Resumen:
El Grupo de Trabajo de la OPS para la Efectividad de la Promoción de la Salud ha desarrollado la Guía para la Documentación de Iniciativas de Promoción de la Salud como un recurso para dar apoyo a los países en las Américas en sus esfuerzos para documentar las iniciativas de promoción de la salud. Los siguientes ejemplos son 15 estudios de caso completados con la Guía.
Los 15 estudios de caso representan una mezcla de experiencias de países de bajos, medianos y altos recursos en las Américas con una variedad de contextos políticos, sociales, económicos y políticos. Los estudios de caso fueron implementados en diferentes niveles, nacionales o locales, y con el objetivo de alcanzar una variedad de grupos de la población. La mayoría de los estudios de caso fueron implementados al utilizar la comunidad o municipalidad como el escenario o entorno, pero también fueron reportados casos que se enfocaron en escuelas y el lugar de trabajo.
Lea el reporte Facilitando el avance de la promocion de la salud en las Americas: Lecciones de los 15 estudios de caso para un análisis de las características, los asuntos y los temas que se tuvieron en común en la implementación de estos programas e iniciativas de la promoción de la salud.
Ejemplo 1: Medidas de colaboración para lograr cambios en las comunidades y reducir los riesgos de enfermedades crónicas y disparidades de salud en la ciudad de Kansas, Misuri (Estados Unidos)
Autores: Jerry Schultz, Steve Fawcett, Vicki Collie-Akers
En el 2000 se formó la Coalición contra Enfermedades Crónicas de la Ciudad de Kansas, Misuri, en respuesta a dos hechos: 1) la invitación de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) a presentar propuestas para la campaña Enfoques Raciales y Étnicos para la Salud Comunitaria 2010 (REACH, por sus siglas en inglés) y 2) las evaluaciones o valoraciones sobre la salud de las minorías publicadas por dos organizaciones que señalaban considerables disparidades en la salud entre los habitantes afroamericanos y los latinoamericanos de la ciudad de Kansas.
Esta área urbana se caracterizaba por altos niveles de pobreza y pocas oportunidades para adoptar hábitos y comportamientos saludables. La Coalición está formada por organizaciones de salud, médicas, comunitarias y vecinales; grupos religiosos, comercios así como residentes de la ciudad de Kansas. Con el tiempo, la Coalición pasó a incluir a comunidades indígenas entre sus grupos de población destinatarios u objetivo, aunque los intentos para llegar a ellos nunca dieron fruto.
La misión de la Coalición es mejorar los resultados de salud relativos a la diabetes y las enfermedades cardiovasculares al promover el acceso a servicios de salud de calidad, ambientes saludables y estilos de vida sanos, mediante la prestación de servicios preventivos y asistenciales comunitarios integrales, asequibles, adaptados a las diferencias culturales, y con responsabilidad comunitaria y en enfocado en el cuidado de su bienestar y en servicios de prevención.
La Coalición propone cinco fases interrelacionadas:
- Planificación concertada o colaborativa y desarrollo de capacidades;
- Medidas de acción e intervenciones específicas;
- Cambios en el sistema y la comunidad;
- Cambio generalizado de comportamientos;
- Mejora de los resultados para la salud de la comunidad.
La Coalición elaboró un plan de acción global que proponía 86 cambios en la comunidad. A través del programa “Elige Seis” también se ofrecieron recursos a colaboradores o socios clave para apoyar la implementación de seis puntos del plan de acción (por ejemplo, seis programas, prácticas o políticas nuevas o modificadas). Los recursos incluían subvenciones, apoyo técnico y materiales para el programa.
La Coalición contribuyó al logro de unos 675 cambios comunitarios entre el 2001 y el 2007. Algunos ejemplos incluyen los siguientes: la modificación de las horas de apertura de clínicas para aumentar el acceso, la adopción de líneas directrices o pautas sobre los cuidados clínicos, la inclusión de información sobre la salud en los boletines informativos de los vecindarios, el uso de las instalaciones de iglesias para actividades físicas y la creación de clubes de caminatas o senderismo. Los resultados de una evaluación participativa sugieren que la Coalición fue un catalizador eficaz para lograr cambios ambientales o en el entorno a fin de reducir las desigualdades en los niveles de salud relacionadas con la diabetes y las enfermedades cardiovasculares.
Algunos de los puntos fuertes más importantes de la Coalición fueron la amplia red social de contactos con que contaba el primer director del proyecto y el establecimiento de relaciones con un gran número de organizaciones comunitarias. Sin embargo, ciertos retos experimentados a la hora de implementar las mini-subvenciones, que incluyeron requisitos gubernamentales y una administración presupuestaria interna complejos, crearon tensión en las relaciones establecidas con estas organizaciones. Otro de los obstáculos fue la participación y colaboración limitadas por parte de la colectividad latinoamericana (una de las comunidades destinatarias u objetivo).
Entre el 2001 y el 2007, la Coalición recibió generosas subvenciones como parte de la Iniciativa REACH 2010 de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés). Una nueva subvención de cinco años recibida en el 2008 prevé la continuidad de esta iniciativa exitosa y posibilita más esfuerzos sostenidos a fin de reducir las disparidades en materia de salud. La modificación principal que se precisa hacer es elaborar una estrategia eficaz para incorporar a la comunidad latinoamericana en la iniciativa.
Ejemplo 2: Ayuda a Domicilio para Ancianos San Vicente y las Granadinas
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Carrie Mathews, Juno Lawrence, Patsy Wyllie, Rosita Alexander-Snagg
En agosto de 2002 se puso en marcha el programa de Ayuda a Domicilio para Ancianos, una iniciativa del gobierno de San Vicente y las Granadinas implementada por el Ministerio de Desarrollo Social para mejorar y apoyar la atención a los ancianos. Los beneficiarios proyectados eran personas mayores de 60 años, aisladas y confinadas en sus casas, y aquellos con necesidades particulares. El programa contaba con 92 proveedores de cuidados domiciliarios, 2 supervisores y un encargado de casos, y recibió apoyo de una iglesia local.
La misión de la iniciativa era ofrecerles a los ancianos un ambiente favorable y un sentimiento de pertenencia a la comunidad, y a la vez aumentar su autoestima y atender a sus necesidades básicas de salud y socioemocionales. La iniciativa proponía una estrategia holística, por un lado prestando cuidados asistenciales a los ancianos, y por otro, informando a los cuidadores sobre el estilo de vida de los ancianos y capacitándolos para atenderlos. Estos servicios eran brindados de forma gratuita a los beneficiarios.
La Cruz Roja de San Vicente y las Granadinas impartió cursos de capacitación en primeros auxilios a los cuidadores a domicilio. Las enfermeras ofrecieron cuidados de enfermería generales y supervisaron a los aprendices durante su internado (práctica de formación). El Ministerio de Salud envió representantes para ayudar en el programa de capacitación. Gracias a la participación y al apoyo de todos los ministerios, los servicios son ofrecidos en todas las áreas del país.
Actualmente, 450 ancianos se benefician de esta iniciativa, que se considera como una medida eficaz de reducción de costos ya que sería más oneroso para el gobierno prestar esos cuidados en un establecimiento residencial. Los indicadores sociales han cambiado; la ayuda familiar y comunitaria para los ancianos también ha mejorado. Los ancianos expresaron sentimientos de bienestar y seguridad, mientras que sus familiares declararon sentirse más tranquilos al saber que están bien atendidos.
