tres tipos de subtitulado usados generalmente. El subtitulado en tiempo real se usa principalmente en programas en vivo, donde no se adelanta nada o casi nada de información relacionada con lo que se va a decir.  Un estenógrafo experto escribe las palabras a medida que se dicen de modo que aparecen casi instantáneamente. Las vídeo producciones que utilizan el sistema de subtitulado codificado requieren de una unidad decodificadora separada (en Estados Unidos, todos los equipos de televisión vienen equipados de fábrica con un receptor de subtitulado). El sistema de subtitulado no codificado ubica el texto en la parte inferior de la pantalla, en todo momento, a menudo en un recuadro negro.  A diferencia del sistema de subtitulado no codificado, el subtitulado codificado permite ubicar el texto en cualquier lugar de la pantalla, usando una amplia variedad de fuentes y colores.

El dispositivo de telecomunicación para sordomudos es una unidad de comunicación telefónica que una persona usa escribiendo las palabras en un teclado en lugar de usar la voz. Tanto quien llama como quien recibe la llamada deben tener un dispositivo de éstos para comunicarse.  Sin embargo, si una de las partes no tiene lo tiene, una alternativa es usar un servicio telefónico en el que un operador realiza la traducción para la parte que no tiene el dispositivo. Por ley, en Estados Unidos, todos los estados deben tener un servicio de telecomunicaciones.  Se puede buscar en la guía telefónica de la localidad, en la sección “Servicios especiales para discapacitados auditivos /del habla”. Los miembros del personal (especialmente los recepcionistas y otros que a menudo usen el teléfono) deberían estar capacitados en el uso de estos dispositivos.

Para resumir

Cada vez más, las personas con  impedimentos físicos o “capacidades diferentes” están recibiendo reconocimiento, comprensión y valorización. Las personas con discapacidades no son únicamente una población que las organizaciones deben esforzarse por atender, sino además una fuente valiosa de posibles miembros del personal, voluntarios y contribuidores. Esperamos que esta sección de la Caja de Herramientas Comunitarias sirva como buen punto de partida y provea algunas opciones acerca de dónde y cómo buscar más ayuda para todo aquel que esté buscando facilitar el acceso para personas con impedimentos físicos.

Contributor 
Chris Hampton

Recursos en línea

Disability Social History Project.

The Inclusion Network.

Job Accommodation Network.

The City of San Antonio, Texas Planning Department and the Disability Advisory Committee. (1997). Disability etiquette handbook.

U.S. Department of Labor Office of Disability Employment Policy.

The Virtual Volunteering Project's article on Working with Online Volunteers Who Have Disabilities

What You Should Know About Medical Examinations video produced by Able South Carolina presents information about how to ensure equal access to health care for people with disabilities.

Recursos impresos

American Friends Service Committee. (1997). Guide to etiquette and behavior for relating to persons with disabilities.

Kailes, J., & Jones, D. (1993). A guide to planning accessible meetings. Houston, TX: Independent Living Research Utilization.

National Organization on Disability (1997). That all may worship: An interfaith welcome to people with disabilities. Thornburgh, G. (Ed.). Washington, DC: National Organization on Disability.

Paraquad, Inc. (1999). Disability etiquette. St. Louis, MO: Paraquad, Inc.

Rife, J., & Thornburgh, G. (1996). From barriers to bridges: A community action guide for congregations and people with disabilities. Thornburgh, G. (Ed.). Washington, DC: National Organization on Disability.

White, G., Froehlich, K., & Knight, V. (1997). Youth Volunteer Corps training manual for working with youth volunteers who have disabilities. Lawrence, KS: University of Kansas Research and Training Center on Independent Living.