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¿Por qué son importantes las relaciones con los legisladores y sus asistentes?
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¿Quiénes son los legisladores y sus asistentes?
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¿Con quién necesita desarrollar una relación?
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¿Qué significa exactamente desarrollar una relación?
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¿Cómo encontrar a los legisladores y sus asistentes?
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¿Cómo establecer y mantener relaciones?
Veamos unas cuantas situaciones.
La legislatura del estado está discutiendo el presupuesto anual. Usted quiere un aumento en los gastos para los programas de tratamiento de drogas. Usted llama a un asistente de un legislador con quien ha trabajado, el cual está familiarizado con este asunto. Él está de acuerdo en hablar a su jefe; el legislador, por su parte, está de acuerdo en patrocinar un aumento, y él va a llamar para pedir varios favores y cambiar unas cuantas opiniones. Cuando se publica el presupuesto, el aumento está allí.
La fuente principal de fondos de su programa de entrenamiento para el empleo simplemente ha sido redireccionado a otra área, aunque su programa es muy eficaz entrenando personas y encontrándoles empleos que, de acuerdo con sus estudios de seguimiento, ellas todavía mantienen un año después. Usted llama a su representante estatal y al senador estatal, los cuales han visitado su programa y le conocen bien. Al día siguiente, usted y ellos están sentados en el despacho de la cabeza de la agencia del estado a cargo de los fondos en cuestión, y él -- mirando nerviosamente al poder legislativo colocado ante él -- está diciendo que encontrará el dinero para continuar su financiamiento.
Estas son, en realidad, situaciones reales. En ambos casos, los mediadores tuvieron éxito debido a que tenían ya buenas relaciones con los asistentes o legisladores los cuales conocían y confiaban en ellos. Es importante y útil, sin importar cuáles sean sus metas, desarrollar y mantener buenas relaciones con los legisladores y sus equipos. Para una mediación legislativa eficaz, es absolutamente vital. Esta sección le dará alguna información sobre legisladores y asistentes, y discutirá algunas maneras de desarrollar aquellas relaciones y mantenerlas frescas con el tiempo.
Esta sección trata específicamente con legisladores federales y estatales. Toda la información brindada, sin embargo, es igualmente relevante para los miembros de las ramas del poder ejecutivo y sus equipos y para los diseñadores de políticas a nivel local.
Aún cuando los miembros de la rama del poder ejecutivo (el presidente y los gabinetes ministeriales en el nivel federal, el gobernador y gabinete ministeriales en el nivel estatal, y el alcalde o gestor municipal y los departamentos municipales en ciudades y pueblos) y representantes locales - consejos ciudadanos, comisarios del condado - no pueden ser llamados legisladores, algunos pueden tener el poder de promulgar leyes y reglamentos, y todos tienen el poder de la persuasión. Muchos representantes locales y personajes - alcaldes/prefectos, juntas locales elegidas y designadas y agencias, personajes del gobierno del condado, etc. - tienen el poder de disponer fondos, y por tanto pueden ser muy importantes para su organización y su cometido. Esos representantes y personajes varían de estado a estado, e incluso de comunidad a comunidad, y no vamos a generalizar sobre esto o intentar describirlos aquí. (En la mayor parte del Noreste, por ejemplo, el gobierno del condado es simplemente inexistente; en estados de muchas otras partes del país, es extremamente poderoso.)
Las directrices y sugerencias para formalizar y mantener relaciones con los legisladores federales y estatales y sus asistentes discutidas en este capítulo pueden - y deberían - usarse a nivel local. Donde los métodos de contactar o establecer y mantener relaciones con representantes locales son diferentes de aquellos sugeridos para los legisladores estatales y federales, los incluiremos también. Si usted es un mediador - y si usted cuida de un asunto o está implicado en a grass roots u organización basada en la comunidad, usted es un mediador, le guste o no – cuantas más y mejores relaciones pueda desarrollar con los que toman las decisiones en todos los niveles, más eficaz usted será.
¿Por qué son importantes las relaciones con los legisladores y sus asistentes?
Todas las políticas, casi no importa como usted defina término, llegan al cabo por las relaciones personales. Esto es lo que Tip O'Neill expresa cuando dice: "Todas las políticas son locales;" esto es lo que la proverbial sala llena de humo representa; esta es una de las razones de que los “influenciadores” lleven a los legisladores a cenar y de que jueguen con ellos; y esto es el porqué tantos asuntos de de política se deciden únicamente por un pequeño número de personas.
Por el camino largo, todos nosotros escuchamos específicamente a aquellos que conocemos, nos gustan, y confiamos. Podemos intentar mantener la mente abierta, pero cuando oímos argumentos en conflicto, ambos teniendo sentido, lo más probable es que estemos de acuerdo con el que nos presenta alguien con quien tenemos una buena relación.
Las relaciones, en el nivel más fundamental, facilitan acceso a los que toman las decisiones. Si ellos le conocen, saben quién y qué usted representa, y le respetan, escuchan lo que usted tiene para decir. Prestarán más atención cuando le escuchen que cuando escuchen a alguien que no conocen.
Además, la relación es un proceso que desarrolla su propia historia en el tiempo. Si usted ha concedido favores a alguien, es más probable que le concedan favores, y vice versa. Mientras su relación con un legislador o con el asistente progresa, acumula un peso de favores concedidos y apoyo concedidos en ambas direcciones, y hace que los favores y apoyos mutuos continuos sean más y más posibles y probables.
Los seres humanos son animales sociales: Las relaciones son importantes para nosotros, y son una de las principales formas de negociar en nuestras vidas. La importancia para los activistas de la comunidad y los agentes del cambio social de entender y desarrollar relaciones no puede ser exagerada. Esto es el fundamento de dicho trabajo en cada nivel político, como lo veremos a lo largo de esta sección.
¿Quiénes son los legisladores y sus asistentes?