En los distritos ha aumentado el uso de las instalaciones médicas. Los ancianos han comenzado a prestar más atención a su dieta y nutrición. Los encargados de formular políticas ahora comprenden mejor la posición de los ancianos en la sociedad. Los programas de capacitación también han sido una fuente de empleo para los proveedores de cuidados.
Sin embargo, faltó la participación de hombres en el proyecto como proveedores de cuidados, los recursos económicos y humanos fueron limitados, los materiales y equipos fueron insuficientes, y faltó apoyo por parte del sector privado. Asegurar que los beneficiarios legítimos tuvieran acceso al programa ha sido un reto continuo, al igual que limitar la interferencia política a un mínimo. Así mismo la iniciativa no tenía documentación oficial/formal ni un sistema de evaluación.
La iniciativa contribuyó a lograr cambios positivos para la comunidad de ancianos de San Vicente y las Granadinas. Debido a que la inciativa se encuentra en la fase de implementación y mantenimiento, deben hacerse evaluaciones continuas. Asimismo, es necesario considerar nuevas fuentes de financiamiento para sostener la iniciativa que, hasta ahora, ha dependido exclusivamente del gobierno.
Ejemplo 3: Programa Nacional de Bienestar en San Vicente y las Granadinas
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Carrie Mathews, Juno Lawrence, Patsy Wyllie, Rosita Alexander-Snagg
En el 2006, el Departamento de Educación Física y Deporte del Ministerio de Desarrollo Social de San Vicente y las Granadinas puso en marcha el Programa Nacional de Bienestar, que fue implementado a través de instituciones y grupos comunitarios. Entre las organizaciones e instituciones participantes se hallaban el Ministerio de Salud y Medio Ambiente, Hogares para Ancianos (Thompson Home, Golden Age Homes), el Penitenciario de Su Majestad y otros grupos comunitarios de varios distritos. La iniciativa estaba destinada a beneficiar a la población en general y, en particular, a personas relacionadas con las organizaciones e instituciones participantes.
Dado que las enfermedades crónicas no transmisibles constituyen un problema importante y urgente en San Vicente y las Granadinas, siendo responsables del 80% de las muertes en el país, la finalidad de la iniciativa era concientizar a los participantes sobre estilos de vida saludables y los beneficios de participar de manera regular en actividades físicas. Uno de los objetivos principales era modificar la creencia de que la salud es importante solamente cuando uno está enfermo y convencer a la población para adoptar una actitud más proactiva respecto a su salud.
Aunque no se hizo un seguimiento oficial ni se utilizó un sistema de evaluación, la ampliación o expansión del programa a otras comunidades ha sido una indicación positiva de que están occuriendo cambios. Las comunidades manifestaron ser más conscientes de la importancia de la actividad física y expresaron interés en participar en el programa. Asimismo, aumentó la utilización de recursos de la comunidad (por ejemplo, los centros comunitarios y sitios recreativos) y las instalaciones médicas en los distritos. El aumento de la actividad física de la población puso de relieve uno de los cambios positivos de comportamiento fruto del programa.
El estudio de caso puso de manifiesto algunos retos, como la falta de participación de hombres en el proyecto, la escasez de recursos humanos y económicos, materiales y equipo, y la falta de apoyo del sector privado. Además, el cambio en el emplazamiento o localidad de ciertas actividades dificultó la participación de algunos participantes. Será necesario conseguir un financiamiento adecuado de otras fuentes.
Ejemplo 4: Inuit Tutarvingat (Centro Inuit en la ONSA) Ottawa, Ontario, Canadá
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Katherine Minich, Suzanne Jackson
La Iniciativa Inuit Tutarvingat se puso en marcha en el 2000 en respuesta a la Comisión Real Canadiense sobre Pueblos Aborígenes (RCAP, por sus siglas en inglés). Las organizaciones participantes incluyeron el Centro Métis, el Centro de las Primeras Naciones y el Sector de Comunicaciones. La iniciativa tenía como objetivo beneficiar a la población Inuit, que presenta los índices de salud más bajos de Canadá. Los responsables de formular políticas, trabajadores gubernamentales y la población general son el público destinatario u objetivo de la iniciativa.
El principal propósito de la iniciativa es promover prácticas que le permitan a la población Inuit recuperar un estilo de vida saludable y mejorar su nivel de salud mediante la realización de estudios de investigación y difusión de sus resultados, actividades de educación y concientización, el desarrollo de recursos humanos y el intercambio de información sobre políticas y prácticas de salud específicas para la población Inuit. La iniciativa se propone lograr cambios en múltiples niveles: a nivel personal y en organizaciones, comunidades y la sociedad.
La iniciativa tiene 5 objetivos:
- Mejorar y promover la salud de la población Inuit mediante actividades basadas en el conocimiento;
- Promover la comprensión de los problemas de salud que afectan a la población Inuit;
- Facilitar y promover la investigación, y establecer relaciones de colaboración o asociaciones en ese campo;
- Fomentar la participación de la población Inuit en la prestación de servicios de salud;
- Reafirmar y proteger las prácticas tradicionales de curación Inuit.
Lograr cambios en la población Inuit ha sido difícil puesto que la población está dispersa en un vasto territorio. Además, dado que no existe un sistema formal de seguimiento o evaluación, es difícil cuantificar los cambios y resultados. La escasez de los datos étnicos que se recogen hace difícil determinar en qué medida se beneficia la población Inuit en general. Algunos productos y recursos se destinan a grupos específicos, pero su aceptación y efectos se desconocen. Sin embargo, los cambios a nivel de la organización han facilitado al personal la búsqueda de pequeñas subvenciones.
La iniciativa se ha topado con diversos obstáculos, entre ellos, la dificultad para retener al personal Inuit, desafíos relativos a las causas primeras de los problemas de salud de la población y cambios de gobierno que pusieron en cuestión la continuidad del financiamiento.
Aunque no se ha determinado la eficacia de la iniciativa debido a la falta de evaluación y seguimiento oficial, ésta parece ir por buen camino. Según la iniciativa, los comunicados están llegando a su público destinatario u objetivo, el Centro está ganando visibilidad y se han obtenido recursos y establecido relaciones de colaboración o asociaciones. Sin embargo, la iniciativa debe centrar sus esfuerzos en un menor número de problemas con proyectos más largos y globales, consolidar las relaciones de colaboración o asociaciones con sectores de salud y educación, y elaborar documentación sobre los objetivos. Asimismo, es necesario establecer y mejorar un sistema para evaluar y hacer un seguimiento del rendimiento de la iniciativa.
Ejemplo 5: Iniciativa de Escuelas Promotoras de la Salud Guyana
Agradecemos a los siguientes individuos e instituciones los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Anthony Hunte, Dionne Broone, Juno Lawrence, Lucy Anderson, Lydia Indira Badal, Preeta Sajwack, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación de Guyana
La iniciativa Escuelas Promotoras de la Salud se puso en marcha en 2002 en Guyana para responder a los crecientes problemas sociales y de salud relacionados con los estilos de vida y comportamiento en el país. Las principales organizaciones al frente de la iniciativa fueron el Ministerio de Salud y el Ministerio de Educación de Guyana, y la Organización Panamericana de la Salud (oficina de Guyana). Entre las organizaciones participantes se incluyeron el Consejo Caribeño para Ciegos, el Ministerio de Servicios Humanos y Seguridad Social, la Clínica Dental Cheddie Jagan, el Centro de Rehabilitación Ptolemy Reid, Money Gram, el Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Cultura, Juventud y Deporte, Organizaciones de Servicios Benévolos, el Programa de Avance Económico de Linden (LEAP, por sus siglas en inglés), el Cuerpo de Paz, la Cruz Roja de Guyana, la red nacional de mujeres y organizaciones de mujeres Women Across Difference (Mujeres más allá de las diferencias, posible traducción), el Banco Mundial y la Iglesia Anglicana de St. Sidwells.
