Formulario de búsqueda

Sección 3. Obtener el apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario

  • ¿Qué significa obtener el apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

  • ¿Por qué se necesita del apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

  • ¿De quién se necesita el apoyo?

  • ¿Cuándo intentar obtener apoyo?

  • ¿Cómo obtener apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

El parque alguna vez había sido el centro de la vida en el vecindario. Ahí, los niños solían jugar entre sus árboles, la gente mayor se sentaba y charlaba en las bancas, algunas personas trotaban y las familias habían hacían ahí sus picnics. En la noche, las parejas acostumbraban pasearse por los senderos bien alumbrados o buscaban privacidad en las sombras. Había sido una especie de isla verde cuidadosamente celada en medio de un mar de concreto y asfalto, y los vecinos residentes solían tratarla como una extensión de sus propias casas.

Ahora, sin embargo, el parque era un adefesio. Raramente se cortaba el pasto; había ramas en el suelo debajo de los árboles, y el césped estaba en muy mal estado. Los niños ya no jugaban allí, porque el parque era peligroso aun durante el día.  Las únicas personas que lo usaban ahora eran las pandillas y los traficantes de drogas; ir de noche era prácticamente un suicidio.

Unas cuantos vecinos recordaban cómo solía ser el parque y querían que de nuevo volviera a ser la sala de estar del vecindario. Para que esto sucediera, tenía que haber dinero para limpiarlo y mantenerlo, y policías y patrullas vecinales para mantenerlo seguro. Los residentes del vecindario podían hacerse cargo de gran parte del trabajo... sin embargo, tendrían que apoyar la idea y comprometerse con ella.

Los integrantes del grupo básico de trabajo de la iniciativa fueron puerta a puerta, colocaron carteles, hicieron llamadas telefónicas y organizaron reuniones. Fueron los anfitriones y asistieron a todas las reuniones, en las cuales discutían acerca del parque y su futuro, y poco a poco se fueron ganando el apoyo de la gente.  Luego de muchos meses, organizaron una reunión pública a la cual invitaron a las autoridades locales pertinentes, tales como el alcalde, el jefe de la policía y el director de la secretaría de parques de la ciudad, así como al público en general.

La mayoría de los funcionarios públicos asistió y se encontraron rodeados de residentes del vecindario que les preguntaban qué iban a hacer ellos en lo referente al parque.  Mucha gente en la reunión ofreció su tiempo, ya fuera para ayudar a arreglar o a mantener  el parque o a patrullarlo. Al término de la reunión, el alcalde había prometido dinero para arreglar el lugar, el jefe de la policía había prometido patrullas extra y un comité de residentes había sido elegido para trabajar y asegurarse de que las promesas fueran cumplidas.

El apoyo público es generalmente el factor crucial para generar cambios en situaciones locales. Si se está preocupado por recuperar un parque, por cambiar la forma en la que se proveen los servicios médicos o por persuadir a la gente para alterar su comportamiento para su propio beneficio o el de la sociedad (dejar de fumar, escoger a un chofer designado), el peso de la aprobación pública puede inclinar la balanza a favor.

Otras secciones en este capítulo abordan formas de educar al público acerca de sus problemas. Esta sección se trata de cómo obtener (y usar) el apoyo público para garantizar que se aborden los asunto que necesitan atención. En cierta forma, ésta es la sección central de este capítulo, porque es acerca de cómo hacer llegar un asunto particular no sólo a la conciencia pública sino también a la agenda oficial pública, que es donde el cambio de políticas tiene lugar.

¿Qué significa obtener el apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

Contar con el apoyo público real vale más que contar con gente que entienda el asunto o inclusive con un grupo de personas que quieran presentarse y hablar en un mitin o en una reunión pública. En realidad, se puede decir que se cuenta con el apoyo público cuando la respuesta de la mayoría de personas ante una situación dada sea: “Por supuesto que tenemos que hacer algo sobre esto. ¿Qué estamos esperando?”

Para llegar a este punto, se tiene que hacer trabajo preliminar, el mismo mencionado en otras secciones de este capítulo:

Una vez que se hayan concretado estas metas, se estará listo para convencer a las personas sobre la relevancia del asunto para ellas y la comunidad, de forma tal que se entienda que tratarlo es una responsabilidad individual y de la comunidad en conjunto. Cuando la gente acepte esa responsabilidad, respaldarán cualquier esfuerzo para tratar el asunto. A esto le llamamos apoyo público.