En general, hay dos niveles de legisladores en los EEUU: Federales, o sea, los miembros del Congreso; y estatales. La mayoría de nosotros conoce algo sobre el Congreso de la clase Cívica a la que hubiéramos deseado prestar más atención. Las legislaturas de los Estados son más difíciles para generalizar, ya que varían, a veces mucho, de estado a estado. Vamos a revisar rápidamente quién es quién en las ramas legislativo federal y estatal del gobierno.
Congreso
El Congreso de los EEUU, como casi todas las legislaturas del estados, es bicameral, o sea, tiene dos cámaras, la Cámara de Representantes y el Senado.
La Cámara de Representantes.
Los Representantes son elegidos por los distritos del Congreso que varían un poco de tamaño de estado a estado, pero son generalmente desde 550,000 a 600,000 personas. Ellos sirven dos años completos.
Cada estado debe tener al menos un Congresista. Actualmente, Wyoming, con una población de alrededor de 458,000 es el único estado que podría carecer de Congresista si tuviera que alcanzar estándar con respecto a la población. Hay unos cuantos estados de una plaza, incluyendo Alaska y Dakota del Norte y del Sur.
El Senado.
Hay dos Senadores para cada estado, independientemente de su tamaño. Los senadores sirven seis años completos.
Los Representantes, provenientes de los distritos menores, con frecuencia ven al gobierno en mandatos relativamente estrechos: ¿Qué efecto tendrá en mi distrito (y mis posibilidades de reelección)? Se espera que los Senadores tengan una perspectiva más amplia, mirando por el bien del conjunto del estado y del país. (No es un accidente que los Mandatos Senatoriales son mayores que los de los Presidentes. Se espera que los Senadores transciendan a los políticos y las administraciones, y tengan una amplia visión.)
Equipos del Congreso y legislativos.
Todo Senador y Congresista tiene un equipo de asistentes que hace muchas de las investigaciones y otros trabajos necesarios para la legislación. Esos asistentes pueden sustituir al legislador en encuentros, hablan con partes interesadas, buscan asuntos políticos, y sugieren y esbozan la legislación. Ellos con frecuencia conocen más sobre los asuntos que los legisladores hacen, y pueden tener una gran influencia sobre las políticas que se adoptan, qué proyectos se proponen, cómo se redactan los proyectos, y cuánto dinero es apropiado para áreas especificas del presupuesto.
El “Congressional Quarterly” publica un Directorio del Equipo del Congreso (ver Recursos) tres veces al año. La mayoría de los estados tanto publica directorios del equipo legislativo del estado similares, o tienen disponibles directorios ampliamente publicados por medio de organizaciones.
Cuánta influencia pueden tener los asistentes depende de los legisladores individuales. Algunos confían completamente en las personas de sus equipos, siguen sus sugerencias, y les piden que esbocen la legislación la cual firmarán dichos legisladores. Otros usan sus equipos solo como fuentes de información, y toman todas sus propias decisiones sobre política o legislación sin consejo del equipo.
Es importante entender que un legislador individual, tanto en el nivel del estado como federal, no conoce- y no puede – demasiado sobre la mayoría de lo que se vota. El presupuesto anual del estado es de cientos, o incluso miles, de páginas, con cada página conteniendo posiblemente 20 o 30 líneas de artículos. El presupuesto federal es incluso mayor. Como es demasiado para cualquier persona familiarizarse con tanta información, los legisladores con frecuencia escogen un número de asuntos que les interesa o que son importantes para sus electores, y se hacen conocedores de ellos. Con frecuencia, los colegas retrasarán su juicio en aquellos asuntos en los cuales son conocidos por tener experiencia. Sin embargo, si el legislador confía completamente en el equipo, bien pueden ser las personas del equipo quienes se conviertan en expertos, o incluso escoger los asuntos que el legislador acometerá. Así no solamente los legisladores sino también las personas de sus equipos son a los cuales los mediadores necesitan aproximarse.
El tamaño del equipo de un legislador federal depende de su posición: presidentes de comité y cabezas de grupo (jefes, cabezas de la mayoría y de la minoría, etc.) tienen más fondos para conformar su equipo. Sin embargo, incluso un Congresista del primer año, emplea un equipo de varias personas, alguno de cuyos trabajos es en su distrito base, y otros en Washington. Habitualmente uno o más viajes con el Congresista, y todos, probablemente, harán algún viaje entre el distrito del Congresista y su oficina en Washington.
Generalmente, un Congresista o Senador designa un jefe de equipo o jefe de asistentes quien supervisa las funciones y el equipo como un consejero político y de políticas. Cuanto más poderoso el legislador, más importante es el jefe de equipo, tanto en Washington como contacto con los mediadores. Esta persona tiene con frecuencia experiencia política, generalmente al menos en sus treintas, y habitualmente bien pagados. El/ella puede haber estado en su posición durante varios años, y espera permanecer allí en un futuro próximo.
Como contraste, el resto del equipo – las personas o miembros de bajo rango o “subordinados” -- tienden a ser personas haciendo pasantías o que acaban de salir de la universidad, mal pagados, y que cambian rápidamente, dejando su cargo con frecuencia después de un año o dos. Ciertas personas específicas en el equipo tienen responsabilidades políticas específicas, donde una se encarga de los asuntos de educación o salud, por ejemplo, otra persona se encarga de la política económica o de asuntos exteriores. Saber a quién contactar en la oficina -- o sea, qué persona es probable que conozca sobre su asunto -- puede frecuentemente hacer una mediación o abogacía mucho más fácil.
La mayoría de los asistentes trabaja durante un tiempo relativamente corto y después vuelven a estudiar o al sector privado. Sin embargo, las personas que permanecen en posiciones del equipo del Congreso, si son competentes, eventualmente son promovidas a posiciones del equipo principal, o contratadas para el equipo principal por otros legisladores. Ellos pueden permanecer en posiciones del equipo principal, continúan trabajando para agencias del gobierno o en la administración, o incluso instalan una oficina por sí mismos. Ellos son los verdaderos “apoderados” de Washington, ya que permanecen administración tras administración, y con frecuencia sobreviven a sus jefes del Congreso.