La iniciativa fue implementada en guarderías infantiles y escuelas primarias y secundarias, así como en las comunidades respectivas en las que estaban situadas las escuelas. El público destinatario u objetivo incluyó las asociaciones de padres y maestros, los comités asesores para el progreso de la comunidad y niños en edad escolar de todos los grados.
La iniciativa tiene por objetivo crear ambientes de cooperación que promuevan cambios positivos por medio de actividades de educación y adquisición de competencias en los distintos grupos destinatarios u objetivo. La misión es “crear y sostener la capacidad de las comunidades escolares de integrar la salud en todos los aspectos de la vida escolar y mejorar la salud de los niños, estudiantes, maestros, padres, tutores y otros miembros de la comunidad escolar. La iniciativa está facilitando una colaboración más eficaz entre los servicios de salud primaria y las escuelas, mejorando su capacidad para detectar las necesidades de asistencia o apoyo y ofrecer con rapidez dicha asistencia médica a niños y jóvenes, frenando y previniendo de ese modo la adopción de hábitos dañinos para la salud como el tabaquismo, el consumo de alcohol y narcóticos, prácticas sexuales tempranas y/o peligrosas, y embarazos precoces no deseados. La OPS y el Ministerio de Salud ofrecieron ayuda técnica. La asociación de padres y maestros aportó los recursos humanos y varias organizaciones internacionales ofrecieron el financiamiento.
Según la iniciativa, no es posible describir los logros y/o resultados de Escuelas Promotoras de la Salud debido a la falta de un sistema formal de evaluación o seguimiento que permita recopilar de manera periódica los datos necesarios para respaldar cualquier afirmación. Sin embargo, las comunidades participantes han señalado que se han producido ciertos cambios en el comportamiento de padres e hijos.
Los retos variaron según las diferentes etapas de la iniciativa. En la etapa de planificación, hubo una falta de acuerdos oficiales entre las partes interesadas pertinentes, y se careció del financiamiento adecuado y de personal capacitado. Durante la etapa de implementación, no existían sistemas oficiales de seguimiento para controlar los progresos realizados, ni estrategias eficaces para asegurar una buena comunicación con el público y entre las partes interesadas con relación a la iniciativa.
La iniciativa se mantendrá gracias al apoyo de las Unidades de Salud Escolar dentro de los Ministerios de Salud y Educación. Ambas unidades tienen la responsabilidad de coordinar las actividades dentro de cada ministerio y compartir esa información con el otro ministerio a través de un pequeño comité.
Ejemplo 6: Iniciativa para la Calidad de Vida de Crooked Creek – Un proyecto de desarrollo comunitario en Indianápolis, Indiana, Estados Unidos
Autores: Alicia Chadwick, Corporación de Desarrollo Comunitario del Noroeste de Crooked Creek; Helen W. Lands, Centro Vecinal de Fay Biccard Glick en Crooked Creek; Mary Beth Riner, Escuela de Enfermería de la Universidad de Indiana, y Marty Rugh, St. Vincent Health
El objetivo de la iniciativa era mejorar la calidad de vida de los residentes de un vecindario geográficamente definido de una gran ciudad de la región del centro-oeste de Estados Unidos. Una junta consultiva/consejera supervisó la realización de una evaluación global a cargo de estudiantes de enfermería que se utilizó para elaborar una propuesta de financiamiento para un grupo asesor nombrado por el alcalde de la ciudad. Al usar el modelo Municipios, Ciudades y Comunidades Saludables de la OPS, varios sectores de la comunidad aunaron sus esfuerzos para examinar las condiciones que promueven la salud y el bienestar. Entre las organizaciones participantes se incluían un hospital, una agencia de servicios sociales, una agencia de promoción de viviendas y una universidad.
Las metas de la Iniciativa para la Calidad de Vida de Crooked Creek proponían mejorar la calidad de vida de los residentes de Crooked Creek mediante la revitalización de los entornos construidos (edificios comerciales y comunitarios, viviendas, carreteras, aceras, etc.), el establecimiento de nuevas relaciones de colaboración o asociaciones entre organizaciones de los sectores de la salud, educación y servicios sociales, y la participación de los residentes en el mejoramiento de la comunidad. Entre las iniciativas emprendidas para lograr estos objetivos cabe señalar: inversiones en un programa de viviendas para residentes de bajos y medianos ingresos; la construcción de un Pabellón Familiar para responder a las necesidades cívicas, sociales, intergeneracionales, culturales y recreativas de los residentes y las familias de Crooked Creek, y la creación de un Programa de Salud Escolar para estudiantes locales.
Se construyó el Pabellón Familiar Fay Biccard Glick en Crooked Creek, que actualmente proporciona un excelente espacio para encuentros comunitarios, actividades juveniles, familiares y recreativas, y locales asequibles para recepciones de bodas, reuniones familiares, ceremonias de graduación, días de puertas abiertas y servicios religiosos. El Programa de Salud Escolar amplió el ámbito de prestación de servicios de salud más allá de los muros tradicionales del hospital y forma parte ahora de una visión más global para contribuir al fomento de comunidades saludables. Los consejos escolares han adoptado políticas escolares más saludables y son capaces de abordar problemas crónicos como el asma, la obesidad y el ausentismo. Las inversiones en viviendas permitieron terminar tres residencias colectivas para doce residentes con discapacidades (la más reciente de ellas construida con métodos ecológicos), y se efectuaron costosas reparaciones en las casas de 33 propietarios ancianos, además de asesorar a unos 60 posibles compradores de casas sobre el proceso de adquisición y dar ayuda financiera a 12 vecinos de Crooked Creek para la entrega inicial de su primera casa.
El proyecto Pabellón Familiar se topó con varias dificultades, como por ejemplo el contratista original abandonó la obra a medio camino, causando un retraso de ocho meses y costos de construcción superiores a los presupuestados inicialmente. Fue necesario contratar a otro contratista y obtener fondos suplementarios para completar la obra. El Programa de Salud Escolar resultó ser más complejo cuando los socios del programa se dieron cuenta de que había que adaptar las intervenciones al carácter único de cada una de las escuelas para responder a las necesidades de su población estudiantil particular. El programa de inversiones en viviendas concluyó que los proyectos eran sostenibles solamente si la organización continuaba obteniendo fondos del sector público y privado para financiar los proyectos.