¿Por qué se necesita del apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

Ésta puede parecer una pregunta tonta, pero es sorprendente cuán a menudo el ganar apoyo público es ignorado. Muchas iniciativas u organizaciones parecen sentir que su causa es tan obviamente justa y lógica que la gente la apoyará automáticamente. No contemplan la necesidad de cultivar ese apoyo, y como resultado, normalmente no lo obtienen. Después, cuando no logran alcanzar sus metas, no pueden entender el porqué.

El apoyo público es importante por ciertas razones:

  • El apoyo público presta credibilidad a la campaña para el cambio comunitario. No son sólo la organización o iniciativa determinada quienes creen que el asunto debe ser tratado, es la comunidad como un todo.
  • Cuanto más respaldo de obtenga, más se seguirá cosechando. Como señala Everett Rogers, en La difusión de las innovaciones (Diffusion of Innovations), una vez que una nueva idea alcanza altos niveles de aceptación, esa idea se vuelve la norma. Una vez que el apoyo público alcance dichos niveles, tratar el asunto será, como solía decir un intuitivo proveedor de servicios sociales, tan necesario “como el cuerpo de bomberos”. Nadie cuestionará que es una prioridad de la comunidad o que los recursos de la comunidad se utilicen para tratarlo.
  • Se necesita apoyo para cualquier acción que se tome. Cuanto más apoyo público se tenga, la labor no sólo parecerá más razonable, sino también más apropiada.
  • Si se está luchando por alcanzar una meta política – por ej. un cambio en una ley o política – se necesita la fuerza de las masas. El apoyo público quiere decir que se puede ejercer más presión sobre políticos y funcionarios públicos, ya que perciben que ésta proviene de una mayoría, no del margen político.
  • El apoyo público significa que la comunidad se ha apropiado del asunto, haciendo más posible no sólo que sea abordado, sino que continúe siendo abordado a largo plazo. Una vez que el asunto esté en la conciencia comunitaria, no desaparecerá.

¿De quién se necesita el apoyo?

Cuando nos referimos a “apoyo público,” ¿del apoyo de quién estamos hablando?  El ideal, claro está, es el de todos en la comunidad, pero hay algunos individuos y grupos particulares a los cuales se debe prestar atención.

Cuanto más se sepa de la comunidad y del asunto, más efectivamente se podrá captar a las personas y organizaciones cuyo respaldo es importante para el esfuerzo en cuestión. En el libro Creación de la agenda de trabajo (Agenda-Setting) (1996), Everett Rogers y James Dearing señalan que a nivel nacional en EE. UU., hay dos factores que virtualmente garantizan a un asunto un lugar en una agenda de trabajo: una mención por parte del presidente del país y cobertura por el periódico The New York Times. A nivel local, esto se interpreta como una mención por parte del alcalde o del consejero de la ciudad, o un artículo en el periódico local.

En cambio, la falta de atención de una persona clave o los medios de comunicación puede causar que la opinión pública no considere a un asunto importante, lo cual es generalmente influenciado por lo que éstos últimos definen como tal. Como Dearing y Rogers sugieren, en el caso del SIDA en la década de los ochenta, el Presidente Reagan contribuyó al retraso de la difusión de información acerca de la epidemia con simplemente ignorarla (33).

Por tanto, en los esfuerzos por ganar apoyo público, es necesario prestar especial atención a lo siguiente:

  • Líderes comunitarios y otros individuos influyentes. El clero, los líderes empresariales, gente conocida por brindar servicios a la comunidad, los héroes deportivos locales o personalidades de los medios de comunicación y los ciudadanos con alto nivel de credibilidad comunitaria pertenecen a esta categoría. Una vez que se los tenga a bordo, muchos otros los seguirán.
  • Funcionarios de los medios de comunicación. El poder de los medios de comunicación para divulgar una causa es obvio. Si la iniciativa puede contar con algunos periodistas claves o ejecutivos de la prensa, su trabajo será mucho más fácil.
  • La gente más afectada por el asunto. El apoyo de estas personas también le presta credibilidad al esfuerzo y proporciona una reserva de información de primera mano acerca de los efectos del asunto en cuestión, la cual puede ser usada para educar al público.
  • Legisladores. Ya sea que se intente o no influenciar las leyes o políticas, es importante tener a quienes las crean como aliados. Ellos pueden ayudar a mantener el asunto en la vista pública y su apoyo ayudará a obtener el de sus partidarios también.
  • Activistas.  Quienes participan en tratar asuntos comunitarios normalmente son electores potenciales y saben cómo hacer que sus voces sean escuchadas.
  • Líderes de opinión. En La difusión de las innovaciones (Diffusion of Innovations), Everett Rogers los describe como la gente que está entre los primeros en intentar nuevas cosas o adoptar nuevas ideas y quienes influencian las opiniones de los demás. Cuantos más de estos pioneros se pueda atraer, mejor.

¿Cuándo intentar obtener apoyo?

Obtener el apoyo público para un asunto determinado es un proceso continuo; sin embargo, existen momentos y circunstancias cuando podría ser particularmente productivo:

  • Cuando hay una crisis que esté relacionada con el asunto. Un monumento histórico está a punto de ser demolido; los fondos para una muy necesitada clínica de salud comunitaria acaban de suspenderse; los leñadores ya están empezando a talar un área de selva virgen. Situaciones como éstas (desgraciadamente) presentan oportunidades para reunir apoyo público.
  • Cuando el asunto ha alcanzado un punto en el que ya no puede ser ignorado. Cuando la gente sin hogar se muere de frío en las puertas de las casas porque no hay camas disponibles en los refugios o cuando el número de casos de SIDA se dispara, la gente está más deseosa de aprobar esfuerzos para tratar los asuntos involucrados.
  • Cuando el número de personas afectadas por el asunto alcanza niveles críticos. En el punto en el cual casi todos conocen, o saben de alguien afectado, el público está generalmente más que listo para defender intentos para lidiar con el asunto.
  • Cuando nueva información llama la atención hacia el tema. Un estudio universitario que muestra un incremento local de una condición o enfermedad particular o la publicación de un reporte de una agencia de protección ambiental que revela un vertedero de contaminantes en ríos locales puede ayudar a obtener apoyo por lo que la iniciativa está haciendo.
  • Cuando una publicación o un reporte en los medios que no haya sido iniciado por la organización en cuestión destaque el asunto. Un nuevo libro o un reporte de investigación pueden incrementar la conciencia pública sobre el  asunto y sumarle más seguidores.

En 1962, el libro El otro Estados Unidos: Pobreza en Estados Unidos, (The Other America: Poverty in the United States), de Michael Harrington, impulsó el apoyo público para la creación de programas de erradicación de la pobreza y la discriminación. Harrington puso de relieve un asunto que mucha gente había ignorado o pasado inadvertido, y cambió el clima político para crear aceptación general por una campaña contra la pobreza.

  • Cuando un evento crucial hace el asunto en cuestión más visible. Un evento que no esté directamente relacionado con el asunto puede de todas formas proveer una oportunidad para conseguir apoyo público.

Con la formación de la Unión Europea surgieron los trabajos internacionales y los estándares de calidad. Algunos fabricantes estadounidenses se dieron cuenta que posiblemente no podrían competir en el mercado laboral internacional al menos que trabajaran en mejorar las habilidades básicas de sus trabajadores. Los defensores de la alfabetización de los adultos aprovecharon la oportunidad para ganar respaldo para la educación en los centros de trabajo.

Como resultado, muchos fabricantes colaboraron con organizaciones de alfabetización adulta u otras para proveer clases de inglés, lectura, escritura y matemática para los empleados en el centro de trabajo. Las clases beneficiaron a los trabajadores individualmente, pero también a los empleadores, creando una fuerza de trabajo que pudiera entender mejor y mantener la seguridad y los estándares de los productos, y que pudiera ser más adaptable y productiva.

  • Cuando la situación política es la adecuada.  Una elección cercana, presión sobre los políticos u oficiales para tratar el asunto o un referéndum; todas éstas pueden convertirse en buenas ocasiones para obtener apoyo público.