Legislaturas del estado
Según se ha explicado anteriormente, es difícil generalizar acerca de las legislaturas del estado, ya que varían fuertemente de estado a estado. Llamados con varios nombres (en California, por ejemplo, es la Asamblea del Estado; en Massachusetts es la Gran y General Corte de la Comunidad) y adoptando varias formas, la mayoría de las legislaturas del estado no obstante tienen algunas cualidades en común.
Excepto en el estado de Nebraska, todas las legislaturas de estado, como el Congreso, son bicamerales. Tienen una cámara y un senado, y como sus contrapartes federales, los representantes y los senadores representan diferentes electorados. Los distritos de los Representantes son menores (la diferencia de tamaño generalmente va desde aproximadamente dos-a-uno hasta cuatro-a-uno), y los mandatos de los representantes son con frecuencia más cortos que los de los Senadores (típicamente, dos años en vez de cuatro).
Muchos estados, específicamente los más populosos, tienen legisladores a tiempo completo para los cuales sus servicios políticos son sus empleos. Muchos otros, sin embargo, tienen legislaturas a tiempo parcial que alcanza solo unos cuantos meses al año, o solo uno o dos días a la semana. Los legisladores en esos estados son con frecuencia muy mal pagados (en Arizona, por ejemplo, el salario es $15,000 a año, más gastos), mientras algunos legisladores a tiempo completo son bastante bien pagados. En algunos estados (Vermont es uno), los legisladores no tienen incluso oficinas, y pagan sus propios gastos de viaje de ida y vuelta a la capital. La mayoría de los legisladores de medio-tiempo tienen otros empleos de medio-tiempo en otros lugares, una circunstancia que puede complicar sus vidas políticas así como las personales.
Miembros legislativos estatales.
Muchos legisladores a tiempo completo tienen presupuestos para el equipo, en tanto que sus equipos son habitualmente pequeños (una o tres personas, quizás no todas a tiempo completo). Si hay más de un asistente, uno puede equipar una oficina del distrito, mientras el resto trabaja en la capital del estado. En estados que son geográficamente compactos, puede haber poca diferencia, ya que la capital del estado puede estar a no más de una hora o dos desde cualquier parte del estado. En estados grandes donde conducir hasta la capital puede llevar un día completo, la localización de un miembro del equipo de trabajo principal implica mucho más.
Específicamente en estados donde la legislatura es a tiempo parcial-- y donde existe la tradición de legisladores ciudadanos, por oposición a los políticos de los estados-- los legisladores pueden no tener personal asistente en absoluto, y simplemente hacen sus propias investigaciones y tareas.
Los asistentes legislativos varían de gran forma con respecto a edad, experiencia, e influencia. En algunos estados, muchos legisladores comienzan por ayudar a otros al trabajar como asistentes, aprenden el sistema político y hacen importantes contactos de esa manera, y después instalan sus propias oficinas. En otros, los asistentes son muy eventuales, y tan mal pagados que pocos permanecen por algún tiempo.
Como en muchas organizaciones, mucho del trabajo del Congreso y de la legislatura del estado es habitualmente realizado en comités, en lugar del conjunto del cuerpo legislativo. La mayoría de esos comités tienen sus propios equipos, los miembros de los cuales a veces ajustan la política para los comités, y pueden ser muy poderosos en su propio derecho. Llegar a conocer esos asistentes de comité puede ser una importante herramienta de abogacía
¿Con quién necesita desarrollar una relación?
La respuesta corta a esta pregunta es cualquiera que usted pueda, pero esa no es necesariamente la mejor respuesta. Ciertamente, entre más personas del equipo y legisladores usted conozca será mejor, pero usted probablemente no tiene una cantidad ilimitada de tiempo para dedicar a su red. Usted tiene que hacer algunas selecciones, y esas selecciones dependen de con el nivel de mediación o abogacía que usted está comprometido, y qué tipo de apoyo le gustaría obtener de los legisladores y asistentes. He aquí algunas directrices para decidir las que le gustaría alcanzar y llegar a conocer.
El primer paso absoluto aquí es asegurarse de que cualquiera implicado en su esfuerzo de abogacía conoce quiénes son sus propios legisladores estatales y federales, y – si no son los mismos- quiénes son los legisladores que representan a los beneficiarios de su organización o iniciativa.
¿Quién lo necesita a usted? Usted tiene la mejor posibilidad de desarrollar una relación con alguien que lo ve como una posibilidad de beneficios mutuos, en lugar de que usted explote a la otra parte. En términos legislativos, esto significa:
- Sus propios legisladores federales o estatales. Cualquier político merecedor de su salario sabe que nunca le habla a un votante solo. Sabe que usted tiene amigos, parientes, y colegas que es probable que oigan cuando usted piensa que él es un regalo de Dios a la democracia o el político equivalente al “héroe de tiras cómicas”. Solo por ese motivo, las personas que habitualmente le representan están dispuestos a hablar con usted. Si usted puede también mostrarles cómo el apoyo a su asunto o al trabajo que hace beneficiará a sus distritos, ellos querrán estar de su lado, porque lo que es bueno para el distrito es bueno para su reelección.
Esto puede sonar cínico, pero incluso los políticos que son en su mayoría sinceros y en su mayoría comprometidos con los hechos de los seres humanos que representan piensan constantemente en su reelección. Los representantes, específicamente, porque sus mandatos son solo de dos años, están siempre comprometidos con la próxima elección, y comienzan a correr tan pronto como son elegidos. Si usted puede ofrecerles algo que les ayudará a mantenerse en el despacho, ellos estarán dispuestos a ofrecer algo a cambio. De cualquier forma, si sus apoyos podrían estar en el futuro, tanto mejor -- esta es una razón de que usted quiera que sean reelegidos.
- Los legisladores que representan a muchos de sus participantes o beneficiarios, incluso si ellos no le representan a usted personalmente.
- Los legisladores para los cuales su asunto es crucial. Alguien que esté corriendo en la plataforma de protección al medio ambiente necesita prestar atención a esa meta. Si usted tiene la confianza de la comunidad, o de una coalición de medio ambiente, entonces usted es un importante aliado, y una fuente de información útil. Usted también es una fuente potencial de presión en apoyo a la legislación.