Entre las lecciones aprendidas gracias a la implementación de la iniciativa destacan: 1) Las organizaciones individuales se fortalecen al establecer relaciones de colaboración; una organización nueva y sin experiencia se beneficia al asociarse con una organización consolidada, lo que a su vez puede incitar a otras organizaciones a apoyarla también. Por su parte, las organizaciones ya establecidas se benefician de la energía y aspectos empresariales del establecimiento de nuevas organizaciones. 2) Tener un buen plan con datos precisos es fundamental para obtener financiamiento y apoyo. 3) Los encargados de implementar la iniciativa deben asegurar que la dirección (altos directivos y miembros del consejo) participen y se mantengan informados constantemente a fin de asegurar la sostenibilidad de la iniciativa a largo plazo. De no ser así, se corre el riesgo de que la iniciativa sea reemplazada por un programa nuevo, lo que no significa necesariamente que sea mejor.
Ejemplo 7: La salud participativa: la experiencia de Guarulhos, São Paulo, Brasil
Autores: Rosilda Mendes, Paulo Fernando Capucci, Douglas Brandalise, Emilia Broide. También agradecemos a Jonas Diaz por asistir en la preparación de este estudio de caso.
La iniciativa se lleva a cabo en Guarulhos, Sao Paulo, como una de las estrategias para responder a los problemas relacionados con la salud y las condiciones de vida, y tiene como objetivo promover y mejorar la participación popular y establecer una vía de comunicación que permita incluir en la elaboración de políticas de salud las necesidades expresadas por la población. El proyecto prioritario Salud Participativa funciona mediante la promoción de foros locales abiertos al público que se celebran cada dos años. Entre 2005 y 2007 se celebraron un total de 37 foros en los que participaron 5.700 representantes de comunidades locales, profesionales de la salud, gerentes de salud, ONG, iglesias, etc.
El principal objetivo de la iniciativa es aumentar el control por parte de la población de sus servicios de salud y la gestión de las políticas públicas relacionadas con la salud, y ayudar a determinar el estado de salud prevalente en áreas específicas al menor nivel posible de división del espacio urbano local. La iniciativa se puso en marcha en 2005 con foros de Salud Participativa celebrados en veintidós áreas de la ciudad, junto con Foros Presupuestarios Participativos. En el 2007, se celebraron Sesiones Plenarias de Salud Participativa en cada uno de los Distritos de Salud que se habían organizado como base para la gestión de la salud. Desde las primeras Sesiones Plenarias, se ha elegido a unos 1.300 representantes para integrar Consejos de Salud locales para las 65 Unidades Básicas de Salud, hospitales y centros de salud especializados del municipio. Para finales de 2009, se celebrarán 14 Foros.
Los Consejos de Salud locales han ampliado su ámbito de acción de modo que han pasado de intervenir en cuestiones de salud locales a abordar cuestiones sociales de mayor alcance. Así pues, las intervenciones están orientadas ahora a los problemas cotidianos locales que sufren las comunidades. El Proyecto ha dado lugar a un cambio en la política de salud y ámbitos relacionados a la administración municipal. Se ha reconocido públicamente que el hecho de que la orientación de las discusiones se centre en la política de salud pública es fruto de la iniciativa. Se han registrado mejoras en las Unidades Básicas de Salud en cuanto a la calidad de la atención médica ofrecida. Además, se han realizado importantes avances en la identificación de necesidades de salud más específicas expresadas por la población. El hecho de que el público haya tomado control de las cuestiones de salud ha creado una nueva tendencia en la población, que en lugar de simplemente formular quejas populares, se esfuerza por elaborar propuestas específicas para que se realicen cambios en el sector de la salud y se obtenga mayor apoyo del mismo. El público entiende ahora, por ejemplo, la lógica de invertir en la atención de salud primaria a través de Unidades Básicas de Salud, en lugar de aumentar el número de grandes hospitales. Se han producido cambios positivos relacionados con el establecimiento de mecanismos de participación en los que participan numerosos actores locales. No obstante, se ha dado entre los Consejos la tendencia a un cierto exclusivismo que ha dificultado el logro de una participación social más plena.
Entre las lecciones aprendidas en esta experiencia figura la necesidad de garantizar el apoyo del gobierno local a fin de incrementar con éxito la participación social y mejorar la planificación de actividades a fin de garantizar la sostenibilidad del proyecto. Definir el presupuesto, un elemento central para apoyar las actividades permanentes necesarias para el proyecto, es bastante compleja y requiere la participación de numerosos actores. Lo más importante para el proyecto es que no debería mantenerse al margen de las actividades y políticas locales. Por consiguiente, debe ser abierto y no imponérsele límites preestablecidos.
Ejemplo 8: Iniciativa de Escuelas Saludables en los Departamentos de Asunción, Central, Misiones, Itapúa y Cordillera. Paraguay
Autor: Dirección General de Promoción de la Salud del Ministerio de Salud Pública y Bienestar Social.
La iniciativa de Escuelas Saludables comenzó en Paraguay en la década de 1990, impulsada por el Ministerio de Salud con el apoyo de la Organización Panamericana de la Salud. Su objetivo era promover la salud en el entorno escolar y el desarrollo integral de los niños y niñas dentro de la comunidad educativa.
En el año 2000 se puso en marcha un proyecto piloto en 17 escuelas distribuidas por áreas urbanas, periurbanas y rurales de los Departamentos Central, Cordillera y Misiones. En cada escuela seleccionada se creó un Comité de Gestión integrado por autoridades escolares, padres, estudiantes y representantes de organizaciones e institucionales locales. Las 17 escuelas centraron su intervención en cuatro áreas: atención de salud primaria, infraestructura, capacitación y proyectos participativos. Aunque este esfuerzo empezó inicialmente con gran impulso, no fue posible mantenerlo con el tiempo. No obstante, el proyecto creó un terreno fértil que permitió mantener una serie de iniciativas en el marco de Escuelas Saludables y, en ocasiones, sirvió de elemento catalizador para poner en marcha nuevos procesos.
En octubre del año 2008 las autoridades del nuevo gobierno relanzaron la iniciativa Escuelas Saludables, en el marco de un proyecto conjunto entre los Ministerios de Salud y de Educación. Se llevó a cabo una evaluación de datos para analizar conjuntamente y lograr un consenso sobre los criterios de acreditación. Se establecieron alianzas de cooperación estratégica con organizaciones tales como el programa VIDA (de prevención de enfermedades cardiovasculares) y con organismos internacionales como UNICEF, PNUD y FNUAP. Las acciones emprendidas en esta etapa han otorgado importancia al interés profundo y constante de todas las partes interesadas. Conviene señalar que el Ministerio de Educación y Cultura ha modificado el programa de estudios de educación secundaria técnica en el ámbito de la salud a fin de reorientarlo hacia la promoción de la salud, contribuyendo de ese modo al proceso de implementación de las iniciativas de Escuelas Saludables.
Uno de los retos de esta iniciativa ha sido que numerosas experiencias en el ámbito de la salud escolar se describen a sí mismas como una iniciativa de Escuelas Saludables o Escuelas Promotoras de la Salud, a pesar de que no se hayan establecido criterios uniformes para esta designación. Estas experiencias son promovidas por distintos sectores: el municipio, distritos de salud, el gobierno local y la comunidad educativa. El objetivo actual es unificar la Estrategia mediante la elaboración de criterios de acreditación que orienten a las instituciones en la formulación de líneas de acción, junto con un sistema de seguimiento. La meta actual es elaborar una estrategia unificada en 40 escuelas seleccionadas de 5 regiones. Se establecerán condiciones de base, junto con un sistema para recopilar y analizar datos de forma continua y sistemática.