¿Cómo obtener apoyo público para tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario?

Si se han estado siguiendo las sugerencias en este capítulo, se ha estado organizando una campaña de comunicación y de educación pública que asegure que la comunidad esté alerta y que entienda el asunto. Tal vez la iniciativa haya creado un ingenioso eslogan o un deslumbrante logotipo que la gente identifique con el esfuerzo. Quizás haya estado analizando también posibles acciones para atender el asunto.

Ahora se está en la etapa en la cual es importante hacer que el público asuma responsabilidad personal y comunitaria por el asunto.  Lograr esto conllevará a que los legisladores cambien leyes y políticas y que los individuos cambien su comportamiento para tratar el asunto.

Dos tipos de cambio

La mayoría de cambios en la comunidad requieren un cambio en una política oficial o no oficial; otros requieren cambio individual; y algunos requieren ambos.

Los cambios en la política son necesarios cuando no sucederán de otra forma. Unas cuantas corporaciones e inmobiliarias prestan atención a las consideraciones ambientales, por ejemplo, porque realmente están preocupados por ellas y porque consideran la responsabilidad ambiental como parte de su compromiso con la comunidad. La mayoría, sin embargo, preferirían que no se los moleste para que hagan lo que les plazca y, por lo general, no creen en la seriedad de las consecuencias ambientales de sus prácticas. Si tienen su sede en otro lugar, pueden tener poco compromiso con las comunidades donde operan. En tales casos, algunas leyes o regulaciones son necesarias para salvaguardar los recursos públicos y comunitarios.

El cambio de comportamiento individual puede llevar al cambio comunitario cuando el asunto está bajo el control de individuos, al menos una vez que tengan la información correcta. Dejar de fumar, adoptar prácticas de salud preventivas y comprometerse a comprar productos orgánicos son tres ejemplos de acciones que los individuos pueden tomar que pueden resultar en cambios mayores en la comunidad.

A veces, sin embargo, se requiere tanto de cambio político como individual para crear cambio en la comunidad. Un programa de reciclaje no resultará al menos que los individuos se comprometan a separar su basura y a cualquier otra tarea asociada con ello. Pero también se necesita de políticas comunitarias que hagan posible el reciclaje (y, aun mejor, que lo faciliten). Una madre que maltrata a su hijo tiene que poner un fin a su rabia y aprender a relacionarse con su hijo de maneras más apropiadas; pero también tiene que haber un mecanismo legal para proteger al niño del maltrato hasta que eso suceda, si sucede.

Por tanto ¿cómo realmente obtener respaldo público para tratar el asunto de interés?  Aparte de los tipos de comunicación señalados en otras secciones de este capítulo y en el Promover el interés en asuntos comunitarios, existe un número de vías para obtener y fortalecer el apoyo público para el asunto que se está tratando.

Conceptualizar el asunto adecuadamente

  Enfocar el asunto significa definirlo a éste y a su contexto. Usted quiere proyectar el asunto bajo una luz que hará que el mayor número de gente quiera apoyarlo.

  • Tratar el asunto como de interés general, no extremista ni radical, y definirlo claramente.
  • No hacer declaraciones infundadas o que la mayoría percibiría como extremas o ilógicas.En una campaña contra el maltrato infantil, por ejemplo, probablemente no sea útil el asegurar que cualquier golpe a un niño constituye un  maltrato.  La mayor parte de las personas ha tenido la experiencia de haber ocasionalmente recibido una nalgada o un pequeño golpe por parte de sus padres, y no lo ven como un maltrato (y de hecho no han sufrido efectos negativos por ello).  Las personas que usen o no el castigo físico con sus propios hijos, pueden considerar que la afirmación de que “todo golpe es maltrato” es demasiado extremista para ser aceptada.

A pesar de que nunca se deben hacer declaraciones infundadas, hay excepciones a la otra mitad de esta regla. Cuando se tienen pruebas contundentes de que se está en lo cierto, y la interpretación propia es necesaria para tratar el asunto efectivamente, se podría tener que confrontar algunos prejuicios de la comunidad. Muchos individuos (y comunidades) consideran, por “sentido común”, que la educación sexual en las escuelas otorga a los adolescentes permiso para ser sexualmente activos. En realidad, estudios tras estudios muestran que la educación sexual casi siempre reduce el nivel de actividad sexual adolescente y además incrementa las prácticas sexuales seguras y reduce el embarazo adolescente. Los estudios también han mostrado que las campañas de abstinencia sexual y a las drogas son casi completamente inefectivas entre los adolescentes.