- Los legisladores o los asistentes con una pasión personal por su asunto. Alguien que ha perdido un pariente como resultado del fallo de los cuidados de salud disponibles es probable que estén muy interesados en la salud de la comunidad y los cuidados de salud universales, por ejemplo, y querer trabajar con usted para expandir o instituir proyectos en aquellas áreas.
- Los asistentes, específicamente el equipo del comité, que necesita la información que usted tiene en sus manos. Si usted se ha establecido por sí mismo como una fuente confiable, puede hacer el trabajo de los asistentes infinitamente más fácil ahorrándoles horas de investigación.
¿A quién necesita usted? ¿Quiénes son los legisladores y asistentes clave que usted tiene que conocer, si usted va a ser un mediador eficaz? Ellos son las personas en posiciones que son cruciales para su asunto, y algunos de ellos son las mismas personas que necesitan de usted:
- Los Presidentes o vice-presidentes o los miembros de los comités clave, y/o sus asistentes. Si su organización está orientada a la reforma de la educación, es importante conocer a las personas del comité de educación. Si usted realiza un trabajo de entrenamiento para receptores de subsidios, podría querer contactos en ambos comités: el de Comercio y Trabajo y el de Servicios Humanos.
- Los legisladores y los equipos individuales y los presidentes de comités o que son importantes para cualquier asunto. El Portavoz de la Cámara, el Presidente del Senado, el presidente del Comité de Ways y Means (encargado de redactar los impuestos) o el Comité de Reglamentos.
El Comité de Ways y Means (hay uno en la Cámara y uno en el Senado) hace las recomendaciones al presupuesto anual de la cámara, y eventualmente decide cuánto dinero será dotado para qué asuntos en el presupuesto federal o estatal. Si usted quiere dinero para su asunto en particular, alguien tiene que hablar al Comité de Ways y Means. El jefe del personal de Ways y Means puede tener tanta influencia como el presidente en la confección del presupuesto anual, y decidir cuántos fondos van a áreas específicas del presupuesto.
El Comité de Reglamentos, que supervisa como el organismo legislativo trabaja, debe pasar cada proyecto individual antes de ir al palco para ser votado. El Comité de Reglamentos puede ser tremendamente poderoso, porque tiene la disposición de sostener algo durante tanto tiempo como sea necesario para ser llevado a cabo. Puede parar un proyecto, al menos por un año, sujetándolo hasta el fin de la sesión del legislativo, después del cual debe ser repuesto. Con frecuencia, los proyectos mueren en el Comité de Reglamentos no por oposición a ellos, sino por falta de apoyo.
- Los asistentes de su defensor legislativo o de los legisladores que son particularmente poderosos, específicamente aquellos asistentes con responsabilidad por su asunto. Algunos legisladores han balizado posiciones fuertes en asuntos específicos y se les conoce como expertos en ellos por otros legisladores. Otros, especialmente en el Senado de los EEUU, son lo bastante poderosos como para que sus apadrinamientos a cualquier asunto tenga un valor primordial, tanto si son vistos o no con conocimiento al respecto. Esas personas no son siempre fáciles de encontrar, pero sus asistentes habitualmente lo pueden ser. Además, los asistentes pueden tener tanta influencia en el establecimiento de políticas como los mismos legisladores.
Nivel local, pensar en quién necesita su apoyo, o qué apoyo usted necesita, es al menos parcialmente uno de los propósitos de conocer su comunidad y el área local. Los representantes que son ellos mismos de un distrito donde vive una cantidad de beneficiarios de su organización, o que han experimentado circunstancias en sus vidas similares a aquellas de su población objeto, pueden tener un interés asumido en trabajar con usted. Otros pueden tener un plano magistral para la comunidad o el área que incluye su asunto. Aún, para los demás, puede ser un simple asunto de votos, o incluso de presión de la familia de un miembro o amigo íntimo. Depende de usted descubrir o saber quién es quién, entender a los políticos locales y el sistema político local.
Otra diferencia en el nivel local es que muchos, o quizás la mayoría, de los representantes locales no tienen asistentes. Ellos pueden tener subordinados, pero esos individuos normalmente tienen funciones específicas, en lugar de formar parte simplemente del equipo del representante, para ser utilizado cuando sea necesario. Así, es con frecuencia el representante mismo quien usted quiere llegar a conocer. (Pero no necesariamente... De nuevo, eso depende de la comunidad específica y de cómo el sistema trabaja.)
Debido a que los sistemas locales son muy diferentes, hay un vasto abanico de personas que podrían ser aliados y amigos. Los que se muestran en la lista abreviada abajo - excepto para los obvios como alcaldes/prefectos o comisarios del condado - podrían ser representantes del pueblo, ciudad, condado, o representantes regionales, dependiendo del sistema de su área.
- Alcaldes/prefectos
- Gestores municipales
- Ilustres
- Concejales de Pueblo o ciudad
- Comisarios del condado
- Miembros de Juntas de Salud
- Miembros de la Comisión de Conservación
- Miembros de la Junta de Planeamiento o Planificación
- Miembros del Comité Escolar
- Proyectistas de Pueblo, ciudad, condado, o regionales
- Miembros de la Junta de Finanzas
- Administradores del Condado
- Representantes del distrito
¿Qué significa exactamente desarrollar una relación?
Cuando usted escucha la palabra "relación,"probablemente imagina tanto el sofá del terapeuta como argumentos relacionados problemas de comunicación o tratar a un compañero con demasiada confianza. Sin embargo, hay relaciones de todos los tipos. La palabra, usada en este contexto, se refiere a un acuerdo de trabajo que fomentará comunicación bidireccional placentera y eficazmente entre usted y un legislador y su equipo. La relación no tiene que ser muy personal, o amistosa --aún cuando puede desarrollarse en esas direcciones, dependiendo de las personalidades implicadas-- pero necesita ser de mutua confianza y respeto, y estar basada en el mutuo interés de un conjunto específico de asuntos y en los beneficios mutuos.