Entre las dificultades encontradas destacan: (1) los recursos limitados y la dispersión de esfuerzos de la Dirección General de Promoción de la Salud, lo que entorpeció el mantenimiento del proceso, y (2) la falta de coordinación dentro de los programas del Ministerio de Salud, que dificultó una acción integrada basada en objetivos comunes.
Entre las lecciones aprendidas se incluyeron: la necesidad de recopilar y analizar datos de forma sistemática, difundir información entre las principales partes interesadas de manera que se puedan evaluar los resultados, y la necesidad de empoderar a la comunidad (gobiernos locales y otros actores sociales) a fin de evitar que los procesos no obtengan resultados concluyentes.
Facilitar la interpretación colectiva del concepto de Escuelas Saludables ayudará a los actores sociales a identificar los factores de protección y fomentar respuestas eficaces. Son las instituciones gubernamentales quienes deben asumir principalmente la responsabilidad y vincular los esfuerzos con los de otras instituciones que operan en esta área. La estrategia de Escuelas Saludables crea una oportunidad para transformar el entorno escolar en un espacio que fomente la producción social de salud.
Ejemplo 9: Promoción de entornos y estilos de vida saludables en escuelas primarias de cuatro estados mexicanos México
Autores: Luz Arenas Monreal, Pastor Bonilla Fernández, Cristina Caballero García, Elba Abril, Héctor Hernández P., Sofía Cuevas B.
En el año 2006, el Instituto Nacional de Salud Pública (INSP) de México puso en marcha el proyecto Promoción de Espacios Saludables en Escuelas de Nivel Primario en cuatro estados mexicanos, en colaboración con los Servicios de Salud de los estados de Guerrero y Jalisco, el Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo y escuelas públicas de los estados de Morelos, Jalisco, Guerrero, y Sonora. Este proyecto fue financiado por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología. Utilizó un enfoque integrado para mejorar el entorno físico, emocional y social de los niños en edad escolar y abordó problemas que afectan a esta población tal como el sobrepeso, la obesidad, las adicciones, la degradación medioambiental y la violencia familiar y social.
En un primer momento se organizaron grupos de reflexión con profesores de cuatro Estados para ayudar a identificar los determinantes de la salud (condiciones de vivienda, trabajo y educación; entorno físico; factores psicosociales; redes de apoyo social y familiar; etc.) que afectaban a la población en las áreas en las que se realizaría la iniciativa. Las principales características observadas entre las familias de los niños en edad escolar fueron: baja clase social, bajo nivel educativo de los padres, pobreza y migración a Estados Unidos. Durante la primera fase se recopilaron datos de medición preliminar como el peso/edad, peso/altura, edad/ altura, prevalencia de caries y tabaquismo, obteniéndose los siguientes resultados: coexistencia de malnutrición y sobrepeso u obesidad en niños de todas las escuelas participantes, alta prevalencia de caries y un porcentaje importante de niños que actualmente fuman y/o consumen bebidas alcohólicas.
Durante la segunda fase se realizaron intervenciones educativas sobre temas tales como la autoestima y la cultura de paz, la protección y el cuidado del medio ambiente, la prevención del tabaquismo y la nutrición e higiene. Como resultado de ello, se observó una mejora del nivel de conocimientos relacionados con una alimentación sana y una higiene adecuada, así como una mejora de las competencias relacionadas con la separación de desechos y el cuidado de los recursos naturales. Los profesores señalaron un descenso de la violencia y un mayor uso de medios más pacíficos para resolver los conflictos entre los escolares. Se crearon dos comités de salud: uno de niños y otro de padres. Se establecieron vínculos entre las escuelas y los centros locales de salud para facilitar el acceso de los niños a los servicios de salud.
Los niños mostraron dificultades para aplicar fuera del entorno escolar lo que habían aprendido gracias a la iniciativa, lo que puso de relieve las limitaciones de iniciativas centradas exclusivamente en las escuelas que no incluyen a la comunidad en su conjunto. Hubo dificultades también para influir en los organismos responsables de elaborar las políticas públicas (venta de alimentos sanos en las escuelas y sus proximidades) en los Estados de Guerrero y Morelos. En los Estados de Jalisco y Sonora, donde ya existían reglamentos sobre la venta de alimentos en las escuelas, la iniciativa logró sensibilizar a las familias acerca del consumo de alimentos sanos.
Este proyecto contribuyó a la inclusión de enfoques de promoción de la salud más integrados en las iniciativas emprendidas por el INSP, como por ejemplo promover el establecimiento de un grupo de estudio sobre la Promoción de Estilos de Vida Saludables.
Ejemplo 10: El Movimiento de Salud Mental Comunitaria de Bom Jardim, Fortaleza Brasil
Agradecemos a Maria Gabriela Curubeto Godoy la cual asistió en la preparación de este estudio de caso.
El Movimiento de Salud Mental Comunitaria de Bom Jardim, en Fortaleza, Brasil, se propone ofrecer servicios a las personas con distintos tipos de enfermedades mentales a fin de mejorar su integración en la comunidad y promover el empoderamiento a nivel individual, de grupo y social. Se ha implementado en 22 centros comunitarios de 5 vecindarios situados en el área del “Gran Bom Jardim” del municipio de Fortaleza. La iniciativa centra sus esfuerzos en las familias de riesgo, vulnerables, que viven en una pobreza extrema. Este grupo de población se caracteriza por un bajo nivel educativo, desempleo, falta de oportunidades y baja autoestima.
La iniciativa comenzó cuando dirigentes y misioneros de iglesias locales que trabajaban en la región formaron un grupo de voluntarios para ofrecer refugio y orientación o consejería a la población que en ese momento no tenía acceso a servicios de salud mental. En un principio, los esfuerzos para hacer participar al gobierno local fueron inútiles. No obstante, con el cambio de gobierno en el 2005, la iniciativa adquirió mayor reconocimiento e impulso, lo que permitió establecer una serie de alianzas y aumentar el flujo de recursos para ampliar las intervenciones y servicios. Entre las partes interesadas que participan actualmente en la iniciativa figuran los departamentos de salud locales y estatales, la población indígena, universidades locales, el sector privado, las ONG que trabajan con jóvenes delincuentes y el Programa PETI (Programa para Erradicar el Trabajo Infantil).
La iniciativa incorporó diversas estrategias para lograr sus objetivos. Se establecieron grupos de terapia comunitaria, así como otros grupos destinados a facilitar procesos terapéuticos personales dentro de acciones colectivas (bio-danza, terapia a través del arte, grupos de fomento de la autoestima, etc.). Se ofrecieron talleres y sesiones de masoterapia, reiki y técnicas de respiración y relajación. Se organizaron eventos teatrales y musicales en lugares públicos a fin de facilitar una apropiación por parte de la comunidad de lugares que habían estado dominados por el tráfico de drogas y la violencia. Se ofrecieron gratuitamente a todos los miembros de la comunidad actividades culturales y artísticas como clases de música, lengua, pintura y teatro. Se estableció un jardín y una farmacia comunitarios, y se ofreció formación profesional a los jóvenes. Por último, se llevaron a cabo esfuerzos para integrar a las personas con enfermedades mentales en estas actividades a fin de apoyar un proceso para disminuir el estigma asociado con los problemas de salud mental y apoyar la desinstitucionalización de estos pacientes.