A veces es necesario usar estadísticas dramáticas e investigación respetada para intentar sacar a la gente de lo que “saben” y convencerlos de los hechos.

  • Cuando sea posible, enfatizar el terreno común y los valores universales o casi universales.  “Todos queremos que nuestros hijos estén sanos”.  “Todo el mundo necesita beber agua segura”.

Enlistar a miembros respetados de la comunidad como representantes y portavoces de la iniciativa. La lista de portavoces potenciales es larga, y similar a aquella de las personas cuyo apoyo se necesita, dada anteriormente, con unas cuantas adiciones:

  • El clero y otros líderes religiosos comunitarios.
  • Líderes empresariales.
  • Activistas.

Mientras que el respaldo de un activista percibido por la comunidad como peligroso o al margen de la ley puede dañar la causa, el apoyo de personas de todas partes del espectro político puede ayudarla. Cuando liberales, conservadores y aquellos en el medio estén de acuerdo con que un asunto es importante, la mayoría de la gente convendrá.

  • Figuras locales del entretenimiento y el deporte.
  • Respetados miembros de la comunidad.  Estos pueden incluir a personas sin cargos oficiales, pero que son conocidas por su sabiduría, dedicación al servicio comunitario u otros buenos atributos.
  • Funcionarios elegidos o nombrados de quienes se cree que anteponen el bienestar público al suyo propio.
  • Líderes de opinión.
  • Personas afectadas por el asunto, ya sea directa (víctimas de violencia juvenil) o indirectamente (médicos de sala de emergencias que tratan víctimas de violencia juvenil).
  • Autoridades reconocidas en el asunto – investigadores, académicos, profesionales, etc.

Hacer una causa común con otros grupos. Tratar de atraer a otros grupos que compartan la preocupación por el asunto o que pueden ser convencidos de hacerlo. Algunas posibilidades:

  • Coaliciones.
  • Comunidades religiosas y asociaciones clericales.
  • Organizaciones vecinales y otros grupos de base.
  • Agencias o iniciativas con propósitos o metas similares a la de la organización en cuestión. Una campaña para prevenir la violencia juvenil, por ejemplo, puede encontrar cosas en común con las escuelas, organizaciones de liderazgo juvenil y otros grupos que se preocupan por el bienestar de los niños y jóvenes.
  • Organizaciones profesionales interesadas en el asunto.

Hacer una causa común con otros grupos. Tratar de atraer a otros grupos que compartan la preocupación por el asunto o que pueden ser convencidos de hacerlo. Algunas posibilidades:

  • Coaliciones.
  • Comunidades religiosas y asociaciones clericales.
  • Organizaciones vecinales y otros grupos de base.
  • Agencias o iniciativas con propósitos o metas similares a la de la organización en cuestión.  Una campaña para prevenir la violencia juvenil, por ejemplo, puede encontrar cosas en común con las escuelas, organizaciones de liderazgo juvenil y otros grupos que se preocupan por el bienestar de los niños y jóvenes.
  • Organizaciones profesionales interesadas en el asunto.

Volverse la autoridad. Siempre se debe hacer tarea y ser capaz de responder a críticas contra el esfuerzo que se realiza. El grupo debe saber tanto como sea posible sobre el asunto y debe poder demostrar por qué es necesario abordarlo, y por qué necesita ser tratado de formas particulares (si eso es parte de la campaña).

Si el grupo puede contrarrestar los argumentos contra él, entonces puede ser tiempo de reevaluar su posición. ¿Son algunos de sus planteamientos imprecisos? Es mejor hacer lo que más ayude a la comunidad que tratar de verse bien no admitir que se está equivocado.

Aprovechar las oportunidades. Cuando los eventos que discutimos antes en “¿Cuándo se intentar obtener apoyo?” sucedan, se deben aprovechar y señalar cómo demuestran la necesidad de tratar el asunto.  Se puede emplear el conocimiento y estatus como experto para mostrar a la gente lo que se puede hacer para cambiar la situación. Nunca se debe dejar pasar una oportunidad de ganar apoyo.