Hay una cantidad de metas que usted debería desear para establecer una relación. En muchos casos, todas o la mayoría de ellas pueden estar fuera de su cometido, pero ellas son ideales hacia los cuales trabajar.
- Las personas del equipo del legislador-- y el legislador mismo -- deberían reconocer su nombre (idealmente, con placer), y estar dispuestos a dar un retorno a sus llamada con prontitud.
- Si usted quiere hablar con el legislador en persona, tendrá su oportunidad.
Los legisladores del Estado, si le conocen bien, con frecuencia lo llamarán de vuelta si usted pide hablar con ellos. Los congresistas raramente lo harán, a no ser que le conozcan extremamente bien o le perciban como alguien que ejerce mucho poder o autoridad. Sus asistentes, sin embargo, pueden con frecuencia arreglar encuentros o llamadas con ellos. Para un Senador de los EEUU, lo mejor que usted puede hacer probablemente es hablar con el ayudante que se encarga de su asunto.
- Usted debería ser la primera persona en la que la oficina del legislador piense en llamar cuando necesita información sobre su asunto.
- El legislador debería estar dispuesto a apoyar su asunto cuando usted lo necesita, y rápidamente. Esto puede significar intentar anular un veto, estimular un voto, intentar obtener un proyecto pasado en el último minuto, etc. (Por lo mismo, usted debería saber cuando esto es políticamente imposible para ellos, y estar dispuesto a tomar un no como respuesta en esas circunstancias.)
- El legislador o las personas de su equipo deberían llamar para alertarlo sobre los puntos críticos, situaciones donde usted necesita movilizar su electorado, ante inminentes problemas u oportunidades, etc.
El grado de receptividad señalado en los puntos 4 y 5 implica tanto que el asunto está o cerca del corazón del legislador, o que tiene una relación con usted lo bastante (y entiende su influencia y el electorado bastante bien) que actuará a petición suya. Si, de los varios legisladores con los cuales usted intenta establecer relaciones, usted puede encontrar uno que actuara de esa manera, usted ha hecho más que su trabajo como mediador.
- El legislador debería estar dispuesto a visitar su organización o comunidad, o apoyarle de otras maneras- hablando a nivel organizacional, explicando el proceso legislativo a los participantes, etc.
Especialmente si usted presenta esto como una oportunidad de encontrar al electorado (nuevos votantes, específicamente), es probable que los legisladores estén dispuestos ante esa posibilidad. Ellos pueden enviar a los asistentes en lugar de ir por sí mismos, pero usted puede también sorprenderse ya que con frecuencia un legislador estará de acuerdo en presentarse a ese tipo de eventos.
- Usted debería estar dispuesto a ayudar al legislador y a su equipo cuando lo necesitan.
- Actuar como un recurso, encontrar información, etc.
- Andar tras de sus proyectos “mascota” (donde estén de acuerdo con su principios), y estimular a los colegas a hacer lo mismo.
- Decir cosas buenas sobre ellos donde quiera que vaya.
- Convídelos a la comunidad o a funciones profesionales donde puedan encontrar personas.
- Ofrézcales premios.
- Agradézcales publicando sus ayudas.
- Menciónelos en los medios de comunicación.
- Haga contribuciones de dinero y/o trabaje en sus campañas de reelección.
- Usted debería tener una relación lo suficientemente personal con al menos una persona en la oficina – lo ideal sería con el legislador mismo – con los que usted pueda charlar unos cuantos minutos sobre familia, música o películas, deportes, política, etc. Ustedes no tienen que ser amigos íntimos, pero es bueno tener al menos alguna conexión personal.
¿Cómo encontrar a los legisladores y a sus asistentes?
Está bien, usted está convencido -- necesita tener contacto al menos con sus legisladores estatales y sus asistentes, y quizás con sus Congresistas y Senadores también. ¿Cómo organizar su primer encuentro?
La mejor opción es la de un encuentro cara a cara, pero no siempre puede ser posible. Una conversación telefónica puede tener algo que ver con el contacto inicial. En algunos casos, esto puede realmente ser preferible, porque dará al legislador o asistente algún contexto para cuando usted lo encuentre en persona. Hay diversas maneras de arreglar un encuentro:
Concertar una cita formal, tanto en el distrito o en la capital del estado. La mayoría de los legisladores están dispuestos a ver al electorado o a los mediadores cuando tienen tiempo. (Cualquiera quiere ver a su legislador en la época del presupuesto. Es una buena idea conocerlo cuando no hay alguna crisis específica, porque así estará disponible cuando lo haya.) Sin embargo existe la ley del más fuerte.
- Usted casi nunca llegará a ver a un Senador de los EEUU (al menos uno poderoso, o uno de un estado grande), a no ser que tenga a alguien dentro (el cual vaya a las reuniones con un asistente), o a no ser que usted oficialmente represente a un grande o poderoso electorado. Sin embargo, usted puede fácilmente obtener una cita con un asistente, y esto es con frecuencia igual de eficaz. En general, los asistentes del Senado son las personas de la oficina principalmente comprometidas con la política, y ellos pueden con frecuencia influenciar al Senador en diversos asuntos.
- Usted puede frecuentemente conseguir ver a un Congresista, especialmente en el distrito. Los Congresistas son habitualmente más atentos con el electorado porque tienen que moverse cada dos años, y sus distritos, en la mayoría estados, son mucho menores que el conjunto de los Senadores del electorado del estado.
Usted siempre puede conseguir un encuentro con los asistentes de un Congresista en el distrito. Su trabajo primario es el servicio de elección, así ellos se quedan felices para hablar a los votantes. Esta es una buena posibilidad para educar a un asistente en su causa o asunto en cuestión, y para prepararse a sí mismo para un encuentro con el Congresista.
- Usted siempre puede conseguir un encuentro con los asistentes de un Congresista en el distrito. Su trabajo primario es el servicio de elección, así ellos se quedan felices para hablar a los votantes. Esta es una buena posibilidad para educar a un asistente en su causa o asunto en cuestión, y para prepararse a sí mismo para un encuentro con el Congresista.