Se han señalado resultados positivos fruto de esta iniciativa. La actitud general de la comunidad respecto a cómo tratar a los grupos de población subatendidos ha cambiado de una perspectiva personal a una perspectiva colectiva y social. La identidad de la comunidad ha mejorado de tal modo que los habitantes de Bom Jardim se muestran orgullosos de su vecindario, mientras que antes de la iniciativa lo describían como feo y violento. Se ha establecido una red para ayudar a los miembros de la comunidad a cuidarse mejor a sí mismos. Se han creado nuevos vínculos con otras partes interesadas que trabajan en la comunidad y con el sector privado. Los jóvenes de la comunidad afirman sentirse más motivados para lograr un nivel de estudios superior y el estigma asociado con los problemas psicológicos ha disminuido. Además, la iniciativa ha recibido reconocimiento nacional y diversos galardones nacionales y regionales.
Entre los desafíos encontrados en la implementación de la iniciativa se incluyen los cambios de gobierno que provocaron demoras e incertidumbre sobre la continuidad de la iniciativa, las dificultades para mantener y aumentar los recursos a medida que la iniciativa se ampliaba, y la resistencia de otras instituciones a colaborar con las actividades de la iniciativa.
Las enfermedades mentales llevan asociado un importante estigma social, sobre todo cuando se trata de grupos de población pobres y con acceso a escasos servicios. Esta experiencia demostró la viabilidad de empoderar, mejorar el capital social y ampliar las actividades terapéuticas y educativas para estos grupos de población. Asimismo, promovió una nueva forma, inclusiva y transformadora, de considerar las cuestiones relacionadas con la salud mental.
Ejemplo 11: Iniciativa Rostros, Voces y Lugares en el municipio de Corredores, Costa Rica
Agradecemos a los siguientes individuos e instituciones los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Gerardo Galvis, Idalí Ledesman, Sandra Murillo, Xinia Bustamante, el equipo local de salud de Ciudad Neilly, el Municipio de Seguridad Alimentaria de Corredores.
La iniciativa Rostros, Voces y Lugares (RVL) en Corredores, Costa Rica, comenzó en el año 2006 en el marco de una iniciativa de alcance más amplio iniciada en 1998 con el objetivo de mejorar la seguridad alimentaria y nutrición en la región. En Corredores, la iniciativa centró sus esfuerzos también en los ámbitos del agua y saneamiento. En ella participaron el Ministerio de Salud, el gobierno municipal, escuelas locales, el mercado Paso Canoas, la Asociación de Acueductos Rurales, INCAP/OPS, servicios locales de salud, grupos comunitarios y el Comité de Seguridad Alimentaria local. Se estableció una oficina de RVL en el municipio a fin de facilitar las actividades de coordinación, implementación y seguimiento. La organización comunitaria existente permitió un mayor compromiso de todos los actores participantes para trabajar en colaboración.
La iniciativa trabajó con mujeres, poblaciones indígenas y niños en el marco de diversos proyectos como el cultivo de alimentos y la elaboración de pan. Niños en escuelas participaron en el diseño e implementación de programas de reciclaje en sus escuelas. Se estableció un jardín comunitario en dos comunidades indígenas con producción de alimentos para fines de abastecimiento de la población y venta. Se ofreció formación /capacitación y recursos a las personas que trabajaban en la eliminación de desechos sólidos (guantes, atuendo apropiado), y se estableció un comité local de eliminación de desechos sólidos para mejorar la capacidad y dotar de mayor dignidad a este importante trabajo, lo cual contribuyó al desarrollo local y la sostenibilidad medioambiental.
La iniciativa promovió una mayor sensibilización sobre cuestiones relacionadas con la seguridad alimentaria y la nutrición, no sólo a nivel de los hogares individuales, sino también a escala comunitaria. Los índices de mortalidad infantil han disminuido en Corredores desde el inicio de esta iniciativa, lo que se atribuyó a la mayor sensibilización y educación de la población. Todas las madres reciben actualmente atención prenatal independientemente de su situación social. Se observó también un mayor nivel de empoderamiento comunitario, donde los miembros han demostrando más confianza para identificar problemas y examinar soluciones de forma conjunta. Los profesionales de la salud también indicaron sentirse más motivados para trabajar en la comunidad.
Trabajar dentro del marco de la iniciativa RVL ayudó a atraer atención nacional a esta región del país, lo que dio lugar a un incremento del compromiso y los recursos disponibles para trabajar con estas comunidades y grupos de población vulnerables. Los esfuerzos realizados para resolver problemas relacionados con la seguridad alimentaria, el agua y el saneamiento ayudaron también a identificar otros problemas importantes para la comunidad como la degradación medioambiental y la violencia intrafamiliar, y tener una influencia en los mismos. Como resultado de ello, la orientación de la iniciativa cambió para centrar su atención en los determinantes de la salud, aunando los esfuerzos de diversas instituciones y sectores, y poniendo de relieve sus papeles para lograr el bienestar de la comunidad.
La ausencia de una buena gestión o administración a nivel nacional y entre algunas de las instituciones participantes fue uno de los desafíos importantes señalados. La falta de seguimiento por parte del personal técnico a nivel nacional, debido principalmente a la ubicación remota del municipio, creó varias dificultades. El alto nivel de abandono escolar por parte de los niños para trabajar en los campos también dificultó el éxito de la iniciativa, a pesar de que los directores de las escuelas hicieran algunos esfuerzos para asegurar que los niños siguieran asistiendo a la escuela.
Gracias a su planteamiento de abordar distintos determinantes de la salud, esta iniciativa mejoró de forma exitosa la calidad de vida de la comunidad habilitando a las mujeres a ser más independientes y a desempeñar un papel más proactivo a escala individual, familiar y comunitaria, mejorando el acceso a los alimentos y la calidad de los mismos, e incrementando los ingresos familiares. La iniciativa ayudó a fortalecer la cohesión social y la capacidad de la comunidad de organizarse y participar activamente en la búsqueda de soluciones a sus propios problemas. Esta experiencia pone de relieve la importancia de no limitarse a identificar los problemas que afectan a una comunidad, sino también comprender sus causas subyacentes y la capacidad de la población para tomar decisiones y actuar tanto a nivel individual como colectivo.
Ejemplo 12: Detección precoz del cáncer de mama mediante servicios móviles de mamografía Uruguay
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Adriana Serra, Elena Garcia Martinez, Maria Isabel Ressio Charvet, Mariana Perera, Mario Gonzalez, Rosana Díaz Rus
La iniciativa de Unidades Móviles de Mamografía, que forma parte del Programa de Detección Oportuna del Cáncer de Mama coordinado por la Comisión Honoraria de Lucha contra el Cáncer, se inició en 2003 en cuatro municipios del estado de Colonia en Uruguay, a saber, Juan Lacaze, Colonia Valdense, Nueva Helvencia y Rosario. Su objetivo era mejorar la detección precoz de tumores malignos y mejorar el cuidado de la salud propia y las autoexploraciones mamarias en las mujeres de estos municipios o municipalidades. Antes de ponerse en marcha esta iniciativa, las mujeres residentes en esta área remota del país no tenían acceso a servicios mamográficos, lo que las obligaba a desplazarse a la capital del estado para recibir esos servicios. Esta situación afectaba de forma desproporcionada a las mujeres de los sectores más pobres de la comunidad.