Usar los medios de comunicación. Estableciendo una relación mutuamente benéfica con los periódicos locales, radio y televisión (incluyendo las estaciones de cable de acceso público), la organización en cuestión puede difundir su mensaje al público y formar una base de apoyo público.

Usar el Internet. Una página Web comunitaria, un foro en línea, un grupo de chat o una lista electrónica de distribución pueden ser herramientas efectivas para recaudar apoyo comunitario y mantener a la gente informada.  También proveen una manera fácil y rápida de organizar a los seguidores para la acción.

Obtener apoyo de un individuo y de una organización a la vez, así como dirigirse a grandes multitudes a través de los medios de comunicación y otros métodos similares. Por lo general, el apoyo público se va formando con el tiempo a través de varios contactos personales.

Una vez que se tenga a un individuo a bordo, tal vez se pueda persuadirlo de ser el anfitrión de una fiesta donde sus amigos y conocidos discutan el asunto o de participar en una charla comunitaria. Tal vez esa persona simplemente hablará sobre el asunto con sus amigos, quienes a su vez lo hablarán con sus amigos. Se puede llegar a mucha gente de esta forma.

La gente confía más en quienes conocen. Se puede ganar una gran cantidad de apoyo, especialmente en un vecindario cerrado o un pueblo pequeño tan sólo con hablar con la gente.  No se debe dejar pasar la oportunidad.

Pedirle a la gente que haga algo, en lugar de sólo contarles sobre el asunto. Es más probable que la gente apoye el tema si se sienten efectivos al hacerlo. Darles una oportunidad para influenciar los resultados de tratar un asunto les da el control del proceso. Algunas cosas que el público puede hacer:

  • Escribir, llamar o mandar correos electrónicos a los políticos a los cuales se les pedirá ayuda.
  • Reportar casos de maltrato, venta de drogas, desnutrición infantil, etc.
  • Unirse a una vigilancia vecinal u otro grupo activo.
  • Cambiar su comportamiento, aunque sólo sea temporalmente: dejar de fumar por un día, verificar su presión arterial, hablar con una persona sin hogar.
  • Ir a una reunión o mitin.
  • Ser voluntario, ya sea para una organización de servicio directo o para una iniciativa o coalición.
  • Llevar a cabo una fiesta o una reunión en casa para hablar sobre el asunto.

Crear actividades o eventos para destacar el asunto y también comprometer al público. Algunos ejemplos incluyen organizar la limpieza de un terreno baldío con labor voluntaria, y un mitin nocturno contra la violencia callejera. Cada uno de estos eventos tienen  consecuencias: el primero podría resultar en convertir el terreno limpio en un parque infantil; el segundo podría conllevar a crear un programa de vigilancia vecinal o una campaña para garantizar la seguridad de las calles durante las noches.

A medida que el apoyo crezca, demostrarlo en cada oportunidad. La mayor parte de las personas quieren estar dentro de la gran mayoría. Si están convencidas que brindarle a la iniciativa su apoyo es respaldar a un vencedor, seguramente lo harán.

Reconocer y premiar a los miembros de la comunidad que tomen acciones para resolver al asunto y que demuestren su apoyo por las labores de la iniciativa, ya sean o no  parte de la campaña.  Algunas personas que merecen condecoraciones son:

  • Políticos que apoyen la causa de la organización y que intenten cambiar la política para resolver el asunto.
  • Voluntarios de la comunidad.
  • Organizaciones – o sus directores o personal – que realicen un trabajo destacado por el asunto.

Cuando se otorga un premio o se lleva a cabo una ceremonia de reconocimiento, se debería tener a los medios de comunicación presentes.

Celebrar los logros públicamente.

Ceder el control de la iniciativa a la comunidad, si eso es factible. Una comunidad puede estar más deseosa de apoyar algo que sea visto como un movimiento nativo, de la comunidad. La organización y su personal deben seguir participando, pero no necesariamente como líderes de la iniciativa. Si se debe poner el control en manos de la comunidad o no, depende de la situación y de qué se necesite hacer.