- Habitualmente, usted puede conseguir ver a un senador estatal, pero no necesariamente por un largo encuentro, y puede llevar al menos a un encuentro con un asistente para prepararlo. Usted tiene una mejor posibilidad de más tiempo como parte de un grupo que representa su asunto.
- Usted puede casi siempre encontrarse con un representante estatal. En la mayoría de los estados, los distritos legislativos contienen menos de 50,000 personas, de manera que cada votante es importante. Los representantes habitualmente tienen unas horas en una oficina permanente en el distrito, aún cuando a veces están tan ocupados allí que es más fácil verlos en la capital del estado.
En distritos rurales o pueblos pequeños, usted puede estar dispuesto a atrapar al representante cuando él va a recoger su correo en la oficina de correo el sábado por la mañana, o cuando tiene una reunión en la cafetería local el viernes (en muchos estados, el viernes es tradicionalmente un día para pasar en el distrito), o en un evento de la comunidad. Incluso es probable que su teléfono particular se encuentre en la lista, si usted tiene problemas en conseguir contactarse con él de otra manera. (Sin embargo, si usted usa esos recursos, - específicamente su teléfono particular - asegúrese de no abusar del privilegio. Si le molesta invadiendo su privacidad, sus posibilidades de establecer a relación disminuirán.)
Otro factor aquí es que, en tales distritos, es mucho más probable que usted tenga alguna conexión personal con un representante estatal – por conocer a pariente, un vecino, un colega, alguien con quien estuvo en la escuela. Ese tipo de contacto hace mucho más fácil el hecho de arreglar un encuentro.
- Usted puede siempre conseguir un encuentro con un asistente de un senador estatal o representante estatal, tanto en el distrito como en la Cámara del Estado. Ya hemos discutido como los asistentes pueden realmente ser las personas clave en las decisiones políticas. Si usted no conoce la persona específica que usted quiere, procure encontrarse con cualquiera que domine su asunto. La importancia y utilidad de un encuentro con un asistente dependerá de la competencia de este asistente en particular y del grado de confianza del legislador en él en cuanto a información y consejo.
- Sepa sobre lo que usted quiere hablar. Debería ser claro, conciso, y enfocado en su asunto. Si usted tiene material impreso, debería ir directo al punto -- un folleto o un artículo de periódico-- teniendo en cuenta que cuanto más largo sea, menos probable será que realmente sea leído.
- Identifique el asunto claramente. No sobrecargar al legislador o al ayudante con información; sea lo bastante simple como para que entienda y recuerde la mayor parte de lo que tenga que decir.
Si usted va a pedirle ayuda al legislador, sea tan específico como pueda. Si existe un compromiso inmediato, subráyelo. ("Los que entre nosotros se encuentran en el campo están comprometidos con el proyecto 2374 de la Cámara, que podría limitar el número de personas que podríamos servir.") Explicar porqué es un compromiso, cómo podría afectar al electorado y al distrito, y qué acción necesita ser emprendida. ("¿Sería posible para usted aproximarse a los líderes y patrocinadores, explicar las consecuencias no intencionadas de no favorecer a este proyecto, y pedirles que lo coloquen en su agenda?")
- Identifíquese a sí mismo con el asunto, y establezca sus credenciales como un portavoz. ("He sido el director de un programa de salud en la comunidad durante 11 años, y estoy en la Junta de la organización profesional del estado, donde presido el comité de proyectos públicos.") Si usted puede identificarse a sí mismo como el portavoz, o como miembro de un grupo o coalición, le dará más credibilidad.
- Recuerde que usted tiene conocimiento que los legisladores y sus asistentes no tienen, debido a que usted invierte todo su tiempo en este asunto. Si ellos conocen algo sobre esto en conjunto, probablemente es de segunda mano; puede ser conocimiento convencional, que, a menudo, tiene poco que ver con la realidad. Saque ventaja del hecho de que usted representa la realidad para ellos.
Sin embargo, no cometa el error de subestimar a alguien porque usted no le ha preguntado. Un legislador o asistente puede tener experiencia personal de su asunto que usted no sabe, o puede haber tratado con ello en el pasado. No asuma la ignorancia -- usted puede ofender a alguien innecesariamente.
Inste a los legisladores o asistentes a visitar su organización o pueblo. Organice una actividad para que ellos conozcan a los participantes de su proyecto, o con los miembros de su coalición. Si usted está comprometido con el pueblo como un todo-- apoyar la iniciativa de los residentes para mejorar la vecindad, preservando el espacio verde, aumentando las oportunidades para los jóvenes -- llévelos a hacer un tour. Si usted usa una invitación como una manera de hacer contacto con un legislador o con su asistente, recuerde:
Dele una razón para venir.
- Pídale que hable en el evento, o que presente algo: certificados, diplomas, premios.
- Dele al legislador un premio por algo bueno que haya hecho, o por encabezar un proyecto que ayudó al asunto o a la comunidad.
- Pídale que le explique a los participantes, o a un encuentro de profesionales el proceso legislativo.
- Invítelo a ver algo especifico -- una exhibición, o un problema de la comunidad.
- Invítelo a hablar con un grupo focal (de parientes de adolescentes, receptores de subsidios, activistas del medio ambiente, etc.).
- Consiga que los medios de comunicación estén presentes allí.
Déle una razón para volver.
- Agradézcale por su visita y su contribución, ambos en el momento y más tarde, por medio de una carta. Los legisladores usan tales cartas de agradecimiento para mostrar sus buenos trabajos en el distrito.
- Invítelo a volver para darle seguimiento a algo específico. ("Estamos planeando un día comunitario para limpiar este lote el sábado 14 del próximo mes. Nos encantaría tenerle con nosotros, y que vea a la coalición en acción.")
- Invítelo a volver para continuar las discusiones con los participantes.
- Invítelo a volver para presidir o hablar en un evento u ocasión específica.
Déle una razón para que lo recuerde a usted y su organización.
- Déle algo para llevar -- un premio (ver arriba), un periódico o escritos de los participantes, una foto, un folleto, un informe o conferencia de la posición, etc.