Diversas partes interesadas locales participaron en la etapa de planificación de la iniciativa mediante el establecimiento de un Comité Local en cada uno de los municipios o municipalidades seleccionados. Este Comité Local recaudó fondos para sufragar los costos de desplazamiento de la clínica móvil a las comunidades y pagar los servicios de los profesionales de la salud de la clínica. Los miembros de la comunidad se ofrecieron también a transportar hasta la clínica a las mujeres que no podían desplazarse por sus propios medios, ya fuera por razones de distancia o por sufrir alguna discapacidad física. Debido a la disponibilidad limitada de los servicios móviles en cada comunidad, los esfuerzos se centraron principalmente en las mujeres de 40 ó más años de los vecindarios más pobres y sin acceso regular a servicios de salud.
De las aproximadamente 10.500 mujeres mayores de 40 años que vivían en esos municipios o municipalidades, la iniciativa logró realizar una mamografía a 5.392, esto es, alrededor de un 51% de ese grupo de población. La demanda de estos servicios fue alta. Aunque se utilizaron el 100% de las citas médicas disponibles, cada municipio todavía tenía una larga lista de espera de usuarias que habrían deseado ser examinadas. Como resultado de ello, se instalaron dos equipos mamográficos permanentes en dos de las localidades incluidas en esta iniciativa. A pesar de que estos servicios sólo están disponibles actualmente en clínicas privadas, fue gracias a la demanda de este tipo de servicios por parte de la población.
La iniciativa se enfrentó al principio a cierta resistencia. Algunas mujeres no sabían bien en qué consistía una mamografía, por lo que se sentían temerosas y ansiosas de someterse al examen. Por ello, fue importante explicarles los aspectos científicos del examen y asegurarse de que entendieran los importantes beneficios del mismo. Como resultado de ello, se creó una campaña informativa que fue presentada por dirigentes locales a través de los medios de comunicación a fin de responder a las principales inquietudes de la población con relación a los exámenes mamográficos.
La iniciativa tuvo éxito asimismo en lograr una mayor sensibilización acerca del cáncer de mama mediante una campaña continua destinada a mejorar los conocimientos de las mujeres sobre su cuerpo y sus derechos. Estos esfuerzos mejoraron la atención prestada por las mujeres a su propia salud, así como sus conocimientos sobre el cáncer de mama, aunque también hizo que fuera difícil para la iniciativa responder a la demanda de servicios que generó este incremento de conocimientos.
Los municipios incluidos en esta iniciativa contaban con un alto nivel de organización y participación comunitaria, lo que contribuyó enormemente al éxito de la planificación e implementación de las actividades. No obstante, surgieron importantes rivalidades entre estos lugares, lo que dificultó el establecimiento de redes y vínculos de colaboración.
La iniciativa también dio lugar a la elaboración y desarrollo de dos importantes políticas, a saber, una que permite a las mujeres tomarse un día libre por año para someterse a una mamografía, y otra que ofrece mamografías gratuitas cada dos años (bienales) a las mujeres con edades comprendidas entre los 40 y 59 años.
Ejemplo 13: Iniciativa de Azucarlito como lugar de trabajo libre de humo de tabaco en Uruguay
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Adriana Serra, Elena Garcia Martinez, Maria Isabel Ressio Charvet, Mariana Perera, Mario Gonzalez, Rosana Díaz Rus
La iniciativa de “Edificio sin humo de tabaco” de la empresa Azucarlito se puso en marcha en 2002 con el objetivo de mantener un entorno de trabajo sin humo de tabaco en una fábrica azucarera de Paysandú, en Uruguay. La iniciativa comenzó en respuesta al interés manifestado por la dirección de la fábrica y un grupo de empleados en trabajar en un entorno laboral sin humo de tabaco. Un estudio inicial preliminar determinó que el 10% de los trabajadores de la fábrica eran fumadores. Los programas establecidos anteriormente para ayudar al personal a dejar de fumar no habían sido eficaces.
En un principio se llevaron a cabo actividades destinadas a mejorar los conocimientos sobre las consecuencias negativas del tabaquismo y los beneficios de mantener espacios libres de humo de tabaco. Asimismo, se discutieron las diferencias existentes entre “fumadores activos” y “fumadores pasivos”. Se establecieron grupos, moderados por un médico y un especialista en promoción de la salud, para discutir las responsabilidades individuales y colectivas respecto a la salud de todos los trabajadores. Se crearon también grupos de apoyo para las personas que deseaban dejar de fumar. Por último, la alta dirección de la fábrica instituyó una política en la que declaraba a Azucarlito como un “lugar de trabajo libre de humo de tabaco” y estipulaba las sanciones que se aplicarían a quienes infringieran las nuevas reglas establecidas.
Como resultado de la iniciativa, muchos de los miembros del personal dejaron de fumar, mientras que otros redujeron considerablemente el número de cigarrillos que fumaban al día. La iniciativa atrajo la atención de los medios de comunicación, que promovieron a Azucarlito como el “Primer lugar de trabajo libre de humo de tabaco” del país, haciendo que otras organizaciones pusieran en marcha sus propias iniciativas para asegurar espacios de trabajo sin humo de tabaco.
El liderazgo y coordinación ejercidos por un organizador comunitario de la Comisión Honoraria de Lucha contra el Cáncer fue fundamental para el éxito de la iniciativa, junto con la amplia participación y apoyo de todos los niveles dentro de la compañía. La compañía Azucarlito había expresado su compromiso de proteger la salud de sus trabajadores, lo que permitió obtener apoyo de los niveles superiores de gestión dentro de la compañía. Otro de los factores esenciales señalados para el éxito de la experiencia fue el liderazgo ejercido por un gerente particular antiguo fumador que había sufrido graves problemas de salud a consecuencia de su hábito de fumar. Los trabajadores también participaron activamente en todas las etapas de la iniciativa. Entre los desafíos encontrados destaca la resistencia de los fumadores de la compañía, sobre todo de los niveles superiores de gestión, a participar en las actividades y programas de la iniciativa.
La iniciativa de Azucarlito como edificio libre de humo de tabaco estableció un importante e innovador modelo para los programas y políticas de promoción de la salud en Uruguay. La experiencia recibió reconocimiento nacional y fue reproducida en distintas instituciones. Sirvió también como modelo para la elaboración del Decreto nacional 268/05, que prohíbe fumar en todos los espacios cerrados del país como parte de la iniciativa nacional de espacios 100% libres de humo de tabaco.
Ejemplo 14: Convertir a la Intendencia Municipal de Rivera en un lugar de trabajo libre de humo de tabaco Uruguay
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Adriana Serra, Elena Garcia Martinez, Maria Isabel Ressio Charvet, Mariana Perera, Mario Gonzalez, Rosana Díaz Rus
La iniciativa para convertir a la Intendencia Municipal de Rivera en un lugar libre de humo de tabaco fue iniciada en 2004 con el objetivo de transformar el edificio principal de la Intendencia del municipio de Rivera en un lugar de trabajo sin humo. La iniciativa fue concebida e implementada por el personal de la Intendencia Municipal y un coordinador de la Comisión Honoraria de Lucha contra el Cáncer. Se colaboró también con el programa de radio “Entre Todos”, que ayudó a difundir información sobre la iniciativa y sus resultados entre la población general.