Seguir adelante y conservar el apoyo. Una vez que se haya ganado el apoyo público, es necesario mantenerlo. No se debe dar por sentado el apoyo de un grupo o individuo, en vez de ello, se debe seguir manteniendo el contacto y conservar ese respaldo. Se debe también continuar tratando de incrementar el apoyo añadiendo gente y grupos nuevos en cada oportunidad posible.  Lo ideal es que cada persona y organización en la comunidad apoye la iniciativa.  Probablemente nunca se alcance esta meta, pero si se intenta, seguramente se obtendrá un sólido y poderoso apoyo comunitario que asegurará que el asunto de interés sea tratado.

En resumen

El apoyo público real es más que simplemente el conocimiento del público acerca de determinados asuntos. Implica que la mayoría de gente considere que necesitan ser resueltos lo más pronto posible para el bienestar de la comunidad.

El apoyo público es crucial, porque presta credibilidad a las labores de la organización determinada, ayuda a obtener más apoyo, provee fuerza para actuar o presión política y crea apropiación comunitaria sobre el asunto y responsabilidad por las medidas para tratarlo. Para formar apoyo público, se necesita primero el apoyo de individuos claves y de grupos en la comunidad – figuras reconocidas a quienes la gente escuche o que gocen de credibilidad por su relación con el asunto en cuestión.

Obtener el apoyo público es un proceso constante – de hecho, nunca debe detenerse –, pero puede ser especialmente efectivo cuando el asunto es resaltado por una crisis o por eventos o situaciones particulares. La información o publicaciones nuevas que llamen la atención al tema pueden ser también usadas como ventaja, como también lo puede ser la situación política. Cualquier momento cuando el asunto esté frente al público es adecuado para tratar de recaudar apoyo comunitario.

En realidad, obtener apoyo público requiere prestar atención a diferentes cosas:

  • Definir el asunto. Esto incluye conceptualizarlo apropiadamente, reclutar a las personas adecuadas como representantes o portavoces, aliarse a otras organizaciones con intereses comunes y volverse reconocido como autoridad en el asunto.
  • Comunicarse con miembros de la comunidad. Se debería usar cada oportunidad posible – tanto las que se presentan por circunstancia, como las que la organización pueda crear – y cada posible forma – los medios de comunicación, Internet, el contacto personal – para obtener el apoyo público.
  • Pedirle a la gente hacer algo que los ayude a sentir que tienen un efecto en el asunto e incitarlos a participar en encontrar y ejecutar una solución para éste.
  • Divulgar el apoyo con el que se cuenta y los logros. Organizar actividades y eventos, otorgar premios, organizar festejos, publicar boletines con los logros de la iniciativa.  Se le debe hacer saber a la comunidad que la iniciativa tiene una base principalmente comunitaria.
  • Darle el control de la iniciativa a la comunidad, si eso es posible; de esta forma la organización establece su base comunitaria.
  • Seguir adelante y mantener el apoyo indefinidamente.

Es casi imposible tratar asuntos de salud y desarrollo comunitario efectivamente sin un amplio apoyo comunitario.  Si se pueden utilizar las estrategias sugeridas en esta sección para obtener ese apoyo, se está en buen camino para llegar al estado de salud y desarrollo que la comunidad necesita.

Contributor 
Phil Rabinowitz

Recursos en línea

Building Your Online Community & Social Media Presence is a helpful PDF booklet from SCRA, covering case studies, targeting, branding, backchannel, and advocacy. More information, including webinars and training, can be found here as well.

Community-Based Projects Help Scholars Build Public Support. An article about community-based research and public support from LOKA, a non-profit in Amherst, MA.

The Collaboratory for Community Support, an Ann Arbor, MI, research and consulting firm that helps communities generate cross-sector, comprehensive approaches to dealing with community issues.

Engaging Public Support for Teachers' Professional Development, An article from the NEA Foundation for the Improvement of Education (the National Education Association is America's largest teachers' union). A description of some local efforts

Healthy Communities Resources from TomWolff.com
Information and links on building healthy communities from Tom Wolff's website.

Recursos impresos

Dearing, J., & Everett M. (1996). Agenda-Setting. Thousand Oaks, CA: Sage Publications, Inc.

Rogers, E. (1995). Diffusion of Innovations. New York, NY: Free Press.