- Proporcione una experiencia poco común para él (un paseo a lo largo de la ruta de los rieles de la vía del ferrocarril propuesta, un tour a proyecto de construcción de casas, una simulación de registro de subsidios).
- Traiga personas que se vean afectadas por su asunto para contar sus propios relatos personales.
Lleve participantes o un grupo de la comunidad a encontrarse con el legislador por primera vez. El encuentro no debería ser intimidante o amenazador -- simplemente un grupo de ciudadanos visitando a su legislador, tanto con una petición específica, como llanamente para discutir asuntos de compromiso. A los legisladores les parece difícil no atender los encuentros con grupos de electorado numerosos.
Empiece con una conversación telefónica. Los legisladores estatales habitualmente se sentirán libres para hablar por teléfono -- muchos responden sus propios teléfonos, al menos parte del tiempo. Generalmente es improbable que los legisladores federales le hablen a no ser que ya le conozcan, pero usted puede tener una conversación telefónica con una persona del equipo, y empiece el contacto de esa manera.
Declare en una audiencia del Congreso o legislativa estatal o en una sesión de comentarios públicos. Usted tendrá probablemente que esperar en la audiencia durante varias horas para declarar, pero puede merecer la pena por el reconocimiento que eso traerá. Cuanto con más frecuencia lo haga, más reconocible usted será.
Mantenga al legislativo del estado informado de su asunto. Usted puede necesitar al menos un legislador para patrocinar esto (una buena idea en cualquier caso, ya que es más probable que los legisladores respondan a los colegas que a fuentes externas). Con frecuencia los legisladores envían asistentes a esos informes, lo cual es muy bueno. Asegúrese de que tiene un libro de firmas en la puerta, e intente tanto hablar como contactarse con cualquiera que se presente.
Otro evento puede también ser apropiado aquí, dependiendo del asunto y de las circunstancias. La ventaja de una sesión legislativa es que usted puede legítimamente convidar a todos los legisladores, y, si lo ha organizado cuidadosamente, puede atraer a un buen número de legisladores y asistentes. Un patrocinio, o incluso una convención del legislativo, para ese asunto puede emerger de tal sesión.
Conseguir una introducción de un conocido mutuo. Puede ser de utilidad, como en toda relación, si usted es recomendado como una persona razonable y de conocimiento por alguien que el legislador o el ayudante conoce.
Participe de eventos donde sea probable que los legisladores y asistentes estén presentes, y tenga la oportunidad de presentarse por sí mismo. En Washington, eso puede significar conseguir estar en la "lista" de alguien. En un distrito legislativo del estado, habitualmente hay más que hacer llevando registro de los eventos de la comunidad o encontrar a alguien que conoce a la persona que usted está esperando encontrar.
Todos los métodos anteriores se aplican a los representantes locales también. En comunidades menores, es probable que usted tenga una conexión directa con casi todos los representantes mediante amigos, familia, o socios de negocios. Además, los representantes en comunidades menores son mucho más receptivos a ser llamados a la casa que lo que estaría dispuesto un legislador del estado.
Si usted tiene una conexión personal, y es alguien que conoce razonablemente bien, podría ser una buena idea para que esa persona estuviese presente en un primer encuentro. Un representante podría estar más cómodo - y por tanto más receptivo - si se encuentra con alguien que conoce. Existe también el patrocinio anónimo que va siendo acompañado por alguien que ya se acepta como a un amigo.
¿Cómo establecer y mantener relaciones?
Un encuentro no hace una relación. Como con cualquier otra relación, usted tiene que hacer un esfuerzo para conseguir conocer a la otra persona, y desarrollar el respeto y el entendimiento mutuo. ¿Cómo puede usted hacer eso?
- Mantener contacto después del encuentro inicial. Dígale al legislador o al ayudante que le mantendrá informado sobre cualquier cosa que haya discutido, y después hágalo. Llame, escriba, o envíe correos electrónicos regularmente con actualizaciones y nueva información.
Intente hablar con la misma persona siempre -- el legislador si usted puede, con un ayudante si es quien se encuentra con usted la primera vez o si el legislador no se encuentra disponible. (Usted no tiene que hablar con el legislador siempre, incluso si usted se encuentra con él/ella inicialmente. Para la mayor parte de las conversaciones, un ayudante podría ser bueno. Contáctese con el legislador para cuando usted realmente lo necesite.)
Si es posible, encuéntrelo cara a cara periódicamente, así como por teléfono. Su contacto debería ser lo suficientemente regular como para que las personas recuerden quién es usted, y apenas lo necesario para que así ellos no digan, "Oh, no -- no él otra vez," cada vez que usted llame.
- Participe en recaudaciones de fondos y otros eventos en honor del legislador. Esto significa ser político y colocar su propio dinero en su propio tiempo. Si usted habla en serio sobre ser un jugador, este es el juego. Puede que no le guste, pero es donde la acción está. Si el legislador conoce su cara de esos eventos, estará más abierto a aproximarse para ayudarlo (después de todo, usted es un partidario.)
Si el legislador es alguien al que usted apoya entusiasticamente, puede incluso encontrarse a sí mismo en una lista de patrocinadores para tal evento. El legislador le recordará si su nombre está en el encabezamiento de una carta de colecta de fondos. Usted sabe que ya es alguien conocido cuando se encuentra con ellos fuera del contexto político -- en la calle o en los salones de la capital del estado -- y le llaman por su nombre.
- Tenga conversaciones reales. No diga simplemente su tema y cuelgue. Esté genuinamente interesado en lo que la otra persona tiene que decir, en las peculiaridades de su trabajo, etc. Discuta asuntos en general cuando sea apropiado, no solo su interés inmediato. Con frecuencia, el legislador o ayudante pueden estar presionados con el tiempo, o simplemente demasiado ocupados para tener una conversación, y es importante que lo sepa en esa situación y respete. Pero también habrá veces cuando ellos estén libres para hablar, y aquí es cuando usted puede desarrollar una relación común personal.