En un primer momento se estableció un grupo de trabajo llamado “Grupo Pro Calidad de Vida”, integrado por miembros del personal y la dirección de distintos departamentos de la Intendencia Municipal, al que se le ofreció un espacio de oficina con acceso a teléfono, computadora, impresoras e Internet. El grupo de trabajo se reunió regularmente para examinar las decisiones y actividades relacionadas con la iniciativa. Durante el curso del proyecto, este grupo evolucionó para adaptarse a las necesidades de las diversas tareas y etapas de la iniciativa. La diversidad del grupo y el alto nivel de compromiso y participación de sus integrantes fueron destacados como uno de los principales factores que contribuyeron al éxito de la iniciativa.
Una de las principales contribuciones de este grupo fue la redacción de una política interna relativa al tabaquismo en el lugar de trabajo. Esta política, una vez aprobada, llevó a la creación de áreas designadas para fumadores y transformó la Intendencia Municipal de Rivera en la primera 100% sin humo de tabaco de Uruguay. Se implementaron también programas para ayudar a dejar de fumar, que fueron ofrecidos a todo el personal. La iniciativa fue reconocida oficialmente por la oficina del Intendente o Alcalde y la autoridad legislativa de la ciudad aprobó un cambio en la legislación municipal para apoyar la iniciativa. La participación del Intendente o Alcalde en las actividades aumentó durante el curso de la iniciativa. Los sindicatos locales apoyaron también los esfuerzos realizados.
Se preparó una campaña de sensibilización y concientización para compartir información acerca de la magnitud del problema y los riesgos del humo de tabaco directo e indirecto para los trabajadores del edificio. Para ello se realizaron presentaciones y se impartieron talleres en los que participaron un oncólogo y profesores universitarios, y se utilizaron carteles, pegatinas y otros materiales publicitarios como alfombrillas para ratón de computadora. Asimismo, se colocaron ceniceros en lugares estratégicos con carteles para recordar a las personas la obligación de apagar sus cigarrillos antes de entrar al local.
Uno de los desafíos vividos al principio fue el hecho de que la contaminación por el humo del tabaco en los lugares de trabajo no era percibida como un problema por el personal, la dirección e incluso los servicios de salud. A medida que las personas se fueron sensibilizando y concientizando gracias a los esfuerzos de la iniciativa, la cuestión empezó a ser percibida como un problema que era necesario resolver. Otro de los efectos positivos observados fruto de la iniciativa fue la percepción por parte del personal local de salud respecto a cómo se ve afectada la salud de la población por el humo del tabaco. Este fenómeno hizo que los servicios de salud apoyaran las actividades de la iniciativa y que hubiera una mayor promoción de las políticas locales públicas para luchar contra la contaminación por humo de tabaco en los espacios de trabajo.
Un factor importante que dificultó el éxito de esta iniciativa fue la falta de voluntad por parte de ciertos miembros del personal para dejar de fumar en el trabajo. La política tenía por finalidad que los fumadores abandonaran su hábito o limitaran su consumo de tabaco a las áreas no relacionadas con su trabajo. No obstante, se necesitaron esfuerzos intensos y constantes para hacer respetar la normativa a fin de reducir considerablemente la contaminación por humo de tabaco en el lugar de trabajo.
La iniciativa ha sido sostenible y ha logrado mantener un buen nivel de participación a fin de consolidar los resultados obtenidos. El nivel de contaminación por humo de tabaco en el edificio ha disminuido, junto con el número de fumadores entre los miembros del personal. La política de prohibición de fumar en el lugar de trabajo está bien establecida y es respetada. Actualmente, los esfuerzos del grupo de trabajo se centran en documentar la experiencia a fin de optimizar la difusión de sus resultados y las lecciones aprendidas en la comunidad y entre los profesionales de la salud.
Ejemplo 15: Promoción, prevención y educación comunitaria en salud cardiovascular en Tala, Uruguay
Agradecemos a los siguientes individuos los cuales asistieron en la preparación de este estudio de caso: Adriana Serra, Elena Garcia Martinez, Maria Isabel Ressio Charvet, Mariana Perera, Mario Gonzalez, Rosana Díaz Rus
Esta iniciativa comunitaria, que se puso en marcha en 2002 en el municipio de Tala, Canelones, se proponía promover una mejor comprensión de un concepto integral de la salud y fomentar la adopción de estilos de vida saludables. En la iniciativa participaron el gobierno local, organizaciones comunitarias, servicios de salud públicos y privados, escuelas rurales y urbanas, iglesias locales, la Comisión Honoraria para la Salud Cardiovascular, universidades, organizaciones deportivas, profesionales de la salud, trabajadores comunitarios de la salud y dirigentes comunitarios. En un primer momento se realizó un estudio preliminar para evaluar el perfil de la población y los principales problemas que la aquejaban. El estudio puso de relieve el envejecimiento de la población, que se veía afectada por una gran cantidad de problemas de salud prevenibles. Estos problemas eran causados principalmente por cambios en los hábitos alimentarios, el estilo de vida sedentario, el alcoholismo, el tabaquismo, el alto consumo de drogas psicoactivas y el deterioro de las condiciones sociales, económicas y medioambientales que afectaban la salud cardiovascular. El desempleo era particularmente alto, sobre todo entre la población rural. Los servicios de salud se centraban casi exclusivamente en ofrecer tratamiento, sin existir apenas actividades de promoción, prevención y educación.
Las actividades fueron diversas e incluyeron entre otros una campaña mediática de amplio alcance acerca de la importancia de llevar un estilo de vida saludable, la integración de equipos de salud en las escuelas, el establecimiento de grupos comunitarios y la realización de actividades de desarrollo de capacidades. Este esfuerzo inicial dio lugar a una serie de proyectos (eliminación adecuada de desechos, control de vectores, prevención de ETS, abuso de sustancias y violencia familiar, etc.), que siguieron todos ellos la misma orientación de acción estratégica y se centraron en los grupos de población más vulnerables, así como los grupos con riesgos específicos de sufrir enfermedades cardiovasculares (obesidad, diabetes, adicciones, etc.).
Entre los resultados observados destacan: mayor sensibilización entre los profesionales de la salud acerca de la importancia de promover estilos de vida saludables y una mejor comprensión de las estrategias y mecanismos de promoción de la salud; mayor aceptación de los esfuerzos realizados de forma participativa y con la comunidad; aumento de los conocimientos y hábitos saludables entre los adolescentes y los ancianos; mayor participación y menor aislamiento de la población anciana; mejor comprensión de las cuestiones relacionadas con la salud escolar gracias a la implementación de un sistema más eficaz de seguimiento y referencia de pacientes; y el establecimiento de grupos de salud comunitarios tales como “Adultos en Movimiento”, que trabaja para prevenir la violencia doméstica.
Uno de los factores importantes que apoyó la iniciativa fue el cambio del gobierno nacional ocurrido en 2005, y dio lugar a un incremento de los avances tecnológicos e hizo que los medios de comunicación prestaran mayor atención a las cuestiones de salud. Este cambio de gobierno también conllevó a un cambio estructural en el sistema de salud, dotándolo en lo sucesivo de una mayor orientación hacia la promoción y educación, y fortaleciendo las estrategias de atención primaria de la salud. Como consecuencia de ello se dio inclusión a distintos actores sociales locales en el proceso de toma de decisiones, lo que facilitó enormemente la planificación e implementación de la iniciativa, y lo que a su vez suscitó un mayor interés en la iniciativa por parte de la comunidad y fomentó su compromiso con la misma.