Es bonito si usted puede desarrollar una amistad real, pero usted no puede hacer que suceda. Ello tanto ocurrirá como no, depende de quiénes son como personas, y de cuánto contacto usted tiene. Pero es una buena idea establecer, a lo largo del tiempo, quién es usted, y cuáles son sus perspectivas y prioridades. La meta es el respeto mutuo. Si usted puede ir al próximo paso y hacerse amigos, esto es estupendo... pero no es necesario para una buena relación de trabajo.
- Pida consejo a los legisladores y a los asistentes -- y sígalo cuando pueda. Si usted está planeando una campaña legislativa, interese al legislador para que le ayude a diseñarlo. Si usted está aproximándose a otros legisladores o si usted tiene preguntas estratégicas sobre como enfrentar un asunto, pida que apunte como hacerlo eficazmente. Si usted está intentando obtener financiamiento o un aumento de financiamiento en el presupuesto del estado o federal, pida que influya todo lo que sea apropiado o posible.
- Establézcase a sí mismo como una fuente de información absolutamente confiable. Sea preciso, rápido, y nunca exagere o confunda algo para hacer su argumento más fuerte. Si usted no conoce algo, dígalo así, prometa que lo encontrará, y después hágalo. Usted ha llegado a su meta cuando los legisladores y asistentes empiecen a llamarle buscando información y consejo.
- Agradézcales a los legisladores por sus ayudas, pública y privadamente, formal e informalmente, en toda oportunidad. Escriba cartas de su organización o coalición, póngalo en el papel, anúncielo en los encuentros públicos. Utilice cada posibilidad para hacerlos notar como legisladores buenos.
- Respete las limitaciones y prioridades del legislador o del ayudante. Si usted no está seguro como algo lo afectará, pregunte antes de tomar una decisión sobre ello. No haga algo que lo ponga en una posición incómoda o inadecuada, especialmente como resultado de algo que le están dando como un favor. Esto podría ser falta de ética, y podría dañar la relación definitivamente. Él/ella podría trabajar con usted de nuevo, pero nunca más confiará en usted.
Usted precisa ser absolutamente honesto sobre las consecuencias de las acciones y políticas – las suyas y las de ellos. Si usted no puede apoyarlos en un asunto determinado, es mucho mejor para el legislador saber que siempre puede confiar en usted para decir la verdad, en lugar de ser sorprendido desagradablemente debido a que usted fue incapaz de darle malas noticias. Si ellos saben que pueden creerle cuando usted no está de acuerdo, también asumirán que lo que dice es verdad, en lugar de solo servir a sus intereses propios.
- No abuse de la relación. No pida ayuda a los asistentes a no ser que realmente la necesite. No sea inoportuno: mantenga sus contactos en un nivel razonable y negociable. Nunca exija – pregunte si le pueden ayudar. Y sea comprensivo si la respuesta es no.
Para resumir
Establecer relaciones con los legisladores federales y estatales -- Senadores de los EEUU y Congresistas, senadores y los representantes del estado -- y representantes locales pueden hacer su esfuerzo de mediación mucho más fácil. Si los legisladores responden o devuelven sus llamadas de teléfono, confían en su información, y están dispuestos a ponerse en una situación incómoda por usted, usted está mucho más apto a alcanzar sus metas, cuando ellos se centren en el financiamiento o la legislación.
Al mismo tiempo, desarrollar relaciones no sucede sin esfuerzo. Usted debe entender quienes son los legisladores y asistentes clave, hacer contactos iniciales con ellos, y después continuar a lo largo del tiempo. Mantener contacto regular, consiguiendo que sea personal cuando pueda, establecerse a sí mismo como alguien confiable y una fuente confiable de información, y respetar las limitaciones y prioridades de los legisladores y de los asistentes ayudará definitivamente a ganar y mantener sus apoyos.
Recursos en línea
Biblioteca de la Universidad de Michigan. Otras páginas estupendas, incluyendo enlaces a información sobre los 50 gobiernos estatales y el federal -- leyes, juzgados, ramas del ejecutivo, y mucho más.
La Coalición Cristiana. Una guía para el Congreso: información completa de contacto, biografías resumidas, fotos, cómo encontrar-su-Representante-por-código-postal-, y más.
Directorio del equipo del Congreso. Ver Recursos Impresos, abajo.
La absolutamente indispensable página Web para mediadores. Nombrada en honor a Thomas Jefferson, esta página de la biblioteca del Congreso tiene los textos actuales de todos los proyectos federales, presupuestos, legislación pendiente y pasada (todo esto desde 1993 en adelante), tanto como lo que actualmente o recientemente está en discusión, y acceso a todo lo demás.
Página de recursos de la rama legislativa de la Biblioteca del Congreso. Todo lo que se necesita saber y más: emails, comités, entradas y salidas de las operaciones del Congreso, y enlaces a una multitud de otras páginas importantes. Una página excelente.
Un recurso para las 50 legislaturas estatales. Información por cada estado sobre cada legislador, cada comité legislativo, textos de los proyectos y presupuestos, etc. La página también incluye las otras ramas de gobierno, legislación pasada y pendiente, y otra información, dependiendo del estado. Un vasto recurso, especialmente para grupos que trabajan en más de un estado.
Registros de Voto del Congreso y legisladores estatales, entre otras informaciones políticas.
Servicios Web de los líderes de la Cámara de los EEUU – enlaces Web a los líderes de la Cámara.
Recursos impresos
Avner, M., & Smucker, B. (2002). The lobbying and advocacy handbook for nonprofit organizations: Shaping public policy at the state and local level. Amherst H. Wilder Foundation. This book offers a clear step-by-step guide to implementing a successful advocacy program at both the state and local levels.
Berkowitz, B., & Wolff, T. (2000). The Spirit of the Coalition. Washington, DC: American Public Health Association.
Congressional Quarterly, Congressional Staff Directory. Congressional Quarterly Press, Washington, DC. Updated three times yearly.
Fitch, B. (2010). Citizen’s Handbook to Influencing Elected Officials: Citizen Advocacy in State Legislatures and Congress: A Guide for Citizen Lobbyists and Grassroots. The Capitol Net, Inc. This book offers practical guidance for reaching elected officials with a variety of different communication strategies.